Capitulo 18

Carolina❤️🥰

Después de conversar un rato con mis amigas ellas se fueron y yo me fui a dormir.

Aunque no podía dormir por lo que paso con Nicolás Esto para mí es demasiado.

Hoy ya es lunes y me cuesta levantarme, pero aun así lo hago, me baño me alistó y me bajo.

Buenos días, mamá, papá—Saludo.

Buenos días, hija—Dice mi bella madre.

Buen día, hija—Dice mi padre y yo veo la hora.

Oh ya se me hace tarde—Me despido y salgo escucho a mi madre decir sobre el desayuno y dije que desayunaba en la empresa.

Me subo a un taxi lo más rápido que puedo y digo la dirección de la empresa llego a los 20 minutos antes de mi entrada y eso para mí ya es un alivio.

Voy a mi puesto y me pongo hacer mis pendientes a los 10 segundos llega.

No puede ser—Digo en un susurro.

Carolina necesitó que me busques estos documentos ahora—Dice y se va hacia la oficina.

Como puede hacer como si nada allá pasado—Busco los documentos y golpeó la puerta de la oficina soltando suspiros para tranquilizarme.

Pase—Dice del otro lado de la puerta.

Me adentró a la oficina—Jefe aquí están los documentos que me pidió—Digo acercándome al escritorio.

Él está parado en el ventanal mirando toda la ciudad aparta su mirada del ventanal dirigiéndome la mirada a mí.

Se acerca a mí a pasos veloces tomas los documentos de una forma lenta sin apartar su mirada de la mía.

No respondiste lo que te pregunté ayer—Me mira fijamente.

No sé dé que habla señor—Digo en tartamudeo.

Quieres que me saque la camisa para que veas si el de la TV o yo es más guapo—Dice con voz autoritaria.

Nicolás basta—Digo aún más nerviosa.

Nicolás se acerca mucho más a mí los papeles que tenía en mano ya no los tengo ahora están sobre el escritorio, ya que Nicolás los puso ahí de una forma rápida.

Con sus manos toma las mías y me jala más hacia él sin soltarnos las miradas una mano de él ya no está sobre la mía ahora está por mi espalda descubierta.

Me acaricia mi espalda con esos dedos que ayer por un segundo me volvieron loca.

Nicolás~—En un jadeo solté su nombre.

A lo que suelto el jadeo se acerca a mis labios estampándolos con los suyos sentí mis piernas hacerse gelatina a lo que el mi abraza por la cintura cargándome y sentándome en el escritorio.

Nicolás con su mano libre subía mi falda y haciendo que abra espacio para él mis jadeos eran ahogados por aquel beso tan apasionado que nos dábamos.

Mis manos como si tuvieran vida propia empezaron a desabotonar su camiseta bajo sus besos a mi cuello dejando chupetones a penas visibles.

Espera~~—Jadeo.

No quiero— Sigue besando mi cuello con desespero.

Basta—Jadeo tratado de apartarlo de mi.

si no lo apartó de que voy a caer en un abismo totales grabe.

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Capitulo 17