Capítulo 10

¡Zdor!

¡Zdor!

¡Zdor!

Hubo un tiroteo entre la policía y miembros del clan Lucifer.

El sonido de las armas resonaba, haciendo que la atmósfera fuera sombría y aterradora. En un instante, el clan Lucifer logró disparar y matar a los seis policías.

El cuerpo de Jonathan temblaba, estaba aterrorizado al ver los seis cadáveres de los policías sin vida.

Su respiración era irregular y el sudor corría por su rostro, por primera vez se encontraba en una situación tan tensa como esta.

Sintió un nudo en el pecho al ver a Matteo caminando hacia él, Jonathan pensó que tal vez era su turno de morir y retrocedió apresuradamente.

"¿Qu-quiénes son ustedes? ¿También van a matarme?", preguntó el corpulento hombre en un tono agudo.

Para sorpresa de Jonathan, se quedó paralizado al ver a Matteo y a los ocho hombres de negro arrodillándose ante él.

"Soy Matteo, asociado del Sr. Steven Wilson. Vinimos aquí a buscarlo, señor".

¿Señor? Jonathan frunció el ceño, sin entender por qué el hombre lo llamaba "señor". ¿Por qué todos estaban arrodillados ante él? ¿Y quién era Steven Wilson?

Cuando Jonathan era pequeño, su madre deliberadamente eliminó el apellido Wilson de su nombre, quizás porque odiaba mucho a su padre por haberla tratado tan mal.

Aunque su madre le había dicho desde muy joven que él y Vanya tenían padres diferentes, todavía compartían la misma sangre, ya que nacieron del mismo vientre. Pero, desafortunadamente, su madre nunca respondió a las persistentes preguntas de Jonathan sobre su verdadero padre.

"No conozco a ningún Steven Wilson. ¿Por qué quiere verme?", preguntó Jonathan, todavía mostrando miedo a los nueve hombres extraños que permanecían arrodillados ante él.

"Steven Wilson es su padre, señor", respondió Matteo.

Jonathan se quedó atónito al escuchar eso, ¿sería cierto que Steven Wilson era su padre? ¿Estaría soñando? Finalmente, ¿podría conocer a su padre biológico?

Matteo comprendió que el joven maestro no podía simplemente creer eso, así que trató de tranquilizar a Jonathan.

"Créanos, señor. Vinimos aquí para salvarlo".

Sin otra opción, Jonathan intentó confiar en ellos y asintió lentamente con la cabeza. Si era cierto que realmente era un hombre rico, parecía que estaba viviendo en un cuento de hadas.

Después de quitar las esposas de las manos de Jonathan, Matteo abrió la puerta de la minivan negra e invitó al joven maestro a entrar. "Por favor, entre, señor".

Jonathan subió al coche, pareciendo resignado, incapaz de decir una palabra más.

Entonces Matteo ordenó a uno de los miembros de Lucifer que sacara el cadáver que estaba en el maletero del coche, el cuerpo de un enemigo que había sido asesinado para sustituirlo por Jonathan.

"Pongan el cuerpo en el coche de la policía, tírenlo por el acantilado, ¡asegúrense de que todos los cuerpos dentro del coche se quemen!"

"Sí, señor."

...****************...

"Telespectadores, un accidente fatal mató a seis policías y un recluso. Se sospecha que el coche de la policía cayó por un acantilado y explotó, quemando a todos los que estaban dentro. Sólo quedaron huesos y cenizas".

Las balas en los cuerpos de los policías ya habían sido tratadas para no dejar rastro.

El Sr. Abian y Arga rieron satisfechos mientras veían la noticia en el portátil. Aparentemente, el ángel de la muerte estaba impaciente por llevarse el alma de ese feo yerno, aunque Jonathan ya estaba condenado a muerte.

"Parece que el ángel de la muerte estaba cansado de ver la cara de ese hombre por más tiempo, así que su muerte tuvo que ser acelerada ¡jajaja!", dijo Arga riendo, estaba en América visitando a Luna, que seguía inconsciente.

"Sí, cuanto antes mejor. Con la muerte de Jonathan, puedes casarte con mi hija en cuanto se despierte". El Sr. Abian apenas podía esperar para tener un yerno como Arga. Un hombre estable y digno de su hija. Sabía que Arga amaba de verdad a Luna, el hombre estaba dispuesto a esperar a que ella fuera viuda.

"Claro, tío. Ser el marido de Luna es mi sueño. Por eso sigo soltero, porque siempre le he sido fiel, esperándola". Un corazón fiel, pero el hombre entraba y salía con frecuencia de las camas de otras mujeres. Esa era la definición de fidelidad de Arga. Después de todo, seguía saliendo con Selena.

El Sr. Abian le dio una palmada en el hombro a Arga. "Estoy orgulloso de ti, Arga".

El Sr. Abian sabía que lo que le habían hecho a Jonathan y a su hermana era cruel. Pero, como padre, haría lo que fuera por el bien de su hija. No quería que su hija se arrepintiera en el futuro por haberse casado con un hombre feo y pobre como Jonathan. Ese hombre no era más que una basura repugnante, indigna de formar parte de la familia Xander.

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