capitulo 13: el regreso de la tragedia

— ¿No recuerda nada?— preguntó él, un poco confundido.

— no... No hice nada indebido ¿Verdad?

Esta confesión devolvió la pequeña sonrisa al hombre.

— anoche... Usted estaba tan feliz por el matrimonio de su familiar que lo celebró a lo grande. Luego del baile, la emperatriz se nos acercó un momento prevé y luego se marchó. Luego de ese instante... La princesa me pidió que la siguiera acompañando, la verdad no podía dejarla sola, bebía mucho temía por su seguridad...

— entonces...

— y entonces... Entre una cosa a la otra...— la mira fijamente— usted me besó.

— que...

— yo le guardo un gran respeto a usted. Pero debió de darse cuenta que me gustabas que decidió dar el primer paso...

— y luego...

Ahí Archy volteó su rostro un poco avergonzado. Y excusa su comportamiento.

— me llevo a su habitación para calmar su sentido lujuriosos. Yo no quería aún, mi costumbre es hacerlo después de casarnos... Pero luego se sacó su anillo y me declaró lo siguiente...

«Archy... Eres el primero hombre que me atrae, desde que te vi la primera vez fingí seriedad porque no estoy acostumbrada a estos sentimientos, pero está noche siento que es el momento de dejar atras mi veladas en soledad. Te prometo que sí está noche tú y yo la pasamos juntos, mi mano será tuya»

— básicamente me pidió matrimonio a futuro. Yo debia de rechazarla, no podía romper esa tradición... Sin embargo...— le toma la mano y la besa gentilmente—... Lo hice porque de verdad me gusta y mucho.

— Archy... Yo...

Él hombre veía como aquella albina se sentía avergonzada de sus actos.

— está bien si no puedes cumplir la promesa, estabas bajo el efecto del alcohol. Sin embargo, Quiero oír tu respuesta más tarde de lo que verdad quieres, cuando lo hayas pensado mejor.

En un momento. Zafiro de poco a poco le llegaban los recuerdos. Aquel hombre decía la verdad. Ella realmente sentía atracción por él, aún así, cuando le dijo que la emperatriz se le acercó, dedujo que le echó su popular perfume para unir a las parejas y que sabía muy bien que esos perfumes solo funcionan si ambos tienen sentimientos mutuos.

« supongo que jamás sería capaz de demostrarlo por mí misma. No estaba acostumbrada a ser amorosa o demostrar dicho sentimientos a una persona. Cuando vi a Archy por primera vez, sabía que él era diferente, me gustó ahora que lo admito, pero no sabía cómo podía demostrarlo hasta ahora que Ross hizo lo que hizo...»

Pensó ella. No sentía culpa ni remordimiento. Aquellos recuerdos de anoche, cuando ambos cuerpos se juntaban constantemente. Le causa un poco de calor, realmente se sentía tonta por no haber recordado algo así al despertar.

Mientras que Archy se levantaba con un poco de decepción. Zafiro lo abraza por detrás. Al darse cuenta de lo que sentía por él, ya no habrá motivo para no saberlo como enseñarle que también le gusta.

— Archy... Te pido que me perdones.

— ¿Por qué?— preguntó él, un poco impresionado—... ¿Por qué te olvidaste que anoche estuvimos juntos?... Eso es lo menos importante... Lo que me preocupa es que sea rechazado por la mujer que puse mis ojos...

— y no lo serás. No esperes a que tome una decisión de lo que haré contigo, porque ya lo hice. Conozco la costumbre de tu pueblo, y cumpliré mi promesa contigo, porque... Tú también me gusta.

— eso significa que...

Zafiro asiente.

— es algo muy común casarse y conocerse en el matrimonio. Mi temor que después de casarme todo cambia, pero contigo no tengo dudas de que lo pasaré bien a tú lado...

— oh... Princesa...— al voltearse, éste le roba varios besos de su labios y continuarán con lo que dejaron en la noche. Esta vez sin olvidarlo.

______________________

Más tarde. Emiliano se preparaba para irse al terreno de Aurelio. Donde sus soldados esperan por él. Era de esperarse que él se marchará rápidamente sin avisarle a los emperador, ya que ellos sabían cuál era el deber de su hijo. Sin embargo, Fiorella no dudó en despedirse.

...----------------...

— este será un breve adiós. Si no es tan grave como parece, vendré mañana a la anochecer.

— ¿Me escribirás?

— no suelo enviar carta...— la mirada de la dama bajo un poco triste, sin dejar de terminar al comandante— pero ahora sé que alguien se preocupa mucho por mí, te enviaré una carta al estar en Aurelio ¿De acuerdo?

Volviendo a su sonrisa, Fiorella asiente tanta veces como puede. Sin embargo, con un poco de vergüenza, le pide una cosa antes de que se monte a su caballo.

— Emiliano... ¿Puedes... Darme-...— antes de que está terminará, él le toma los labios prestados por varios segundos.

— ¿Creíste que me iba sin dejarte una forma de recordarme?...— aclaró un poco pícaro.

Ella se tomó de los labios y dejó que se marchará. Al ver que su caballo se alejaba con el montado. En ese momento, llega la emperatriz a su lado.

— él se irá enamorando de tí aunque no se de cuenta. ¿Y tú?

— yo... Realmente no sabía que era amar o ser amado. Pero el sentimiento que él me brinda es muy cálido, confortante y un espacio en la que me siento cómoda y que jamás deseara salir...

— y eso que ha pasado un día de matrimonio... Verás, que un tiempo limitado no se compara con muchos años de matrimonio. Te lo digo por experiencia. Mi esposo y yo acordamos casarnos por un año... Miramos ahora.

— ¿Usted cree que Emiliano y yo podremos durar más de unos meses?... Yo quiero estar a su lado aunque pase un año, pero no sé si él...

— no lo creo, lo sé. Y Emiliano es como su padre. Solo ama una vez y cuando lo hace lo da con todo. Ahora, ya que él no estás, me ayudarás con algo.

— ¡Sí!... ¡Lo que sea!... ¿Y... Que es?

— oh. Abrí nuevamente mi labor en los perfumes. Así que necesito una ayuda en mi taller...

Fiorella fue llevada por la emperatriz a su recámara donde elabora sus fragancia.

« Zafiro no ha bajado de su habitación por lo que me comentó una sirvienta, además, avergonzada me contó que se escuchaba estruendos en esa recámara... Ahora recuerdo porque me gustaba hacer estos perfumes. La satisfacción de ver a dos personas que se quieren es mejor que verlos sin demostrar sus verdades intenciones»

Entre risa, dice a susurro.

— habrá otra celebración.

— ¿Dijo algo, su majestad?

— nada, nada... Y ya te dije que podrías llamarme Ross.

_______________

Tras varias horas de viaje. Emiliano llega a la tierra que antes era el reino de Aurelio. Sin embargo, para dejarse llamar así debe tomar sus dominios por completo. Pero aún no se ha podido hasta confirmar que estás tierras están seguras para expandir más el imperio. Para ello está el comandante y sus soldados.

Un grupo de investigación habían descubierto una mina casi cerca del castillo. No había decidido indagar más dentro de la cueva por una gran razón. Emiliano llega al escuadrón y le pregunta sobre el informe.

— me había escrito que lo urgente tenía que ser anunciado personalmente. ¿Que es lo han descubierto en la mina?

— comandate... Nuestro exploradores al ir más allá se devolvieron al escuchar algo fuera natural... Un rugido muy feroz, como el gruñido de un lobo. No sabíamos que era y queremos investigar más pero... Tememos a que sea algo muy peligroso para detenerlo nosotros.

— ya veo... Entraré solo. Si hay un ser muy peligroso seré el único capaz derrotarlo...— sacando su gran espada, éste se adentra solo a la mina. Con una linterna caminaba normalmente.

«mi padre me contó que cazaba unas bestias que tenía la apariencia de un lobo que escupía fuego y era del tamaño de un oso. Que hace años fueron erradicadas por completo... Pero ahora dudo de eso»

Emiliano había caminado por un buen rato. Pero ahora, que sentía el presentimiento, deja caer la linterna y un fuego inesperado lo amenaza. Acercándose a él con rapidez, el comandante prepara su espada con ambas manos y en el momento indicado la alza con fuerza contra esa bestia que pensaba en devorarlo.

«cortale la cabeza. Esas bestia no mueren tan fácil. Su punto débil es ahí»

Tras dejarse llevar por ese pensamiento, lo esperado por él ocurrió. Tan pronto que el fuego se extinguido de la bestia, tanteo donde estaba la cabeza y la tomó.

Al salir de la mina. Los soldados esperaban por el con una gran tensión.

— ¡Comandante!... ¡¿Que fue lo que-...

Emiliano lanzan la cabeza los pies de esos hombres. Y declara lo siguiente.

— preparen todo volver.

— ¿Que?... ¡¿Que es eso?!... ¡Usted puedo vencerlo y solo!

— este lugar es zona roja. Hay que volver de inmediato y anunciarle al emperador de lo peligroso del lugar. Por suerte, tuve un consejo para derrotarlo, de lo contrario, no estuviera aquí a salvo. La bestia de fuego han vuelto.

Muchas gracias por leer 😊

✓ no olviden su hermoso like

***Este trabajo esta bajo contratado con NovelToon y la piratería, como la reimpresión sin permiso, están estrictamente prohibidas.***

***¡Descarga NovelToon para disfrutar de una mejor experiencia de lectura!***