CAPÍTULO 12

Mi abuela llegó con el té, me sorprendió que el doctor vampiro, se lo tomará tranquilamente, el y la abuela comenzaron hablar por un largo rato, ¿cuándo es que se ve a ir?, ¡Dios!, ¿piensa dormir en nuestra casa?, ya me estaba enojando, tenía que dormir casi, mañana ahí instituto, y no escuche ni el final de la primera historia, este sigue así hablando y sonriendo.

— En té estaba muy bueno, me tengo que ir, mañana tiene Ana que ir al instituto y se le hace tarde, Ana acompáñame afuera, unos minutos, te traje una medicina.

— ¿No me la puede dar cuando vaya a la consulta?

No quiero salir con él, ¿quién sabe que tienen estos Vampiros en la cabeza?, puede ser más loco que el hijo, ¿estoy exagerando?, ¿puede ser?, bueno es mejor ser precavida, que pecar de ingenua y morir como tonta en manos de esto, ¡¿Por qué?!, ¿qué hice yo para estar en esta situación?

— No, este medicamento debes tomarlo hoy, si no quiere, deja que tu abuela venga conmigo y lo busque, ¿qué piensas?

— Claro que iré yo, ni más faltaba que pusiera a la abuela a buscarlo.

¡Maldito vampiro!, me pones entre la espada y la pared, solo para que salga, me pare de inmediato, no quería perder tiempo, camine hacia la puerta y se la abrí, luego se paró calmado, se despidió de la abuela, camino hacia la puerta y salió y yo detrás de él.

El patio estaba iluminado de por las luces que habíamos puesto, camine detrás de él hacia su auto, no deberían los Vampiros volar o algo así, ha, ha, ha, ¡Dios!, las cosas que me llegan a la mente, pero, ¿vuelan si o no?

— Hola.

— ¿Eh?,

Yo pensé que era una trampa, no me imaginaba, que el idiota mayor estaba aquí, ¿esperando?, ¿ahora que quiere?, miré para todos los lados, el doctor subió al auto, y me dejó sola con este.

— ¿Qué quieres?

— Quería verte, me preocupa que estés asustada, no te preocupes, que ella nunca va a venir aquí a molestarte, te lo prometo.

— ¿Y yo debería creerte por qué?...

Estarás aquí, de guarda día y noche para que esa demente vampira no nos lastime, yo no lo creo, no sería mejor que te alejaras de mí, y así todo esto se resolvería, pero, ¡No!, estás aquí, de noche, atrayendo el peligro mi casa, y quieres además que te crea, ya creo que estoy es una comedia y no la vida real.

— ¿Por qué yo?, pienso, hay miles de personas solo en la ciudad, pero molestas a una chica enferma, que apenas ha podido sobrevivir a esta edad, ahora tengo que luchar con fuerzas desconocidas, y sobrenatural, no crees que me puedes ahorrar todo esto, y solo dejarme en paz.

— No.

Me gustaría golpearlo, me enoja hasta ver su cara pálida, ya que no tenía caso seguir hablando me di la vuelta, está por irme cuando me agarro por un brazo, ¿es en serio?

— Espera.

Me volví a dar la vuelta,

— Suéltame, no me gusta que me estén agarrando, incluso ese brazo me duele de la última vez, tu novia casi me lo rompe, así que no me toques.

— Este talismán, es para protegerte de ella, úsalo siempre, ¿está bien?

Me lo puso en la mano, después de que me lo dio, me soltó, de nuevo me dio la media vuelta, y me fui caminado a paso doble, entre de dos saltos a la casa y cerré, la puerta, la abuela estaba esperando en el sofá, parecía tener sueño, entonces miré el collar en mis manos, y tome mi decisión.

— ¿Y la medicina?

— Abuela la busco el doctor por un largo rato en su auto, pero no la trajo, se le había olvidado.

Rápidamente, me senté a su lado en el sofá, y le dije.

— Abuela, este collar, quiero que te lo pongas y nunca te lo quites por nada, ¿está bien?

— Es muy bonito, claro te lo prometo, nunca me lo quitaré.

— Pero nunca es nunca, ni para bañarte, ¿de acuerdo?

— De acuerdo.

Le puse el collar a la abuela en el cuello, si es verdad que puede protegerme de esa loca, también a mi abuela, yo quiero vivir, pero estoy cansada de perder a mis seres queridos, no quiero que nada malo le pase a la abuela, así que la voy a proteger primero, luego el destino dirá que va a pasar conmigo y estos Vampiros.

Era tarde y nos fuimos a dormir, las historias quedaron inconclusas, espero mañana podamos seguir con eso, necesito saber más de todo esto, y como puedo lidiar con estos seres, mi gran deseo es vivir en paz, y no creo lograrlos con ese loco vampiro persiguiéndome.

Al día siguiente cuando llegue al instituto, todo estaba muy raro, y todo el mundo comenzó a murmurar desde que puse un pie dentro, lo extraño no era que murmuraban, sino, que muchas chicas me miraban muy mal, y yo no conozco a nadie aquí, a solo tres días de mi entrada en este instituto todo es un desastre.

— ¡ANA!

Me grito Emily desde que me vio, camino rápido hasta donde yo estaba, me miró de arriba abajo, suspiro, con desilusión, y después de un rato me cuestionó.

— ¿Es verdad?

— ¿Qué cosa?

— ¿Lo que está diciendo todo el mundo?

— ¿Qué cosa?

— ¿No lo sabes?

¿Es en serio?, si te pregunto, ¿qué cosa?, es porque no sé, si supera tuviera que presentar, creo que me voy a volver loca en este instituto, ¡Dios!, le preguntaré a la abuela, si quiere mudarse de aquí, pensé que este lugar sería pacífico, pero no, está lleno de gente loco, y sin sentido común, debo irme de aquí, lo antes posible.

— Le preguntaron a Dimitri, porque va a dejar que todos vayamos a su casa este sábado y él contesto, por qué mi chica quiere que todos vayan.

— ¿Y eso que tiene que ver conmigo?

— Y eres su chica.

— ¿Cómo?

Definitivo desde que llegué a casa, le voy a plantear a la abuela, el mudarnos, el dinero no es obstáculo, entre más lejos este de toda sata locura mucho mejor.

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