La marca

Al día siguiente hicimos lo que Egan había dicho, nos casamos por el registro civil, lo cual fue bastante tedioso porque había una fila enorme, pero eso no fue lo mas importante, aparte de salir todo el día a celebrar, y que Lilah parecía la más feliz de todas, o al menos la que más lo expresaba, sabía lo que se venía a la noche así que de favor pedimos a Abel y Neal que cuidaran a los niños y Egan y yo nos fuimos a un hotel, de verdad le debía demasiado a Abel.

Cuando llegamos quedé impresionado por lo lujosa y grande que era la habitación, tenía una cama enorme y no sólo eso, el baño también era enorme y hermoso, algo que nunca creí que pensaría sobre un baño. Mientras admiraba el baño Egan se puso detrás de mí y me tomó por la cintura, levantando mi camiseta para quitarla.

Mi rostro se puso rojo de la vergüenza, en realidad de hombros hacía arriba era un tomate. Egan me desnudo con una delicadeza que nunca había sentido antes y yo me dejé pero no lo voltée a mirar en ningún momento pues podía ver todo perfectamente gracias al espejo frente a nosotros, todo era tan obvio.

-Podría admirar tu cuerpo por siempre...- Egan paso sus dedos con suavidad desde mis hombros hasta mi cintura y luego mis caderas, bajando hasta mis muslos.

-No es la gran cosa...- Respondí bajito.

Egan comenzó a preparar la tina y mientras dejaba el agua correr, él también se desnudo. Cuando ambos estuvimos desnudos siguió estando detras de mí y señaló el espejo y luego mi nuca.

-Aquí dejaré mi marca para que todos sepan que eres mío.- La voz de Egan se escuchaba ronca, y sus feromonas comenzaban a llenar la habitación del baño, estaba siendo posesivo conmigo y me gustaba eso.

Cuando la tina se llenó, el me tomó en brazos para llevarme a esta.

Egan me abrazaba y mojaba con suavidad mi cuerpo con el agua tibia, dejando besos por mis hombros y cuello, su aroma me envolvía así que en un acto también posesivo quise marcarlo con mi aroma.

Me limpió, me acarició, toda tan lento y relajado que me hacía sentir como si estuviera volando y su aroma parecía embriagarme.

-Quisiera estar así por siempre...-

-Bueno, pero nuestra piel se arrugaría con el agua.-

-Ah, matas mi ilusión.- Sonreí y me apoyé en su pecho.

-Es que no quiero que nos quedemos acá por siempre porque deseo llevarte a la cama y repetirte hasta el cansancio lo mucho que te amo y quiero hacerte mío.

-Entonces vamos y cumple tu palabra.-

Egan sonrió y se levantó para luego ayudarme a salir. Secó mi cuerpo con delicadeza y me tomó en brazos para llevarme a la cama, recostándome con cuidado boca arriba en medio de esta. Se puso sobre mí y comenzó a besarme, primero mi frente, luego mis labios, bajando a mi cuello, mi clavícula, mis hombros y así cada vez más abajo, así me preparaba como si fuera lo más delicado y preciado para él.

Parecía que el baño había sido algo inútil, con él dentro de mí y cada movimiento, nuestros cuerpos rápidamente estuvieron cubiertos de sudor. Sin dejar de moverse Egan me sentó sobre su regazo y apoyó su cabeza en mi hombro, olfateando mi cuello y despejando mi nuca.

-Lo haré...-

-No me avises, sólo hazlo.- Dije entre jadeos.

El alfa acató mis órdenes y sin previo aviso besó mi nnuca para al instante después morderme con fuerza, hasta el punto de sangrar, pero así debía ser y yo lo sabía. Era una mezcla entre dolor y placer, Egan me hacía sentir bien al estar dentro de mí pero la marca dolía como el infierno.

Luego de que pasara un poco el dolor, lo empujé contra la cama y me acomodé sobre él, no quería que dejara de hacerme el amor pero quería tomar el control.

-Es mi turno.-

-¿Sammy?¿Que haces?-

Me incliné sobre él y sin avisarle le mordí tan fuerte en la nuca para poder marcarlo a él también.

-Ah... Ahora eres mi alfa, mío y sólo mío.

Me sentí con mucho poder en ese momento, no sabía si era por el contexto pero yo también estaba siendo posesivo, quería a Egan sólo para mí y quería que todos lo supieran.

Luego de hacerlo durante horas, ambos nos quedamos recostados sobre la cama mirando el techo mientras nos abrazábamos.

-Egan... ¿Sabes que es poco probable que la marca que me hiciste tenga éxito?-

-En ese caso lo haremos hasta que resulte.-

-Eres un pervertido.-

-Sólo contigo, aparte, tu también fuiste un pervertido hoy, tomando el control así... Podrías hacerlo más seguido.-

-Hah, ¿te gusta? Lo consideraré.-

-Me gusta que lo hagas tú, sólo tú porque te amo.-

-Mmm... Más te vale.-

-Ahora todos sabrán que soy tuyo... ¿No es emocionante?-

-Un poco...-

Me acurruqué entre los brazos de Egan y bostecé, ya estaba demasiado cansado como para hablar, sólo quería dormir, ¿sería capaz de al fin tener mi final feliz?

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