Frio

Katherine observaba las vistas desde el hotel, luego de almorzar saldrían a reunirse con Casandra.

— ¿Y ya has pensado que te pondrás para mi, boda?, pregunto Natalie.

— No tal vez podría elegir algun vestido. Pero ya te advierto no me pienso aguantar a ningún monigote a mi lado.

— Pero para que entre contigo a la iglesia, incluso para bailar, Alexos tiene un hermano de tu edad. Te lo presentaré en estos días.

— No, ni lo sueñes. Preferiría pasar la noche del brazo de Henry dijo Kat.

Natalie comenzó a reirse— Seguramente irá solo, hasta donde sé no sale con nadie. Es muy reservado comento Natalie.

— A diferencia de Chris, todo el mundo sabe el nombre de su chica de turno.– El seguramente llevará a una Stripe dijo Kat.

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Casandra Ricci se encontraba algo tensa, conversando con su madre.

— Lo que no entiendo es porque si no querías saber más nada de Henry Beaumont, aceptaste esta reunión con su hermana.

— Porque será buena promoción, estamos hablando de la hija de Charles Beaumont uno de los petroleros más importantes y se casa nada menos que con Alexos Zouvelekis el dueño de una de las navieras mas importantes, si queremos expandirnos es un buen comienzo dijo Casandra aplicando toda la lógica al asunto. Hay mamá no me hagas caso, he estado bajo mucha tensión, entre la nueva colección y lo del desfile a beneficio,respondió Casandra.

‐ Deberías tomarte unas vacaciones dijo su madre.

— Seguramente lo haga en cuanto todo esté listo, quiero terminar de trabajar en la nueva colección.

— Y yo pensando que te casarias con Benicio, ya me veía con un nieto dijo Liliana dejando el periódico donde Benicio aparecia junto a su esposa.

— Benicio es un buen amigo además se nota que está loco por su esposa. Casandra tomo el periódico. Estuve en esta boda. A pesar de las diferencias y conflictos se aman, lo note la primera vez que me la presento la mira como papá te miraba a ti, no me conformaré con menos.

—¿Lo dices por Henry Beaumont?, pregunto Liliana

—Lo digo en general, respondió Casandra. Pero si eso había aplicado justamente para Henry.

Luego de cortar la llamada con su madre,estaba revisando unas cifras , cuando se perdió en sus recuerdos.

Henry tenía la mirada oscura e intensa y las pestañas largas y negras. Era muy alto y fuerte. Ella tenía que echar la cabeza hacia atrás para mirarlo. Tenía los pómulos marcados, las cejas definidas y la mandíbula fuerte. Era un macho alfa en todos los aspectos. Recordo su negro pelo y su enorme atractivo. Era guapísimo, pero a Casandra siempre le había llamado la atención que los fantásticos ojos fueran duros y fríos y la sensual boca solo sonriese ante la desgracia ajena. Dándose cuenta un poco tarde de que en realidad era un hombre vacío.

Ella estaba tan absorta en lo que sentía por él que no se había dado cuenta de que no era recíproco.

Todo comenzo unos dias antes de la boda estaban festejando en Italia cuando al cruzar por la biblioteca lo escucho hablando con su hermano.

— No entiendo por qué te casas había preguntado Chris Beaumont.

— Es lo correcto y lo que esperan que haga. Casandra es adecuada.

Se sintió avergonzada, mientras escuchaba esa conversación. Y entonces llegó a la conclusión de que nunca había escuchado un te quiero de sus labios.

No lo dudo ni un segundo, merecía más que ser solo adecuada y cancelo la boda.

Se fue a Francia, y tal como lo había supuesto Henry no la busco.

— Casandra tu cita de las cuatro está aquí, le anunció su asistente,sacándola de sus pensamientos ella se puso de pie y se dirigió hacia el salón.

— Natalie, bienvenida dijo Casandra.

— Casandra gracias por recibirme, te presento a mi hermana Katherine.

Ella observó a la joven, no había tenido la oportunidad de conocerla, ya que Katherine estaba en un internado, pero se suponía llegaria a la boda.

— Katherine es un placer conocerte dijo Casandra.

— El placer es mío, tenía curiosidad en conocer a la mujer que dejó vestido y alborotado a mi hermano.

—¡ Kat!, exclamo Natalie avergonzada. Disculpala Casandra, Katherine es tan sutil como un tropel de elefantes.

Casandra sonrió, — No hay problema, es tal cual la describió Henry.

— Eso no puede ser bueno dijo Kat mirando a su alrededor. Casandra volvió a reirse

— Tomen asiento ¿Dime tienes una idea de lo que estás buscando?.

Natalie comenzó a hablar, de lo que había visto en el desfile y lo que ella quería. Obviamente tenía que ser algo exclusivo.

Mientras tanto Katherine Beaumont revisaba los percheros.

— Kat necesita un vestido también comento Natalie

— ¿Tienes algo en mente?, pregunto Casandra.

— No, los vestidos elegantes no son mi fuerte.

Pero si quiero algo que resalte mis puntos fuertes.

Casandra observó a la joven era una muñeca. Una melena oscura y larga, le rodeaba el pequeño rostro, cuya piel parecía de porcelana. Y los ojos eran de un azul tan intenso como el de los zafiros. Tenía los labios carnosos y rosados, tenía demasiadas curvas para ser tan pequeña.

— Eres hermosa, no va a ser difícil hacer resaltar tus puntos fuertes dijo Casandra...

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Él Jeque Karim Bakhur de Burhan, ingresó a la propiedad que poseía en Londres.

Se dirigió al baño y se dio una ducha antes de comenzar con sus reuniones.

Estaba agotado, desde que había sido nombrado como sucesor del antiguo jeque Farouq su vida había cambiado por completo.

Cada uno de sus movimientos era vigilado constantemente, si no era por la prensa, era por su pueblo o los países limitrofes.

Reconstruir Burhan y la paz con los países vecinos no era tarea fácil.

De haberse negado, la responsabilidad hubiera pasado directamente a manos de su hermano de dieciocho años, lo cual para Burhan no era lo más conveniente.

Hacia un año había sido nombrado tras la muerte del Jeque Farouq, su primera tarea había sido negociar un acuerdo de paz con Amira Al-Halabi Hazbun regente de Raleigh y heredera del trono de Durham.

Lo cual no fue muy fácil, Amira Al-Halabi era más dura que el acero.

Las cosas estaban mejor, pero la situación de Burhan seguía siendo delicada. El hecho de que entre las familias de Raleigh y Durham hubiera lazos de sangre dejaba a Burhan al borde del precipicio.

Sabía que no podía cometer errores en sus relaciones diplomáticas, Burhan no podía ser víctima de otra guerra.

— Jeque Karim Bakhur, el señor Alexos Zouvelekis ya está aquí, le informó su asistente.

Alexos y él eran grandes amigos, esa semana cerrarían una fusión muy importante para el florecimiento de Burhan.

A ninguno de los dos les gustaba el nepotismo, independiente de su amistad el negocio tenía que ser favorable para los dos.

— Alexos, bienvenido siéntate.

— Su alteza, dijo Alexos.

— No pierdes oportunidad para burlarte de mi dijo Karim riéndose.

— Solo bromeó sabes cuanto te aprecio, vine a verte porque mi abogada llega mañana y podremos comenzar con la negociación.

— Tu abogada, tu futura esposa hará la negociación.

— Sí, ha estado trabajando en el proyecto, su jefe está enfermo y ella es la indicada.

— Estamos de acuerdo, ¿ cuando te casas?, pregunto Karim.

— En dos meses, espero que vengas a mi boda.

— Por supuesto, supongo que si hay boda hay despedida de soltero.

— Así es, pero no quiero una fiesta, estaba pensando en algo de deporte extremo ¿te unirás a nosotros?. No es para flojos y no habrá celulares ni equipos de seguridad dijo Alexos.

Con treinta y tres años, Karim no tenía nada de flojo. Era alto y fuerte, despiadado en los negocios e insaciable con las mujeres. Karim hizo un esfuerzo para no parecer incómodo, la posibilidad de dejar a su equipo de seguridad era muy difícil aunque nada le daría mas gusto…

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