Capítulo XX

Tanya Aleeksev cerró los ojos, mientras recibía un cálido beso de su novio Theo. 

—Te quiero Tanya. — Susurró el chico. 

Tanya sonrió de manera leve. 

—También yo, Theo. 

—Me alegra que estemos juntos Tanya. Eres la mujer de mis sueños, la mujer perfecta para ser mi esposa. 

Tanya llevó su mano hasta la mejilla del chico, para acariciarla con ternura. 

—Tengo un obsequio para ti. —El hombre sacó una caja pequeña, de la bolsa de su pantalón y se lo entregó a Tanya. 

—Ábrelo. 

Tanya tomó el obsequio gustosa. 

—Es un lindo brazalete. 

—Me alegra que te haya gustado. Gaste un mes de sueldo en esto, así que más vale que sepas apreciarlo. —Recalco el hombre.—Ahora dame tu muñeca izquierda. Quitaremos ese viejo brazalete de tu hermosa muñeca.— Dijo con una dulce sonrisa. 

Tanya cubrió su brazalete de manera rápida. 

—Yo… Creo que luciría mejor, en mi muñeca derecha. 

El hombre bajo las comisuras de sus labios. 

—Bien. —Se acercó a ella y tomó su muñeca derecha. —Tu amigo debe de ser muy especial, para que quieras conservar esa cosa oxidada.

—No está oxidada, Theo. — Dijo con molestia. 

El hombre mostró una sonrisa forzada. 

—Como tu digas, nena. Por cierto, la próxima semana viajaré a Marsella para cerrar el nuevo proyecto. 

—¿Viajarás de nuevo? 

—Sí. 

—Pero, hace dos días que volviste. 

—Nena, tu sabes que esto es así. Si quiero asegurar un mejor futuro para ambos, debo tomar todos los trabajos extra. 

Sin ánimos de discutir, la chica asintió. 

—Esa es mi chica. Yo sabía que eras perfecta para mí. —Dijo el hombre. 

—Entonces, supongo que no me acompañaras a la fiesta de Susan. 

El hombre arrugó el ceño. 

—No. No solo le hago un favor a tu amiga al no asistir, también me lo hago a mí. —Se quejó el hombre.—¿Has pensado en mi propuesta de vivir juntos?. 

Tanya se levantó del sofá y comenzó a recoger varios objetos de la mesa de centro. 

—Sí. 

—¿Y cuándo te mudas conmigo?

—Yo… no creo que ahora sea el mejor momento para vivir juntos. Aun me falta un poco de tiempo para terminar la carrera y… 

—¿Susan te persuadió para que no aceptaras, verdad? —Dijo molesto. 

—Desde luego que no. Yo no se cual es tu problema con ella. 

—Ella siempre te está metiendo ideas tontas en tu cabeza y eso no me gusta. No me agrada que seas amiga de ella. 

—Lamento que ella no sea de tu agrado, por que no pienso terminar mi amistad de años con ella, Theo. 

Theo se levantó del sofá, con molestia.

—Pues en un futuro tendrás que elegir entre ella y yo, por que de una vez te aclaro, que no la quiero cerca de nosotros cuando te haga mi esposa. —Dejó de manera determinada. 

Theo tomó sus cosas y salió del departamento azotando la puerta con enojo. 

Tanya se exhalo con fuerza, estaba cansada de las discusiones diarias con su novio Theo.

Camino hasta la cocina y dejó los objetos sobre la barra de la cocina. 

En ese momento desvió la mirada hasta el brazalete en su muñeca, se percató de que siempre brillaba con intensidad. 

—Zachary… —Susurró con una sonrisa llena de nostalgia. 

Las semanas siguientes todo continuaba igual, nada parecía cambiar, en la relación de Tanya y Theo. 

******

Zachary salía de una reunión de socios, cuando en las puertas del hotel, escucho una voz conocida. 

—¿Zachary Belf?

Zachary giró su rostro de inmediato, al escuchar esa voz. 

—¿Astrid?

Astrid sonrió. 

—Vaya que la vida ha sido buena contigo. 

Zachary no pudo evitar sonreír de igual manera. 

—Gracias, al parecer también has tenido una buena vida. 

Astrid resopló. 

—Bueno, hago lo que puedo. 

El pelinegro asintió. 

—Claro. —Zachary miró la hora en su reloj de mano. —Llegaré tarde a mí compromiso…

—Entiendo, no te preocupes. 

—Hasta luego Astrid. 

La chica se dio media vuelta para continuar con su camino. 

Esa noche, Astrid se reunió en un bar con sus amigos. La chica se divertía en la conversación, hasta que vio un rostro conocido. 

—¿Será el destino? —Dijo la chica, cuando llegó a la barra. 

Zachary negó con la cabeza.

—No creo en el destino. 

—El Zachary de hace años si lo hacía, ¿qué cambió ahora?. 

Zachary meneo el vaso de whisky qué llevaba en la mano. 

—Cambio una sola cosa. 

...ΩΩΩΩΩΩΩΩΩΩΩΩΩΩΩΩ...

...CHICAS, LAS INVITO A SEGUIRME EN MI PÁGINA EN INSTAGRAM......

...escritora_karlasantamaria2190...

..."Les mando un gran abrazo desde México "...

...ΩΩΩΩΩΩΩΩΩΩΩΩΩΩΩΩ...

***Este trabajo esta bajo contratado con NovelToon y la piratería, como la reimpresión sin permiso, están estrictamente prohibidas.***

***¡Descarga NovelToon para disfrutar de una mejor experiencia de lectura!***