Capitulo VI La cita

Annia

Sentí miles de mariposas en mi estómago con este beso, este beso fue diferente a los otros que nos habíamos dado, en este sentí una entrega por parte de él, me deje llevar por lo que estaba sintiendo y si a lo mejor estoy siendo muy ingenua, pero por primera vez en mi vida quería sentir eso tan bonito que sienten mis padres, nos separamos nuestras frentes quedaron unidas al igual que sus ojos se unieron a los míos, me sentí tan bien que olvide el tiempo, hasta que sentí mi teléfono, mire quién era al ver el nombre de mi asistente me di cuenta que mi hora de descanso había terminado, le dije a Emanuel que tenía que regresar al trabajo y que nos veríamos luego, baje corriendo las escaleras y luego me subí al ascensor hasta mi piso, al llegar mi paciente estaba esperándome, le pedí disculpas y le pedí pasar.

Annia: señorita Hernández dígame qué la trae a mi consultorio?

Katia Hernández: bueno desde hace días me está doliendo un poco mi parte íntima, sé que usted no es ginecóloga, pero sé que me puede recomendar una muy buena.

Annia: bueno dígame desde cuándo empezó con ese dolor y que actividad hizo antes de que le empezará?

Katia: bueno desde hace una semana y es que el novio que tengo ahora es un semental y bueno cada vez que estoy con él me duele mucho.

Annia: están teniendo sxxx rudo?

Katia: bueno un poco, pero antes esto no me había pasado.

Annia: le aconsejo que se abstenga de tener relaciones sxxxxxxx hasta que sea revisada por una ginecóloga, ya la estoy remitiendo con nuestro departamento de ginecología y espero que tenga un buen día.

Katia: muchas gracias Doctora, igualmente feliz día.

Esta señorita salió de mi consultorio y paso el siguiente paciente, así estuve hasta las ocho de la noche.

Al terminar mi turno me propuse dirigirme a mi apartamento cuando estaba por salir del edificio Emanuel me interceptó.

Emanuel: buenas noches, Doctora Gil, sería usted tan amable de acompañarme a cenar?

Annia: por supuesto señor Gil con gusto lo acompañó.

Emanuel: vamos a mi auto.

Annia: yo tengo mi propio auto, si quiere lo sigo.

Emanuel: de ninguna manera, ya resuelvo lo de su auto.

Emanuel hizo una llamada, me pidió mi dirección y la envío después pidió mis llaves y se las entrego al vigilante de la emergencia, y así resolvió lo del auto, me llevo a un restaurante muy lujoso, y cuando estábamos cenando vi entrar a mis padres, mi madre con su vista de Halcón me vio en la distancia y como era de esperarse se acercaron a nuestra mesa.

Sebastián: hija mía, que coincidencia está mañana hablamos de vernos y mira cómo es el destino.

Annia: papá, te extraño tanto estaba pensando pasar el día fin de semana con ustedes.

Katherine: buenas noches, hija, y acaso no piensas presentarnos a tu amigo?

Annia: hola madre tu siempre tan directa, bueno mamá el es Emanuel mi jefe, ella es mi madre Katherine De La Garza y mi papá Sebastián Gil.

Emanuel: un placer conocerlos señores Gil, había escuchado mucho de ustedes en los medios y siempre quise conocerlos.

Sebastián: un gusto conocerlo doctor?

Emanuel: lo siento soy Emanuel Jones médico cirujano, director general del hospital de la Paz.

Sebastián: que buen currículum, bueno hija los dejamos, vamos a reunirnos con clientes, fue un placer conocerlo señor Jones hija te esperamos el fin de semana.

Mis padres se fueron a su reunión y Emanuel y yo nos quedamos solos.

Emanuel: tus padres son intimidantes, nunca había estado ante personas con tanto carácter y seguridad como ellos.

Annia: si algo que yo no tengo, mis hermanos mayores son iguales a ellos y eso me pone por debajo de esta familia.

Emanuel: no creo que tú seas débil, solo que aún tu verdadera personalidad no ha salido a flote.

Annia: bueno cambiemos de tema, tus padres como son?

Emanuel: no tengo padres, gracias a una miserable gente que me los arrebató.

Annia: lo siento, no quise recordar tristes momentos.

Emanuel: no te preocupes igual eso fue hace muchos años.

Annia: bueno y tienes hermanos?

Emanuel: mejor no hablemos de mi familia, mejor hablemos de ti.

Annia: ok, que quieres saber?

Emanuel: está mañana estabas hablando con tu papá?

Annia: así es, estábamos hablando de vernos el fin de semana.

Emanuel: que bueno, sabes te pareces a tu madre ella es una mujer muy hermosa.

Annia: si mi madre es bellísima igual que mi hermana Antonella, pero yo no soy igual a ella, y sabes me gustaría ser un poquito como ellas.

Emanuel: no tengo el placer de conocer a tu hermana, y solo son ustedes dos o hay otra hermana por ahí?

Annia: tengo un hermano mayor Mathias, él es un encanto y se parece mucho a mi papá.

Emanuel: ok entonces eres la consentida de la familia?

Annia: se podría decir que si, mis padres siempre me han sobre protegido al igual que mis hermanos.

Terminamos de cenas y Emanuel me llevo a mi apartamento, me pidió que lo invitará una taza de café, pero me tocó decirle que otro día sería, ya que era muy tarde y estaba muy cansada, él simplemente se despidió de mi sin decir nada más.

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