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Durante el camino solo ella se apoderó de mi mente, pero al mismo tiempo también estaba molesta, de lo único que si estaba segura era de que necesitaba aclarar mis sentimientos, no ni madres, ya lo que quiero o mejor dicho a quien quiero, así que el viento guío mi camino a casa.

...Del otro lado...

Siempre he ha sido del tipo de hombre arrogante, que tiene lo que quiere, cuando quiere y sin importar quién se interponga en mi camino, estoy en el justo momento de mi vida en el cual, ya me cansé de estar con una y con otra, digo, tengo a mi lado a una mujer hermosa y exitosa, yo solo he perdido el tiempo al no valorarla e intento recuperarla, pero desde que esa chica se cruzó en nuestras vidas, mi esposa ha cambiado mucho, también está lo del beso que vi que se dieron, sé que no vi mal, sé que fue un beso, aunque ella intente negarlo, con esas dudas, subí a la habitación y vi un papel sobre la cama, los tragos están comenzando a hacer que mi cabeza gire, así que me siento a leer la nota, -sorpresa- ella se fue, -solo repetí en voz baja-, intento calmar el mar de cosas que están en mi mente, increíblemente al leer esto, la borrachera se me fue, así que me fui al baño y solo deje que el agua fría enjuagara mi desdicha, luego de un rato, tome mis cosas y salí de la habitación, deje todo en orden y vi a Joshua en el lobby, donde asumí que me esperaba, con una tranquilidad en su rostro, el amigo, -me dice- volteo de inmediato, y tu novia?, -pregunto desconcertado-, ella se fue, siempre hemos apoyado nuestras decisiones, ¿y tú esposa?, -pregunta mirando a los lados- ella se fue, tenía algunas cosas pendientes en la fundación, así que iré con ella, -respondo- oh bueno, por mí no hay problema, yo iré a mi casa, tengo algunos pendientes, nos vemos después, -me dijo-, asentí y salí por mi auto.

...Del otro lado...

Llegué al departamento, dejé las cosas a un lado, no tengo ganas de arreglar nada ahora, solo quite mi vestido y me quedé en ropa interior, quería recordar lo que habíamos vivido en el spa, se preguntarán el porqué no le avisé que venía a la ciudad, bueno, la respuesta es bastante simple, ella está con su novio y aunque hubiese sido excitante escaparnos juntas, preferí no ocasionar problemas con su pareja, serví un poco de whisky, puse un poco de música suave, mientras imitaba sus toques con mis manos, segundos después llega un mensaje sacándome completamente del trance en el cual estaba, hola ¿cómo estás?, -pregunto rápidamente - bien, y tú, cómo estás?, -le respondí-, estoy bien gracias y donde estás?, -pregunto ella- en mi departamento, por?, -le respondí-, sal afuera, -me dijo-, ok, -le dije mientras salí al balcón-, busque con la mirada y vi como la cortina de su ventana de hacía aun lado, dejándome verla, no pude evitar sonreír y hasta incluso, pudo asegurar que me sonroje, parecemos un par de adolescentes enamoradas, muy estoy, ¿vienes o voy? -me dijo ella- ven por mí, -le dije con una sonrisa pícara, mientras colgaba la llamada-

minutos después, el timbre sonó, sabía de alguna manera que Ricardo no vendría, al menos no no hoy, -es muy predecible - abri la puerta, ella venía con un abrigo largo asi que solo la jale un poco para pegarla mas a mi y la bese con hambre, esto sin duda era muy excitante, sabia que si a Ricardo se le cruzaban los cables y decide venir, podria ser el fin de nuestra relación, lo que para ser sincera, me tenia sin cuidado, nos separamos por falta de aire, ella cerró la puerta y terminó de entrar mientras acaricio mi mejilla, "buenos días cielo" -la escuche decir- mi mundo giro al escucharla, buenos días hermosa, -respondi con una sonrisa, mientras negaba con la cabeza la taza de cafe- la dejé en el recibidor junto a mis cosas y me acerque a ella con una sonrisa, no suelo tomar café y cuando lo hago es con leche, -le dije con ternura ante gesto- déjame prepararte otra taza de café, -me dijo un poco avergonzada-

Negue con la cabeza y la atraje más a mi, dejándole saber con un beso apasionado, lo mucho que la deseo, mientras tocaba su piel, la conduje a la cama, haciendola mia como ya muchas veces lo habia hecho, mi lengua jugaba con sus pezones, mientras mis dedos se enredaban en su cabello mojado por el sudor, cada encuentro era mas y mas caliente, sus manos palpaban mi espalda, dejando una leve marca del encuentro, que me hacia desearla aun mas, sus dedos hacían círculos en mi espalda, de alguna manera me sentí importante para ella así, como ella lo es para mi, entre risas y bromas, me dio, -pareces una niña, mientras jalaba mis mejillas, no lo soy, le respondí agitada e igual de sudada que ella, disfrutamos del enorme placer de comernos mutuamente, amo su cuerpo desnudo, es una delicia, me es imposible dejar de besarla, cuando la tengo cerca, no podia parar de tocar y lamer sus muslos, estoy loca por ella, es algi que jamas podre negar ni borracha, la amo! Ella estaba de pie y yo de rodilla, la bese con más hambre y una voz me saco del éxtasis, "¿QUE DEMONIOS ES ESTO RENATA?" volteo de lo más tranquila, primero no es esto, es mi mujer, segundo no te esperaba y tercero terminamos, que parte no entendiste?, -le dije- te voy a dejar en la calle maldita sea, me pude imaginar esto de cualquiera menos de ti, -me dijo enojado- y piensas que me importa? Ve preguntale a tus zorras, quizás ellas te den la respuesta a lo que pasó, -le dije- me acabas de decepcionar, no me espere esto nunca de ti, -me dijo- preguntame si me importa, -respondi con desinterés....

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