El placer de una mujer

Déjenme les cuento cómo aprendí eso en prisión sabemos que en prisión no hay hombres las mujeres se las tienen que ingeniar para satisfacer los más bajos deseos

algunas mujeres querían conmigo querían tenerme en su cama a una Virgen

trataba de no hacerles caso hacia lo posible por alejarme de ellas por suerte nunca nadie me tocó sin mi consentimiento solo una mujer pudo tocar mi cuerpo y hacerme tocar el cielo con las manos y enloquecer de placer en sus manos ella era muy hermosa muy guapa

pero con estilo único varonil sexy elegante diferente llamaba la atención de cualquier mujer por muy hetero que fueras quérramos o no la cárcel te cambia en muchas maneras en cosas que tú pensabas jamás hacer tienes que ceder para sobrevivir

Siempre trataba de ser la última en bañarme porque no quería que me vieran desnuda esas mujeres y empezarán a decirme cosas sucias pero un día estaba en las regaderas bañándome cuando siento que alguien toca mis pechos me asusto y me volteo de inmediato Qué haces le digo ella se acerca a mí me robó un beso para ese punto mi respiración ya estaba agitada le empujo con mis fuerzas ella regresa y me vuelve a dar otro beso la vuelvo a empujar pero al tercer beso mi cuerpo ya no quiso luchar más y cedio a sus besos a sus caricias ella acariciaba mis pechos debo decir que tengo buenos pechos me los lambia me los mordía me los chupaba poco a poco fue bajando hasta quedar arrodillada frente ami me abre de piernas y su lengua acaricia mi intimidad un gemido salió de mi boca por suerte estábamos solas y nadie me escuchó otra vez lo volvió a hacer con su lengua otro gemido salió de mi boca sin yo poder detenerlo siguió jugando con su lengua y masajeándome con sus dedos mi respiración se agitó gemidos salían de mi boca mi espaldas se arqueaba hacia atrás Me trataba de agarrar de lo que podía Hasta que por fin una explosión de placer se descargó en mi cuerpo ella se bebió todos mis jugos de mi entrepierna qué rica estás mi ángel espero que te hayas divertido Espero que te haya gustado se levanta y me da un beso en los labios yo inconscientemente saboreó su beso Vístete preciosa te espero todavía estoy en shock pero de placer rápidamente me visto y salgo con ella Desde ese entonces fuimos inseparable ella me enseñó a tocarme acariciarme a disfrutar del placer nuestro escondite perfecto era en la biblioteca en la bodega de la biblioteca esa mujer me hacía delirar de pasión pero nunca me forzó a nada que yo no quisiera y nunca intentó penetrarme con sus dedos solo me daba sexo oral y era lo mejor de la vida el día que salí de la cárcel me dijo que jamás regresará ni siquiera a visitarla que nuestra historia fue bonita pero que solo quede en una historia solamente en una historia de placer entre ella y yo

Pero nunca me había tocado que un hombre me besara me acariciera me deseara como mujer es algo nuevo para mí es algo inimaginable cómo será esa experiencia cómo será tener sexo con un hombre será igual solo el pensar me hacerte arder del deseo a la mañana siguiente en lugar de pensar todas estas cosas decido concentrarme en mis estudios que los he tenido un poco descuidados ya es tarde ya casi es hora de la comida Cuando veo a Rogelio bajar de las escaleras realmente tiene mucha cruda hago como que no lo veo como que nose nada

si me dice algo lo negaré todo se sienta a mi lado y me pregunta ¿cómo estás? Es algo raro porque él nunca se acerca a mí y mucho menos a platicar bien ¿por que? le contestó cortante como si todo siguiera igual entre nosotros No por nada ¿pasó algo interesante anoche? no qué podía pasar en ¿Dónde estuviste anoche? en mi cuarto durmiendo Lo que tú por lo que veo no hiciste ¿Estuvo buena la fiesta? no dice nada está a punto de levantarse pero nuestras miradas se topan y él se me queda viendo a los ojos con ganas de decirme algo con deseo carraspea la garganta se levanta y se marcha qué me está pasando siento que me puse Roja de la cara Lo bueno que ya se había ido y no me vio

esa noche ya no aguanto más mi deseo siento que ardo por dentro mientras mi entrepierna me pide caricias desde que salí de la cárcel no he tenido a nadie que me acaricie que me toque Así que lo hago yo por mi propia cuenta salgo de la ducha con mi piel mojada me acuesto en mi cama empiezo acariciar mis pecho y con mi mano bajo hasta mientras pierna acariciando moviendo mis caderas de arriba abajo sacudiendo mis dedos más fuerte más rápido pensando en los besos de Rogelio asta llegar al punto del placer

***Este trabajo esta bajo contratado con NovelToon y la piratería, como la reimpresión sin permiso, están estrictamente prohibidas.***

***¡Descarga NovelToon para disfrutar de una mejor experiencia de lectura!***