Boda

Odette.

Antuan es mi ángel aquí en este infierno donde en el día soy niñera en las tardes soy aprendiz de esposa y de noche soy la estúpida que sigue maltratando cada vez que se acuerda de la muerte de esa asquerosa traidora y no saben cómo me arrepiento de no haberla matado yo.

Mi corazón ha seguido de idiota queriendo a ese desgraciado al que no debería de querer por qué es un bastardo, su amada Jimena no es más que un demonio quien me trata peor que él y no puedo hacer nada, él es mi amo y ella el amor de su vida.

Ellos pasan el día entre besos y caricias frente a mí y yo solo quito la mirada para no sufrir como idiota.

Camino hacia el jardín y comienzo a bailar un número parecido al del cascanueces, al terminar me detengo con los ojos cerrados y al abrirlos ese demonio llamado amo está frente a mí, enseguida me tenso y él se apodera de mis labios y me sigue besando de manera brusca, me besa con hambre y yo a él.

—Dime a dónde fue esa maldita asesina— grita mientras me da una bofetada que me tira al suelo.

No te diré nada maldita sea, mátame se una maldita vez, mátame por qué jamás sabrás su paradero — otra bofetada me soltó, pero no le llore, solo me calme y me quedé en silencio.

— mañana en la boda y mañana dejarás no haber nacido, solo ten presente que soy tu amo y que de eso depende que me den el puesto que anhelo.— dijo y me levanté con mi frente en alto.

— Si mi amo, así lo haré —dije y me volví a retirar, esta vez no fui a mi habitación, fui al sótano en dónde yo entrenaba en secreto, comencé a golpear el saco y luego empecé a practicar con los cuchillos y seguí saltando patada tras patada hasta descargar mi dolor e imponencia, mañana sería torturada de maneras inimaginables.

Me fui acostar y al día siguiente me levanté después de atender y jugar con catrina me fui con profesionales encargados de mi peinado y maquillaje, me llevaron a un salón parecido a un spa y la chica llamada Susan me dio un maravilloso masaje haciendo relajar cada músculo de mi cuerpo, el hombre afeminado llamado Roger me hizo un peinado espectacular luego de horas de peine y fijador, al final una chica hermosa llama Eloísa me hidrato y masajeo mi cara para luego maquillarme y dejarme preciosa, después de estar casi lista me coloqué un hermoso vestido blanco lleno de piedras preciosas tanto en el corsé como en la falda no parecía una princesa, parecía una verdadera reina.

Camine hasta salir al jardín de la mano de mi ángel llamado Antuan él me entregaría a mi infierno, me rogó huir de allí, pero a él lo matarían y jamás le haría eso mientras caminábamos observé el lugar lleno de lujosas sillas, mesas muy bien decoradas, arcos de rosas, y una gran carpa que cubría todo era un verdadero cuento de hadas vi al altar y mi futuro esposa yacía al lado de Jimena su ahora amante sentí ganas de matarla, pero ella era la reina sin título y yo la esclava con papel de esposa.

Caminé con Antuan mirando a todos de manera altiva, sus ojos se cruzaron con los míos y me estremeció, nos paramos frente al altar que era en el gran jardín de su casa y en vez de un padre estaba un juez y un hombre parecido a un demonio, ya que su cara era fría y si mirada daba terror, junto a él varios hombres más llamados el consejo y quiénes nos casarían.

— Señor Aleksander Antonov líder de la bratva usted acepta por esposa a Odette Fournier, para honrar el nombre de nuestra mafia y cuidarla para que juntos rijan nuestra organización — pregunto el mafioso.

— Acepto — dijo mi amo llamado Aleksander.

— Señorita Odette Fournier quiero que sepa que con aceptar a este hombre pasarás por muchas pruebas dónde demostraras que tiene lo necesario para junto a nuestro líder, protegernos y cuidarnos, si aceptas hoy disfrutarás de tu miel, pero mañana vivirás un infierno.— dijo mirándome directo a los ojos.

— Odette Fournier, aceptas por esposo a nuestro líder Aleksander Antonov para cuidarlo, protegerlo, amarlo, ponerlo a él antes de que a ti, respirar solo, por y para él y dar tu vida por la de él de ser necesario.— preguntó mirándome.

—Acepto — dije muy segura y el hombre siguió hablando.

—Por el poder que me ha dado el consejo, los declaro marido y mujer puede besar a su novia, mi líder.—

Aleksander me besó tomándome por la nuca y fue un beso que me desarmó y me hizo temblar, al separarnos el hombre volvió a gritar

—Ante ustedes el señor Antonov y la señora Antonova.—

En la fiesta pasamos la noche juntos tomados de la mano para aparentar, estábamos en la misma mesa, una llena de brillos y diamantes con unas copas en la mano.

—Ahora eres mi esposa, pero eso no cambia nada, espero que lo tengas claro, mi reina es Jimena y solo ella— dijo y me estremecí, como había caído en esta vida tan horrible, quería llorar, sí, pero jamás él lo vería.

Todos los invitados y los del consejo se habían marchado, solo quedaban los de la casa, mi amo me soltó de manera brusca y se fue, estaba lista para encerrarme en mi habitación cuando él regresó y del brazo de Jimena, creo que lo poco intacto en mi pecho termino de romperse.

— Esposa mía, iré a tener mi luna de miel con la mujer que amo— dijo y beso delante de mí a Jimena, le susurró que lo esperara en su habitación y se volvió a mí.

— Querida esposa, tendrás también tu luna de miel y como la zorra que eres no la tendrás conmigo, escoge entre alguno de los guardias o a Draco para que pases tu noche de bodas — dijo y volvió a enterrarme el puñal en el pecho.

— Ella pasará su noche conmigo, dijo Antuan y vi a mi amo apretar sus puños con rabia.

— Entonces has que grite esta maldita zorra y dale una buena noche— le dijo a Antuan.

Te ordeno pasar la noche con él y no quiero escándalos — dijo y Asentí respondiendo.

—Si mi amo como usted ordene — tomé la mano de Antuan y me fui a mi habitación.

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