Capítulo 16.los sentimientos de Camila se confunden.

Cálmate no te hace bien enojarte, piensa en nuestro bebé dijo Sergio.

Sí, María, mi sobrino puede estar en peligro cálmate, Camila esta aquí porque ella es la mamá de Abelito.

Ella, será la mamá, pero no está invitada a la fiesta quiero que se vaya, qué se vaya.

OK, no aguanto más, es suficiente, si me permites a mi hijo, adiós.

Camila no te lo lleves queremos celebrar sus 6 meses de mi sobrino.

Lo siento, pero mi hijo está en donde, yo estoy y sí a mi no me quieren aquí, tampoco a mi hijo permiso.

Sergio no se atrevió a decir nada más no quería que María se exaltar más y perjudicará a su bebé, Daniela estaba qué echaba humo, pero también no dijo nada, Camila tomo un taxi y fue a casa de leonel, entro llorando, abrazada a su pequeño.

Perdóname, amor, tu estás tan pequeño como para estar pasando por todo esto.

Qué todo esto dijo Leonel.

 quién, asustó a Camila, ella pensaba que estaba sola no se dio cuenta de que leonel estaba en la cocina comiendo.

Leonel, no sabía que te encontrabas aquí.

Sí, llegué hace rato me dio hambre y me serví, por que vienes así, y porque el monstruo es pequeño para pasar qué, qué te pasó, Camila.

Sergio.

Aya, tenía que ser ese idiota, pero me va a oír, él será muy el padre del monstruo, pero no tiene ningún derecho de hacerte llorar o hacer sentir mal al monstruo.

No, Leonel, ya dejalo así por favor no fue él, fue su pareja, él y Daniela solo quisieron celebrarle la fiesta de 6 meses a Abelito, pero su pareja no me quería allí dijo que solo era familiar.

Estúpida María, por supuesto que eres familiar tu, Daniela, Sergio y Abelito la que sobraba allí era ella, no llores, no lo hagas.

Leonel abrazo a Camila con ternura y limpio los ojos de Camila depositando un beso en los labios de Camila quién le correspondio.

Camila, tu me gustas mucho, quisiera que me des la oportunidad de demostrarte cuanto te amo.

Leonel, mis sentimientos están confundidos, yo, realmente creí que nunca podría amar a otra persona que no sea Sergio, y así fue hasta ahora, pero no sé que me está pasando yo, no puedo sacarte de mi cabeza.

Camila no sabes cuanto me gustaría que te enamores de mi.

Dame tiempo debo ordenar mis ideas por favor.

Sí, te daré tu tiempo y tu espacio, dime en dónde está el monstruo.

Está en su cuna se quedó dormido, prepararé algo de comer.

Camila fue a la cocina, no pudo más y volvió salir su llanto, al sentir la presencia de Leonel limpio sus lágrimas, Leonel fue hacia ella la volteo hacia él y no le dio tiempo ni para pensar él la beso apasionadamente, ella le correspondió, él la llevó a su cuarto y empezó a besarla en su cuello y bajaba a sus pechos, ella se arqueaba de placer, en su cabeza solo estaba Sergio, Leonel disfrutaba del cuerpo de Camila, fue cuando Abelito se despertó y se puso a llorar, Camila reaccionó y empujó a Leonel.

No, no esto no debería de pasar, no está bien, debo ir con mi hijo.

Camila.

Leonel se quedó en su cuarto, él estaba muy deseoso de Camila, tal vez no era el momento, fue al cuarto de Camila se paró en el marco de la puerta recostado.

Camila, lo siento me dejé llevar, no quise faltarte el respeto.

No te preocupes, no me forzaste, yo también tengo culpa, lo siento, solo quiero enfocarme en mi hijo, espero que me entiendas.

Si te entiendo, iré a seguir comiendo,aún tengo hambre.

Si claro dijo Camila.

Luego ella preparó la cena, ellos cenaron, Leonel tomo su casaca, se despidió de Camila y de Abelito y se fue a casa de su mamá. Camila se recostó en su cama junto al pequeño Abelito, quien se resistía a dormir.

Vamos mi amor, tengo sueño, aún mañana es viernes tengo clases.

Así ella estuvo despierta hasta las 12 de la noche hora en el que Abelito se quedó dormido. Al día siguiente otra vez al colegio, Sergio buscó a Camila, ella no quiso ni conversar con él.

Por favor Camila, escúchame.

No, Sergio, escúchame tú a mí, no te me acerques, por favor, no quiero más problemas con tu pareja, tu pareja, es cierto tú te acuestas con otra persona, pero yo te sigo siendo fiel, porque, porque, yo no puedo, no Sergio yo también tengo derecho de ser feliz, si también puedo entregarme a otro hombre.

¡No! No y ¡no! Camila tú eres solo mía, de nadie más, recuerdas, solo mía.

Leonel apareció y paso sus manos por encima del hombro de Camila abrazándola.

Vamos amor.

Sí.

No, no tú no puedes estar con Leonél, él es nuestro testigo de matrimonio, él es mi hermano.

No soy tú hermano, ya deja de fastidiar con eso.

No, no Camila por favor, tú eres mi mujer solo mía, Camila.

Leonel se fue junto a Camila, Sergio quedo destrozado, no sabía que hacer, al final decidió no entrar a clases y se fue, ya que no quería encontrarse con María dentro del colegio, camino durante mucho tiempo sin ningún rumbo, solo imaginarse a Camila entregandose a Leonel, su corazón dolía mucho, en el camino se desmayó, uno de los transeuntes tomo el celular de Sergio y marco el número de Daniela, cuando ella supo en donde se encontraba Sergio fue hacia allá sin pensarlo, ella estuvo al pendiente de Sergio, luego tomo el celular de Sergio, busca el número de Camila, marco muchas veces, pero nunca timbro, decidió, llamar desde su celular, copio el número llamó, Camila contestó.

Aló, con quien hablo.

Camila, soy Daniela.

Dime, Daniela, qué sucede, aún estoy en clases.

Camila, es mi hermano, él, él.

Daniela, estoy en clases, supongo que tu hermano está en clases.

No, Camila, mi hermano está internado en el hospital.

¿Qué? , ¿Porqué? , ¿qué pasó?

No, lo sé, Camila, mi hermano se desmayó en la calle unas personas lo ayudaron.

Pero, si yo lo vi fuera del colegio, no, no, Daniela es mi culpa que Sergio se encuentre mal, yo.

Qué hiciste, tú Camila, por que dices que es tu culpa.

Yo. Lo siento, estoy saliendo para allá.

No Camila, no vengas, su pareja está en camino, solo te avisaba que Sergio esta en el hospital.

Si, Daniela, gracias por avisarme.

Camila, terminó la llamada, se sentó asimilando la noticia de que Sergio estaba en el hospital.

Llego la hora de receso, Camila llamó a Daniela.

Disculpa que llamé, pero quisiera saber como se encuentra Sergio.

Deja de llamar a mi cuñada, no es asunto suyo que mi esposo esté en el hospital, así que encargues de su vida y deje la mía en paz.

Camila no supo que responder, solo guardo silencio y terminó la llamada, ella se sentía como una intrusa en la vida de Sergio, el peor error fue llamar a Daniela, sabiendo que ella ya no tiene ningún derecho allí, Camila continuó con sus clases, al terminar las clases salieron, Leonel dio al canse a Camila.

Estás,, molesta.

No, ¿Porqué, acaso debo?.

No, solo por que te dije amor a la hora de entrada y te lleve conmigo.

No, no estoy molesta de hecho así logré zafarme de Sergio, pero ahora me siento culpable.

Por qué, qué sucede.

Leonel, Sergio está en el hospital.

Pero no es culpa tuya.

Si, si lo es no debí decirle qué, yo también tenía derecho a hacer mi vida.

Pero tienes derecho a hacer tu vida, Camila, Sergio no se puede oponer a que tu hagas tu vida, él lo está haciendo, que no sea egoísta.

Leonel, pero ahora, él está en el hospital y no se como esta, me duele tanto, no saber nada de él y lo peor es que no tengo ni derecho a preguntar.

Camila, no es justo, tú, no tienes por que sufrir asi, yo te prometo averiguar vamos, tu ve por él monstruo y yo iré a ver como está, Sergio nos vemos luego.

Gracias, Leonel.

Leonel, sé fue pensando. Cuanto quisiera que te enamores así de mi, Camila, me gustaría, tener tu amor te prometo que conmigo no tendrías que derramar ni una lagrima, hasta sería capaz de cuidar al monstruo como hijo mío, después de todo no es tan malo tener un monstruo en casa.

Camila, sé fue por Abelito.

Hola, amiga, cómo está, mi pequeño niño.

Pues, es todo un angelito, ya almorzó.

Qué, bueno.

Qué, sucede, Camila porqué estás así tan preocupada.

Lady, es Sergio, quien está en el hospital.

Y tu porque te preocupas creo que él tiene otra pareja, ella es la que se tiene que preocupar.

Si, lady.

Espera, espera, acaso aún lo amas.

Sí, sí, lady aún lo amo, no puedo olvidarlo, de hecho no quiero olvidarlo.

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