Capítulo seis.

Bella

—Vamos a tener que cambiar la escena —me detengo de lo que sea que estaba a punto de hacer, porque lo olvide, debido a la conversación del director, el productor y el guionista, los tres grandes reunieron a los actores principales para contarnos que iba a haber un cambio de escena—. La propuesta es que en lugar de que aparezcas tú, vamos a meter en el plato a ella, de ahí pasaremos al accidente... —me está revolviendo.

—¿Pero eso no representa un problema en la trama? Si adelantamos la escena del accidente es posible que nos quedemos sin material para las siguientes escenas... —miro al actor principal, mi coprotagonista.

—No quieren que se queden juntos —susurro, todos voltean a verme y me tenso, sonrío levemente y me encojo de hombros—. Es solo que, si se cambia la escena y se adelanta el accidente, nuestros personajes no se quedaran juntos y lo único que podríamos desarrollar con ese cambio, sería la separación y la pérdida del... ¿protagonista? —solo hago una suposición, pero el guionista me sonríe y asiente.

—Esto dejaría de ser romance, se volvería una tragedia —exclama la actriz que tiene el papel de antagonista.

—En realidad, el género principal es policiaco, la muerte de uno de los protagonistas es parte del crecimiento de él —señala al actor principal, vaya que cambios tan drásticos, si pones romance y de repente asesinas a un personaje principal, ¿no se vuelve muy trágico? Hay algo que no me suena.

—¿Por qué tengo que morir? —ahora los tres grandes me miran y parpadean, como si no supieran cómo reaccionar a eso—. No me molesta la muerte de mi personaje, pero ¿cuál es la justificación? ¿Solo por el crecimiento del personaje principal? Entonces, ¿por qué no me mataron desde el principio? —nadie me responde, mi representante, Rodri, me mira, asustado, ve de los tres grandes a mí.

—Bueno... sobre tu muerte... pensamos que... —balbucean, pero no me dicen nada.

—Si habrá cambios en el guion, no me parece mala idea, si mi muerte es algo que tiene que pasar, tampoco es una mala idea, pero quiero una justificación.

—En realidad —el director se adelanta, ya que los otros dos no saben qué decir—, queremos hacer dar un giro a la trama, te convertiremos en la villana, Bella —parpadeo—. Entonces, el cambio de escena será evitar que revelen tu identidad, y fingiremos tu muerte.

—¿Quieren representar que el mal siempre gana? —el director se ríe y sacude su cabeza.

—No es que el mal siempre gané, es una representación de que siempre existirá el mal —veo a mis compañeros y ellos lucen interesantes.

—Entonces, hay que hacerlo —el director me sonríe.

—Tomaremos una pausa, en lo que se hace el cambio del guion, una vez estén listas algunas escenas lo intentaremos, si vemos que funciona y no se pierde el hilo de la trama, continuaremos con los cambios, ¿de acuerdo?

-

—Si hay cambios, esto retrasaría las grabaciones y la terminación de la serie. ¿Crees que sea un problema para la película en la que vas a participar? —me pregunta Rodri, una vez que estamos dentro de la camioneta, el guardaespaldas me observa, ambos lucen preocupados por la carga de trabajo que esto puede significar para mi pobre y débil cuerpo.

—Estaré bien, es posible que el número de escenas en las que aparezca disminuirán, por lo que no serán una carga —veo a mi lado y hay una pila amontonada de guiones—. ¿Y esto?

—Ah, puedes ignorarlo. Te enviaron algunos guiones para ver si tenías oportunidad de participar en alguno, pero viendo en lo que esto se ha convertido, será mejor rechazar los papeles —tomo algunos de los guiones, solo por simple curiosidad.

—¿Cuántos son de protagonistas?

—Hay un total de doce proyectos, en dos solo quieren tu aparición breve, en tres quieren que seas un extra, en cuatro te ofrecen de antagonista y en tres de protagonista.

—¿Estoy perdiendo mi toque? Creo que todavía me veo joven, hay menos papeles para protagonista que antes —murmuro.

—No es eso, debido a que todos en este mundo saben que no participas en dos protagónicos al año, las ofertas son menores por temor a que las rechaces, algunos todavía tienen la esperanza de que aceptarás otro protagónico después de los dos que ya aceptaste este año —maldita ansiedad.

—Bueno, ahora que me he vuelto la antagonista en esta serie, puedo aceptar otro de protagonista —Rodri me mira fijamente y me encojo de hombros—. Puedo hacerlo, ¿no? En realidad, quiero aumentar el número de películas en donde participo, en las series suele ser muy pesado por el tiempo y los episodios, pero las películas...

—No todas salen en pantallas grandes, Bella, algunas son para plataformas, ya que el público se enfoca más en la comodidad de sus casas y ver incontables veces desde la plataforma.

—Sigue sin ser una mala idea.

—No sé, tendremos que pensarlo.

—¿Puedo leer algunos de estos guiones? En serio, quiero aumentar la cantidad de mi trabajo.

—Eso es raro, y lo sabes.

—Sí, porque en general soy una mujer que le encanta procrastinar, pero ya no. Mi mejor amiga está haciendo lo posible para superarse, yo debería hacer lo mismo. Además, dentro de unos años me quitaran la oportunidad de ser protagonista, con el tiempo me volveré la tía, la ex o la madre —palidezco de solo pensarlo—. Incluso la abuela.

—Estás exagerando —resoplo—. Llévate algunos y lee los guiones sin prisa, dentro puse un pequeño papel de hasta cuándo tenemos para dar una respuesta.

—Deacuerdo, jefe —tengo que mejorar.

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