Capitulo 19

Owen:

Llegué a la casa de Camila, solo necesité de aparcarme en ver a las bolas de pelos cuando salieron empujando la puerta del mosquitero, corrieron empezando a ladrar. Rodé los ojos, esas perras si que necesitaban ser adiestradas…

Me bajé de mi auto observando el auto de Shannon, me hervía la sangre solo en mirarlo, desear que también tuviera aunque sea un rayón y aprendiera a respetar la propiedad de otro.

GUAFFFF, GUAAAAF, GUAAF…

Abrí la pequeña puerta de madera viendo como se me abalanzaron hacia mi tobillo, removí mis pies tratando de alejarlas.

Owen: Bolas inmundas, dejen de mordisquear.

La puerta del mosquitero se abrió. Levanté mi mirada y allí estaba esa sonrisa de burla de ver como me tenían sus perras, igual a ella, queriendo dominarme sin tener ni un solo efecto por hacerlo.

Shannon: Muffin, peaches…

Las benditas perras, me soltaron mirándome como si les debiera algo. Ella le daba un sorbo a su copa de vino que tenía en sus manos. Levantó una ceja al ver que ellas iban hacia donde su ama estaba paradas.

Shannon: Tranquilas pequeñas.

Levantó su mirada hacia mi, solté un gran respiro caminando hacia las escaleras de mi cuarto.

Shannon: Relájate… solo son cachorritas que detectan la mala vibra.

Owen: psss, Quien sabe por que están a tu lado.

Ella negó con la cabeza, si quería jugar a la que arroja la piedra y guarda la mano, conmigo esta vez no lo iba hacer.

Shannon: Podemos hablar.

Me detuve mirándola, ¿estaba de broma? Después de lo que hizo pretende que tengo ganas de hablar con ella. Negué con la cabeza.

Owen: No tengo tiempo para escuchar las estupideces de alguien que toma algo que no le pertenece.

Shannon: No tome nada sin permiso.

Owen: ¿NOOO? PAGASTE ESE MALDITO AUTO CON MI DINERO. ¿Quién TE CREES PARA DISPONER DE UN DINERO QUE NO ES TUYO?

Shannon: Lo tu…

Owen: MIRA NO ME INTERESA… VES COMO LE HACES, PERO QUIERO ESE DINERO DE VUELTA.

Se dio la media vuelta abriendo la puerta del mosquitero, las perritas entraron cuando ella entró sin decir nada más. Que ahora se las arregle para solucionar esta gran deuda que tiene conmigo.

Aparté mi mirada de la entrada de la casa subiendo los escalones. Subí sin apartar la mirada de la casa, esto si era un verdadero suplicio, estar junto a una persona que no merece el mínimo respeto de mi parte. Como supuse ella cree que todo gira a su alrededor.

Abrí la puerta del cuarto entrando. Solté un gran respiro quitándome los zapatos, necesitaba darme la ducha, lo necesitaba. Me quedé un instante sentado en la casa pensando en mi padre, lo delicado que estaba en estos momentos…

Tomé mi móvil mirando los mensajes de Leslie, sonreí al ver que ella siempre estaba presente en estos momentos, miré hacia la entrada como si Shannon fuera la que estuviera entrando, sentándose a mi lado diciendo que todo estará bien.

Me puse de pie marcando el número de Seal. No sabía si Connor lo había puesto al tanto.

Llamada:

- Hola Owen. ¿Cómo estas?

- ¿Te dijo Connor lo que sucedió?

- Si, estoy con nuestro padre. Grace me hizo el favor de ponerme más al día, creo que Connor omitió muchas cosas.

- Me imagino, cualquier cosa avísame, no importa la hora que sea.

- Descansa Owen, papá está bien cuidado por el Médico y Grace, me quedaré aquí con él, no lo voy a dejar.

- Lo sé, tomo la ducha y pienso ir de nuevo a verlo.

- No te apures. Owen…

El silencio en la llamada se hizo presente… Seal siempre ha sido el que más cercano a nuestro padre ha estado, claro que mi padre lo quiere demasiado por ser el único que no le ha dado dolores de cabeza tanto como Connor y yo.

- Owen, Shannon fue hablar conmigo.

Levanté una ceja intrigado a lo que le pudo decir esa mujer, como siempre causando lastima para hacerse a la víctima, detestaba esa parte de ella.

- No me interesa lo que te haya dicho.

- Owen, creo que has confundido mucho las cosas.

- ¿Yo? Esta loca. ¿sabes que hizo esta vez?

- ¿Qué te hizo?

- Se compró un auto de super lujo.

- ¿Eso a ti en que te afecta? Tiene los medios. Que lo haga.

- Con mi dinero.

De nuevo el silencio estaba en la llamada, no todo lo que Seal pensaba de ella era cierto, tenía que demostrar que la tenía en un concepto equivocado, no me importaba si tenía que demostrarlo con las facturas y lo que sea.

- No… no sé que decirte. ¿Motivo?

- Por favor Seal, el único motivo que existe, vaciar todas mis cuentas a beneficio de ella.

- Tenía entendido cuando gritaste a los cuatro vientos que no te afectaba lo que ella hiciera ¿no?

- Pero se mete con mi cuenta bancaria. ELLA NO TIENE NINGUN DERECHO DE HACER ESO.

- Bueno, Owen, tampoco es para tanto, sinceramente algún motivo tuvo que tener para tomar algo que no es de ella.

- De fastidiarme, la pienso demandar por robo.

- Hazlo, si sientes que eso necesitas hacer hazlo, no pidas mi autorización o permiso para hacerlo, tú y Connor ya están demasiado grandecitos para saber lo que quieren en la vida. La solución… cancela la tarjeta y listo.

- Claro que eso voy hacer. Te lo comento por que sabes que me molesta que creas que es una santa.

Seal, soltó una buena bocanada de aire, podía imaginarlo que estaba apunto de molestarse por que siempre la tenía que defender ante lo que se decía de ella.

- Owen… Todos cometemos errores.

- Ella los ha cometido uno tras otro.

- No creo que sea tan culpable como lo dices.

- Ya te lavó la cabeza. Experta hasta en eso.

- Sinceramente, el odio y el rencor que le tienes a Shannon que fue la mujer de vida, la mujer que llevaste ante Dios como tu esposa, no te deja ver sus cualidades. Si me preguntas que si hizo todo lo que dijiste. LA RESPUESTA ES NO.

Negué con la cabeza, como sabía esa tonta ya había dicho todo su conveniencia dejándome como el malo del cuento, pero no lo iba dejar pasar.

- Owen, eres mi hermano, compartimos muchas cosas por ser trillizos, hermanos idénticos, si te duele algo, también lo sentimos.

- NO LO VOY A DEJAR PASAR.

- Correcto, no lo dejes pasar, pero tampoco estas libre de culpa.

- ¿Qué dices?

- Habla con ella, escúchala. Como te dije, creaste un mal entendido desde un principio, algo que tú mismo sin darte cuenta te has estado haciendo daño culpándola de todo tu mal.

- No tengo nada que hablar con ella. La demandaré por robo, extorción y hasta de acoso.

- Hazlo entonces. Si eso te hace sentir bien. Hazlo.

- Nos vemos mañana.

- Descansa.

Terminé la llamada, busqué el número de Leslie. Miré que eran las 8: 00 de la noche, ella estaría ya en su cuarto sino es que con Nala conversando.

Llamada:

- Mi amor ¿Cómo estas?

Entreabrí mis labios al escuchar la manera que me había llamado, negué con la cabeza, no estaba aun listo para ese tipo de consideraciones y menos que me dijera como cuantas veces me hablaba Shannon, aparté el móvil. ¿Las estaba comparando? Rodé los ojos.

- Bien nena.

- Me preocupa que estes solito en este momento.

- Eso te iba a decir. ¿Puedes venir?

- Claro que si, quiero estar contigo. Solo que tengo que terminar unos reportes que nos solicitaron.

- De acuerdo, te espero.

- Si, iré preparada para darte la mejor noche de tu vida.

Terminé la llamada sin decirle nada, arrojé mi móvil en la cama, caminé hacia el baño, necesitaba una ducha, en verdad que la necesitaba. Entré al baño quitándome la ropa, abrí la llave de la regadera, me puse de bajo sintiendo como iba humedeciendo mi cuerpo… Cerré mis ojos disfrutando del agua, viniéndose en mi mente, la manera de ver a Shannon… La manera seductora que estaba con la copa de vino entre su mano, la manera de como lo removía dando un sorbo a sus labios, esos labios carnosos que disfrutaba mucho en besarlos, en hacerlos míos disfrutando de su sabor, la suavidad y los besos que hasta el momento nadie me ha dado.

Abrí los ojos tragando saliva, bajé mi mirada viendo que estaba excitado en solo recordar un poco de lo que ella era estar cerca de mi, negué con la cabeza masajeando un poco, no podía creer que tuviera reacción solo con pensar en ella.

La odiaba, me molestaba que ella estuviera aquí, no podía pasar por mi mente nada que sea ver la manera que tengo que hacer para que se vaya… Lo siento por Camila, por mi prefiero atender a esas perras antes que Shannon esté más tiempo aquí. Ella no sería la mujer que eche a perder mis planes y de nuevo mi vida.

Cerré la llave tomando una toalla, era el momento justo para que me escuchara en todos los aspectos y dejarle en claro que no la quería aquí.

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Owen

Shannon

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