Capítulo XIII

Susan abrió las cortinas de la habitación de Tanya.

Los rayos del sol qué entraban por la ventana, eran muy molestos para Tanya.

—¿Puedes cerrar la ventana?—Pide con disgusto.

—No. A menos, que cambies tu tono de voz.

Tanya tomó una almohada y se cubrió la cara.

Susan rodó los ojos y caminó hasta la puerta de la habitación, para abrirla.

—Estaré en la cocina, comiendo los panques de Arthur. Cuando tu terrible humor se vaya te espero abajo, pequeño gremlins.

Tanya bufo molesta y luego se descubrió el rostro. Su corazón dolía mucho, su rostro se veía demacrado y sus párpados inflamados. Había llorado toda la noche, lo venía haciendo desde que se había encerrado en su habitación.

Su actividad por las siguientes horas, solo se redujo en comer comida chatarra y ver películas deprimentes.

—¡Ya no puedo más!—Se quejó Susan, luego de ver su deprimente rostro. —En este momento, te cambiarás de ropa porque saldrás conmigo.—Terminó por exigirle.

Tanya se arremolino, en su cama.

—No tengo ánimos. Solo quiero comer y ver tele. — Dijo en un susurró.

—Vendrás conmigo al centro comercial. Y te advierto de una vez, que no quiero quejas.—Le tomó del brazo y la arrastró hacia el closet. Tomó dos prendas del lugar y las dejó en las manos de Tanya.—Ahora ve a vestirte.—Le ordenó a la chica.

—Qué tiene de malo mi ropa. -- Se quejó Tanya.

Con una mirada, Susan la escaneó de la cabeza a los pies.

—Sí piensas pedir limosna, esos harapos, te vienen bien.

Tanya abrió grandes los ojos.

—¿Qué tan mal me veo?—Le cuestionó sorprendida.

—Tu ropa quema mis retinas.—Respondió Susan, con su sutil franqueza.

—Bien, ahora me cambio.—Molesta y sin muchos ánimos, camino hasta la puerta del baño. Pero antes de entrar, se detuvo a tomar su teléfono.

—¿Volverás a llamar y colgar, cuando él responda? —Indagó Susan.

Tanya negó con la cabeza y soltó un suspiro, cargado de tristeza. Pensaba que al menos, ella hacía el intento de llamar, una molestia que Zachary no se tomó.

Susan se acercó a ella y le quitó el aparato de las manos.

—Por el momento seré yo, quien esté a cargo de tu celular.

******

Zachary arrojaba una pequeña pelota contra la pared. La atrapaba antes de llegar a él y volvía a arrojarla.

Andrew abrió la puerta de la habitación, caminó hasta Zachary y se sentó a su lado.

—Has estado muy callado estos días, no discutes con Susan y no te escapas por las noches. Eso nos tiene muy preocupados, a tu madre y a mí.

Zachary continuó arrojando la pelota contra la pared.

—¿Se trata de una chica?—Indagó Andrew.

Zachary asintió, lentamente.

—¿Te gustaría que charlemos sobre esto?—Le cuestiono de nuevo.

El chico exhaló con fuerza y giró su rostro hacia su padre.

—Conocí a mi primer amor. —Confesó Zachary.

Andrew sonrió.

—Eso es bueno, ¿no?.

—Eso creía, pero...

—¿Quién es la chica? ¿Hace cuánto, que estás con ella?— Se apresuró a preguntar, sin darle tiempo a su hijo, de terminar de hablar.

—No puedo responder eso.—Dijo Zachary en voz baja.

—¿Por qué no?—Andrew pregunto sorprendido.

—Sí ella llega a descubrir, que he contado sobre lo nuestro, podría terminar nuestra relación de una vez por todas.

—Eso no es algo bueno.

—No.—Respondió Zachary, luego de soltar un gran suspiro.

Andrew apretó levemente el hombro de Zachary.

—No importa que tan grande sea el problema, o cuantos sean. Si ambos se quieren y ponen de su parte, podrán solucionar esto.

—¿Y si eso no pasa?—Pregunto de inmediato, con algo de temor.

Andrew llevo su mano al cabello negro de Zachary y lo desordeno. Él chico sonrió un poco.

—Aún eres muy joven Zachary, aún te falta mucho por recorrer. En tu largo camino por la vida, conocerás un sin fin de chicas y quizás esta, no sea la única decepción que te lleves.

Zachary negó con la cabeza.

—Sin importar lo que pasé, ella será la única a la que le entregaré mi corazón.

Andrew sonrió, se levantó del suelo y caminó hasta la puerta.

—Recuerdas que hace tiempo nos pediste, de una manera insistente, a tu madre y a mí, qué te enviemos a New York. Estabas muy interesado en terminar tus estudios allá y ayudarle a Emma, con la administración del hotel.

Zachary asintió.

—Lo recuerdo.

—Bueno, si las cosas no salen como lo esperas, aún puedes continuar con esos planes. —dijo Andrew, antes de salir de la habitación.

Al cerrarse la puerta, Zachary arrojó por última vez la pelota. Exhalo con fuerza, queriendo sacar toda su frustración.

—Tanya...—Susurró desalentado.

Su celular comenzó a moverse, debido a la vibración.

El chico se levantó de prisa y tomó su celular, para responder la llamada.

—¿Tanya?

Su corazón golpeaba con fuerza su pecho. Esperaba que esta vez, la chica no colgara la llamada.

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...⭐Buenas noches, querid@s lector@s, quiero pedirles una disculpa 🙏 por la demora de las actualizaciones....

...Pasé por un momento de bloqueo y fue un poco difícil para mí, continuar con esta bella historia....

...A partir de ahora, las actualizaciones serán más frecuentes. ...

...✨¡Se vienen capítulos interesantes!✨...

...¡Les agradezco su comprensión y les deseo una excelente noche! 🌃 ✨✍️……………...

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