Familia

Unos días tranquilos hemos vivido, aún sigo en busca de Bernie y Camille, sé que se esconden en las montañas pero en un lugar espeso.

Mi bella esposa lleva un embarazo perfecto, no ha tenido complicación alguna, cada día me maravilló al ver su vientre, esos cachorros no se quedan quietos ni por momento.

Hoy sentí la presencia de mi familia, como sabrán decidí tener un poco de ayuda, al menos mientras mis hijos nacen.

Mis familiares venían llegando, sé que era mi madre, mi padre, ellos venían con un invitado especial, por el olor solo pude detectar que era alguien marino.

Entré a mi habitación, Lila está recostada, ya está llegando a los últimos días de embarazo así que se hace un poco más duro.

Su rostro está radiante, sus mejillas son rosadas y mantiene una serenidad que yo no podría.

Me acerco a ella y toco su vientre, estos niños tienen una fiesta allá adentro, poco a poco mi esposa abre los ojos.

Lenox: Hola mi amor.

Lila: Cariño perdóname otra vez me dormí.

Sus mejillas ahora están rojas, no sé por qué le avergüenza lo que pasa, es normal que se sienta cansada.

Lenox: Tienes que descansar amor, pronto llegarán los cachorros y estoy seguro que ellos no nos dejarán dormir.

Lila: Ya pude escuchar sus pensamientos.

Lenox: ¿Hablas enserio?

Lila: Si amor, inténtalo tú, pon la mano en mi vientre y despeja la mente, ese par viven en conflicto diariamente.

Puse mi mano en su vientre, cerré mis ojos y puse la mente en blanco, poco a poco iba escuchando susurros.

“Quita tu pata, me estás lastimando”

“Este es mi lado, quítate tu”

Lila: ¿Los oyes?

Lenox: Si, es irreal lo que escucho.

Lila: También sé que son una niña y un niño.

Lenox: ¿cómo lo averiguaste?

Lila: Escuché una conversación donde los dos discutían por qué a uno le sobresalía algo de la entre pierna y al otro no.

No pude evitar soltar una carcajada, así que tendremos una parejita.

Lenox: No sé qué haría sin ti, cada día me das una alegría nueva.

“Pronto, en pocos días la luna dará a luz, esos niños deben ser nuestro junto con ella”

La conexión seguía abierta, a lo lejos escuché una orden, inmediatamente mi cuerpo se tensionó.

Lila: ¿Qué pasa amor?

Lenox: Nos atacarán, el objetivo eres tú y los bebés.

Lila: ¿Qué tan cerca están?

Lenox: Mucho, lo escuché fuerte y claro.

Lila se levantó de la cama, vi que se le dificultaba un poco, mis hijos sí que eran grandes.

Lila: ¿Dime qué quieres que haga?

Lenox: Por ahora mantener la calma, mis padres están cerca, sabes que yo te voy proteger.

Lila: Lo sé, pero también sabes que últimamente he estado débil, ni siquiera la sangre tuya me da fuerza.

Abrace a mi esposa por la espalda, mis manos acariciaban su vientre.

Lenox: Lo que te está pasando es producto del embarazo, tan pronto finalice serás de nuevo invencible.

Sentí como empezó a llorar, esto era algo con lo que los últimos días he lidiado, mi esposa cambia de estado de ánimo cada cinco minutos.

Le di la vuelta para verla a los ojos.

Lenox: Shss por favor no llores sabes que me rompes el alma.

Lila: Yo solo he sido un problema desde que llegué, tengo miedo que así sea toda la vida, creo que fue un error haber venido, tú llevarías una vida feliz y tranquilo sin mi.

Lenox: Por favor no digas eso, sin ti estaría envuelto en la oscuridad, lucharía mil batallas si eso me permite estar un minuto a tu lado, eres mi destinada Lila, no olvides que no soy nada si no estás a mi lado.

Ver sus ojos llenos de lágrimas me intranquilizaba, sé que ella se culpa de tantas batallas, pero aquí los culpables son aquellos malnacidos que se creen con derecho a tomarla.

Lenox: Mi familia llegará pronto, ellos me ayudará a protegerte, solo confía en mí.

Sentía sus manos aferrándose a mí, ella tenía miedo, era fácil de sentir.

Lila: ¿Puedes cocinar ese delicioso postre que haces?

Lenox: Claro que si amor, te haré el más grande hoy.

Pasamos a la cocina, hace unos días quise hacer algo especial por ella así que le preparé una tarta de fresas, pensé que había sido un desastre pues no fue nada estético, pero por extraño que parezca Lila lo devoró por completo.

Ahora estoy aquí preparándolo de nuevo, trataré de ser más prolijo esta vez.

Lila: Más fresas amor, quiero muchas.

Lenox: Lo que ordenes.

Fue una tarde agradable, mientras cocinaba consentí a mi esposa de todas las maneras posibles, quería que se sintiera feliz.

Al caer la noche mi familia llegó, no se imaginan la emoción que sentí al ver a mis padres, ellos seguían viéndose igual, una pareja bella y poderosa, pero mi atención se centró en quien estaba a su lado.

Lenox: ¿Ian?

Ian: Hola Lobito

(Ian uno de los trillizos de Carson y Artemisa)

Lenox: Sabía que olía a pescado.

Ian: Como si el olor a perro fuera agradable.

Los dos nos abrazamos, qué gusto verlo, hace años que no lo hacía, quizás medio siglo, recuerdo que lo encontré mientras estaba en expedición, el frecuentaba el mundo de las ninfas , le gustaba gozar de sus placeres.

Lenox: ¿Qué haces aquí?

Ian: Vine a ayudar, sé que necesitabas una mano y yo estaba cerca.

Lenox: ¿Solo es eso?

Beca: Buenoooooo es mejor que entremos, quiero descansar, el viaje fue muy largo.

Lila: Por favor sigan, sean todos bienvenidos.

Prepararon una gran cena, mis padres me contaron sobre mis hermanas, ellas al menos encontraron sus destinados y son felices.

Lleve a mi padre a conocer el lugar, ellos podrían quedarse el tiempo que desearán, por otro lado mi madre se quedó en casa con Ian y Lila.

Nazil: Este lugar es hermoso, entiendo por qué te quedaste.

Lenox: Este reino me ha dado tanto entre eso conocer a mi esposa.

Nazil: Es una chica hermosa, puedo sentir que es más como tu madre ¿o me equivoco?

Lenox: Lo es, tiene parte de vampiro, a veces creo que es más fuerte pues siempre se está alimentando de sangre.

Nazil: Vaya, debe ser una mujer asombrosa.

Lenox: Lo es, no sabes cómo vivo con miedo al saber que muchos la desean, quiero asesinar a todos aquellos que tienen pensamientos impuros.

Nazil: Bueno eso nos pasa a todos, cuando amamos a una mujer nos entregamos por completo, no queremos que nadie las mire, menos que sean tocadas.

Lenox: Se que vienen por ella, la quieren para usarla como un objeto de procreación, también desean a mis hijos, ellos son seres únicos.

Nazil: Estamos aquí, nosotros te ayudaremos.

Lenox: Pero siento que solo son pequeñas dosis lo que hacemos, debí erradicar por completo a esos malditos.

Nazil: Si tenemos que acabar con todos los clanes lo haremos, ellos deben entender que es tu luna, ella te eligió solo a ti.

Es agradable hablar con mi padre, tantos años en soledad, había mucho que contar.

Volvimos a casa, esos momentos de felicidad que existen antes de la tragedia son los que más atesoro.

Mi padre iba contando de tácticas de guerra mientras entrábamos a casa, pero mi concentración se desvió.

Ian estaba acariciando el vientre de Lila mientras su oído estaba atento escuchando.

Beca: Aún no puedo creer que sin nacer ya te imprimaste

Lenox: ¿Que haz dicho madre?

Ian: Lenox yo…

“El licántropo que hay en mi acaba de aparecer”.-

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