Episodio 10: Realidad

^^^Catherine Howland.^^^

Veo el feo moretón que adorna mi ojo izquierdo a través de la cámara frontal de mi celular. Hay otro más cerca de mi boca, pero es opacado por mi labio partido.

Anoche papá amenazó con botar la puerta si no quitaba el seguro, así que lo hice, lo quite y él entró al dormitorio.

Ni siquiera me permitió explicarme cuando comenzó a golpearme, me tiro al suelo en el primer puñetazo, luego me dio unas cuentas patadas en el vientre mientras juraba matarme si me veía con una chica.

No me gustan las chicas, pero si lo hiciera no debería ser un problema para él.

La sexualidad no debería ser castigada con la fuerza bruta.

Mi celular suena al recibir otro mensaje de Landon, algo que ignoro porque estoy resentida con él por tener una novia tan cabrona.

Papá y mamá se contactaron con la escuela para avisar sobre mi ausencia los próximos días, no sé qué tipo de excusa dieron, pero ahora tengo algo de tiempo para que mis heridas comiencen a curar antes de presentarme.

Mi corazón salta de mi pecho cuando el celular suena y vibra con la llamada de mi hermano.

No quiero contestar, pero no quiero arriesgarme y que al final decida visitarnos.

Odiaría que Landon entre en una discusión con papá luego de verme y que en el peor de los casos ocurra alguna tragedia.

Papá es un poco violento y tiene cero tolerancia a la insolencia, no digo que Landon no podría defenderse contra él, pero es papá, así que tampoco podemos hacer mucho cuando se supone que no debes levantarle la mano a tus padres.

—Hola.—Respondo a la llamada.

—Te fuiste.—Suena molesto.—¿Por qué?

—Olvidé que necesitaba terminar una maqueta para la escuela y la había dejado en casa. Lo siento, olvidé decirlo antes de irme.—Miento.

—Has estado ignorando mis mensajes.

—Tengo el celular en silencio, no lo noté hasta que comenzó a vibrar por tu llamada.

Landon no dice nada por unos minutos.

Yo tampoco lo hago.

—¿Por qué siento que me estás ocultando algo importante?.—La preocupación se filtra a través del enojo que todavía mantiene en su voz.

—No lo hace.

—¿Qué cosa?

—No me agrada.

—¿Quién?

—Amy.

Mi corazón golpea con fuerza dentro de mi pecho, esperando la respuesta de mi hermano.

—¿Dijo o hizo algo que te ha lastimado?

—No.—Miento.

Hay otro largo silencio antes de escucharle nuevamente.

—Terminaré con ella.

Llevo mi mano a mi boca para ahogar mi sollozo.

Mi corazón se estremece en dolor y felicidad, no puedo creer que la única persona que me elige por encima de cualquiera sea la única persona que no se me tiene permitido amar.

No me exige razones o excusas, solo le basta con escuchar mis deseos, aunque sean egoístas para poder cumplirlos.

—Vuelve conmigo, dolly.—Pide.—Puedo ir a buscarte si me lo pides, te ayudaré a terminar la maqueta que tienes pendiente.

Quiero decirle que sí, que venga a buscarme y que me saque de aquí, pero entonces vería mi rostro malherido y se volvería loco.

—Fanny me está ayudando, no hace falta que vengas.—Las lágrimas humedecen mis mejillas.

Hay un nudo formándose en mi garganta que no me permite hablar con naturalidad. Estoy deseando, suplicando que mi hermano no lo note.

—Nos vemos el próximo fin de semana.—Me despido, necesitando terminar la llamada o romperé a llorar en cualquier momento.

—Hasta el próximo fin de semana.—Suena decepcionado e inconforme.

La llamada finaliza y solo entonces me permito llorar a cántaros.

El próximo fin de semana llega, pero no me presento en el apartamento, no lo hago hasta dentro de dos meses, cuando estoy completamente curada y sin ni un solo rasguño.

Utilizo la llave que Landon me había entregado anteriormente para abrir la puerta del apartamento, siendo hoy un día sábado y finalmente cumpliendo con el acuerdo que mi hermano había tratado con mamá para tenerme los fines de semana.

Le envié un mensaje a su celular hace una hora para avisarle sobre mi llegada, pero no se ha conectado para leerlo.

Voy a llamarle cuando mis ojos se encuentran con una escena que apuñala mi corazón.

Amy y Landon se encuentran dormidos en el sofá de la sala de estar, con ella encima de él.

La ropa está esparcida por el suelo y el apartamento huele a su perfume, tiene su esencia en todas partes, golpeando mis fosas nasales e hiriendo al corazón que sigue aferrándose a un amor imposible.

Sonrío por mi ingenuidad, era lógico, era tan obvio que no lo haría.

Nadie termina con su novia solamente porque tu hermana se siente incómoda con ella.

Eso no ocurre en la realidad.

Dejo las llaves junto al mueble más cercano y abandonó el lugar, asegurándome de cerrar bien la puerta para que nadie intente entrar.

No volveré a este lugar, no cuando ha sido ensuciado con la esencia de Amy.

Me digo que Landon también ha sido contaminado por ella, pero es un poco más difícil intentar cortar el contacto con él.

Mi corazón sigue aferrándose con fuerza a pesar de los daños que ha recibido. Mi tonto, tonto corazón me llevará a un camino sin retorno con su eterna insistencia.

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