Planes

Lauren comenzaba a suspirar más de lo que acostumbraba, pero cómo no hacerlo con las estupideces que hacía su señor, ese hombre siempre le recordaba que estaba demente y él aun más por seguirlo por detrás.

_¿Cómo es posible que lleve a su hermana a la guerra?_ pregunto.

Hacía un día casi la mataba y ahora la arrastraría al campo de batalla.

_ No quiero que se escape y algo me dice que aunque le ponga una correa en este lugar eso no va a funcionar, los sirvientes son demasiado estúpidos para ella _

Él era estúpido, ¿Estaba hablando bien de ella o solo quería una escusa barata para sus locuras?, aún así, no podía permitirlo.

_ Su hermana aún es una noble, todo el mundo hablará si la expone de esa forma _

Su señor no lo estaba entendiendo, ya nada sería como antes y para gobernar esos territorios necesitaba hacer negocios con los nobles. Ya no podía solo depender de mercenarios y contrabandistas para sus negocios, además debía asegurar su futuro en esas tierras.

_ Sabes lo poco que esos comentarios me importan _ refutó Alexander.

Ningún noble estuvo de su lado ¿por qué debería preocuparse por ellos ahora?.

_ Tendrá problemas para cundo tenga que conseguir una duquesa, después de todo tiene que ser una noble de alta alcurnia quien dirija esta mansión. No puede dejar que sea más importante su pasado que su futuro y como duque tiene responsabilidades con la sociedad y su pueblo_

Alexander se molestó al escuchar que Lauren le recordaba sus responsabilidades.

_ Ya es suficiente, ya tomé una decisión Lauren y eso no va a cambiar_ salió de la oficina molesto_ Vamos al comedor quiero darle la buena noticia a Aria_

_..._

Su sorpresa era clara cuando ese loco le dijo que lo acompañaría a la guerra. Hasta había perdido el apetito cuando ni siquiera había terminado su comida.

_¿La guerra?... ¿me, entrenaran?_ preguntó desconcertada Aria.

Nunca en su vida había sujetado una espada y mucho menos había matado a alguien por propia voluntad. Quería matar a ese hombre, pero de pensarlo a hacerlo era diferente. Estaba completamente desconcertada, Alexander volvió a hablar.

_ No te preocupes, no es que te de una espada para que estes a mi lado en la batalla o mejor dicho para que me traiciones. Solo te quedaras en la base principal y esperarás por mí todos los días hasta que regrese de la batalla. Hay algunas mujeres en la milicia, estoy seguro de que te sentirás bien con ellas_

Lo estaba diciendo como si se tratarán de vacaciones ¡maldito loco!, necesitaba saber ¿cuánto faltaba?.

Ojala que lo maten el primer día.

_¿Cuándo partiremos?_

_ En cinco días_ respondió Alexander y sabía que sería lo suficiente para que lo sorprendiera con algo divertido, ¿de qué forma pensaba escapar?

_..._

Regreso a su cuarto y no podía dejar de pensar en su situación.

Hacía menos de un mes que estaba en esa mansión y no sabía nada de ese mundo o que había más allá de esos muros.

Sabía que ese loco la estaba desafiando para que intentara escapar, pero aun así tenía que intentarlo, ese hombre no la mataría hasta que consiguiera el antídoto para que recuperara los recuerdos de su hermana.

_¡Maldición!_

Solo había analizado el recorrido hasta el comedor principal y parecía que podía salir de su habitación, pero estaba siendo constantemente vigilada por esa mujer y los sirvientes.

En su camino al comedor algunas sirvientas venían del ala norte por la mañana, seguramente en esa dirección se encontraba la cocina y si coincidía con lo que suponía de su anterior vida, seguramente encontraría la salida del servicios. Solo dependía de que la arquitectura de ese lugar fuera como la que conocía del siglo XVIII de su mundo. Tambien necesitaba la ropa de una de las sirvientas.

Ya se estaba ocultando el sol y la marca indicaba que solo quedaba aproximadamente una hora para la cena, el plan era demasiado arriesgado pero tenía que intentarlo.

_ Buenas noches Aria_

_ Buenas noches duque_

La cena fue tranquila, pero necesitaba información después de darse cuenta que lo que sabía no era suficiente, tenía que arriesgarse.

_ ¿Puedo hacerle una pregunta duque?_

Sus ojos celestes la repasaron.

_ Dime _

_ ¿Existe la magia en este mundo?_

No había mostrado nada de magia en la mansión pero habían objetos mágico, le molestaba un poco tener que hablar sobre ese asunto.

_¿Por qué preguntas eso?_ inquirió llevándose un pedazo de carne a la boca.

No se rió como un demente, claramente existía.

_ Iremos a la guerra, si la única forma de defenderse es con armamento o magia, quiero saber ¿que es lo que debo hacer en caso de que algo suceda? _

Seguramente no sería de su agrado que alguien más la mate en su lugar.

Alexander se tranquilizo con lo estúpido que eso sonaba, ¿por qué pensó qué preguntaría sobre el collar?, pero podía hablarle un poco de su pasado.

_ Tú no tienes mágia, después de todo la magia es la condena de los Grandwell, Aria. Y es el motivo por el que esta familia esta maldita, así que no te preocupe, ya te dije que no te daría una espada y mucho menos tienes magia, tendrás que buscar otra forma para defenderte o escapar si llega el momento_

Parecía que estaba bien si alguien más la mataba después de todo, si existía la magia sus impulsos y palpitaciones podían tener una lógica después de todo.

_ ¿El enemigo la usa?_ preguntó dudando de algo.

Aunque el tema no era importante le desagradaba hablarlo con ella.

_ La magia solo se manifiesta a través de la sangre y objetos sagrados. Esos objetos dejan de funcionar cuando un hijo de sangre muere y no deja herederos, es algo que se irá perdiendo a los largo de los años y ya no quedan muchos de ellos en los diferentes reinos, pero si los hay posiblemente los usen en la batalla_ le dió un trago a su copa de vino _ Si encuentro alguien con la bendición de Dioses me encargaré personalmente de que se lo regrese a Dioses_

Parecía que estaba dispuesto a matar a cualquiera que se cruzará en su camino, en una sociedad antigua donde las personas tienen tan poco valor.

_¿Y si fuera un niño?_ pregunto ella.

_No sería la excepción_ exclamó sin ningún sentimiento de por medio Alexander.

Desagradable, porque pensó que ese asesino podría tener un límite. Después de todo su conversación fue algo que le dió información sobre su situación y la locura que estaba sufriendo con ese cuerpo, pero era claro que ese hombre la mataría si intentaba algo más, lo mejor era concentrarse en su plan y escapar.

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