Bienvenidos

NARRA JACKSON

Me empecé a despertar con un dolor de cabeza muy fuerte, creo que me había pasado con las copas anoche, aunque no recordaba haber vivido mucho, me intenté tomar la cabeza con las manos, pero no me funcionó, ¿pero que demonios?.

Abrí los ojos lentamente, la luz me lastimaba, pero tenía que abrirlos para saber que estaba pasando, que demonios, mis pies tampoco me respondían, intenté llamar a mi madre, pero ningún sonido salió de mi boca, la luz me cegaba, pero tras parpadear varias veces, me vi en una habitación azul, muy grande, esta no era mi habitación, aún me sentía muy mareado, pero cada minuto iba descubriendo cosas que no vi de inmediato, no estaba amarrado, pero no me podía mover ni hablar, estaba en ropa interior, pero no sentía nada de frío, había más personas en la habitación, sentadas en sillas, en ropa interior y al parecer tampoco podían hablar o moverse, exactamente igual que yo, por lo que veia todos teniamos unos numeros en nuestras piernas, como marcandonos, éramos unas 50 personas, que demonios estaba pasando.

¡Mierda!, la frustración que sentía por no poderme mover era imposible de describir, ya llevábamos un par de minutos conscientes y en los ojos de todos, se veía la frustración, el miedo, la tristeza, de algunos ojos incluso salían lágrimas, había una chica muy hermosa de cabello castaño claro y ojos oscuros y expresivos, nariz pequeña, se veía tan triste, desde la primera vez que la vi no ha parado de llorar, cuanto quisiera ayudarla, de repente se sintió un ruido como mecánico y la gran puerta que había en la habitación se abrió, por ella entraron tres hombres, uno de ellos era un hombre que estaba entre los 50 o 60 años, se veía muy elegante, bien vestido, se notaba la clase, tenía barba y nariz larga, los otros dos parecían soldados, del FBI o algo por el estilo, tenían uniformes negros gruesos y se veian pesados, los uniformes tapaban todo su cuerpo, menos los ojos, llevaban grandes y poderosas armas, ¿Nos iban a matar?.

-Bienvenidos -dijo el hombre elegante- yo soy Blank Salline, se deben estar preguntando muchas cosas y para eso estoy aquí, para resolverles todas las dudas mis queridos productos-

¿Qué?

Entre más hablaba, más confundidos estábamos, yo solo quería correry volver a mi casa.

-Ustedes fueron traídos aquí con engaños, se les pagó una gran cantidad de dinero a las personas que nos los entregaron, para justo eso, que los entregaran, estábamos buscando personas pobres, como ustedes, inferiores a mi por supuesto, pero jóvenes y sanos, justo como ustedes, así que a sus amigos, familias, novios, conocidos, ... Se les ofreció dinero por ustedes y pues aceptaron para mi gran placer -explico el.

Tras el decir eso, caí en cuenta que los hijos de puta de mi trabajo me habían vendido, ¡maldita sea!, los iba a matar cuando saliera de aquí, como pude confiar en ellos, como le pueden hacer algo así a otro ser humano, ellos no eran santos de mi devoción pero jamás los dañaría, mire a la chica bonita y esta lloraba aún más, tal vez su traición había sido aún más grande que la mía.

-La razón por la que ustedes no se pueden mover a pesar de que no están amarrados es porque les inyectamos una droga en su sistema la cual no deja que ustedes se mueven o realicen alguna otra opción, es como si estuvieran dormidos, pero con los ojos abiertos y totalmente conscientes, pero no se preocupen, pronto pasará el efecto y podrán hacer uso de su cuerpo como siempre lo hacen-

Maldito, quería meterle una paliza, ¿para qué demonios nos tenía aquí?

-Ahora lo más importante, ¿por qué pagamos por ustedes? ¿Por qué los tenemos aquí?, la respuesta es sencilla, unos colegas y yo, hemos decidido que con nuestro dinero y poder se pueden lograr muchas cosas y llamamos a multimillonarios, billonarios de todo el mundo para que se unieran a nosotros, nosotros queremos crear algo así como superhumanos, tomar personas normales como ustedes y a través de la ciencia convertirlos en eso, superhumanos, ¿no es maravilloso? Pueden ser como los superhéroes de las películas, que emocionante-

Hijo de puta, nos iba a tener como ratas de laboratorios, donde demonios me habian metido.

-Como apenas vamos a empezar estos experimentos, nadie se ofrecía, es dificil, un poco arriesgado, por eso pagamos por ustedes, no sé si los primeros experimentos salgan mal, espero que no, pero trataré de cuidarlos, son muy importantes para mi, mientras estaban inconscientes se les tomaron múltiples pruebas, los que tuvieron algo negativo o malo en sus resultados, serán los primeros, pues ya son productos defectuosos y no nos lo podemos permitir -nos dijo el estúpido esto, como si fuéramos cosas.

¿Nos estaba llamando productos? Tenía que buscar como salir de aquí, no podía dejar me cogieran como experimento, este hijo de puta estaba loco, todo lo decía con elegancia como si fuera lo más normal del mundo, se veía que era un viejo rico excéntrico, pero esto ya era demasiado, estaba loco.

Por la misma gran puerta, entraron más guardias, con sus armas y uniformes, y se llevaron a 7 personas, en los rostros de ellos se les veía el terror, ¿serían ellos a los que los exámenes no les salieron tan bien?¿que les harían?.

-Muy bien muchachos, en unos minutos se pasará el efecto y se podrán mover libremente por el lugar, cuídense -dijo ese viejo loco y tanto el cómo sus guardias se fueron, cerrando la gran puerta tras ellos, tenía varias cerraduras.

Estábamos desconcertados, asustados y furiosos, ahora éramos unas ratas de laboratorio para un montón de viejos ricos que simplemente se aburrieron y no saben en qué gastar su dinero, pero esto no se quedaría así, tan pronto como me pudiera mover, me uniría a las demás personas que estaban en la habitación para poder salir de este maldito lugar y vengarnos de todos los que nos metieron aquí.

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