Capitulo XVIII

Después de aquel beso tan apasionado que me dio Katherine nos fuimos por los niños, esta mujer es demasiado especial, si ella supiera que me tiene loco y que quisiera hacerla mía, pero tengo que calmarme ella aún no está preparada y se que algún día ese trauma ella lo superará, solo espero que sea conmigo.

fuimos por los niños y Antonella estaba súper emocionada, ella nunca había estado cerca de caballos, así que con ayuda de mi entrenador de caballos se subió en uno, ella y Mathias se llevaban muy bien parecían hermanos de verdad, después de un corto paseo en caballo los llevamos a ver a los ponis estos eran muy tiernos y Antonella no dejaba de sonreír, se veía tan bonita y es que no cabe duda que salió a su mamá, pero siento que se parece a su papá en el carácter, lo bueno es que el carácter se puede moldear, Katherine veía con tanto amor a esa pequeña y aunque no la tuvo como ella hubiese querido, esa parte no le quitó lo buena madre.

Katherine: Sebas que te parece si un día traemos a los niños de la casa hogar aquí?

Sebastián: si me sigues llamando así los llevo a la luna si tú quieres.

Katherine: deja de bromear, estoy hablando en serio.

Sebastián: y yo también, me gustaría que al regresar me acompañaras a comprar algunos regalos para los niños de la casa hogar.

Katherine: yo encantada esos niños son muy especiales, y el que más llamó mi atención fue Miguel.

Sebastián: lo sé ese niño me robo el corazón hace mucho, no he podido adoptarlo porque soy soltero necesito una esposa para poder llevarlo conmigo.

Katherine: espero y encuentres una buena mujer y puedas adoptarlo.

Sebastián: creo que ya la encontré, solo que ella aún no lo sabe.

Katherine: bueno vayamos con los niños te parece?

Sebastián: antes quiero pedirte algo.

Katherine: claro dime.

Sebastián: me gustaría dormir contigo hoy, no te asustes no pasará nada, solo quiero abrazarte y despertar contigo mañana.

Katherine: y los niños?

Sebastián: no te preocupes por ellos mi empleada los cuidará muy bien.

Katherine: Eso me pone nerviosa, nunca he dormido junto a nadie que no sea mi pequeña.

Sebastián: bueno dame ese privilegio.

Katherine: está bien, solo ten un poco de paciencia conmigo.

Sebastián: toda la que quieras, por ti esperaría una eternidad.

Fuimos a buscar a los niños, ya era hora del almuerzo, el almorzamos en un lugar al aire y por primera vez me sentí en familia, por primera vez después de mucho tiempo sentí que tenía una esposa mi corazón se sentía latir muy rápido, este sentimiento es otra cosa y no sabría cómo describirlo.

Terminamos el día fuera de la casa los niños estaban muy cansados así que no dieron que hacer para dormir.

Margaret: patrón los niños ya se durmieron también dispuse de un lugar para estar al pendiente de ellos y ahora con su permiso me retiro.

Sebastián: gracias Margaret, por favor no se separe de ellos.

Margaret se fue a descansar, yo también quería irme a mi habitación, pero Sebastián me detuvo.

Sebastián: tenemos un trato, está noche estarás conmigo.

Katherine: estoy muy nerviosa y es que no quiero salir corriendo.

Sebastián: no lo hagas, no pasará nada que tú no quieras, ok.

Katherine: está bien, déjame buscar algo de ropa para dormir y sería todo.

Sebastián: no hace falta, en mi habitación están algunas cosas que mandé a traer para ti.

Katherine: estabas muy seguro que me quedaría contigo?

Sebastián: no es eso, yo solo tenía la esperanza de que algún día te quedarás conmigo.

Fuimos a mi habitación, Katherine se veía muy sorprendida por este espacio, solo espero le haya gustado.

Katherine: está habitación es demasiado elegante, me encanta.

Sebastián: me alegra que te haya gustado, ven a ver el closet y así escoges lo que te vas a poner.

Katherine: estás loco, ¿por qué tienes un clóset con tanta ropa si ni siguiera vives aquí?

Sebastián: pues este lugar es uno de mis favoritos y cada que puedo vengo con Mathias, así que me gusta estar preparado.

Katherine escogió lo que se iba a poner y entró al baño, tardó como veinte minutos en este, al salir se veía muy hermosa en esa bata de cama, como me gustaría quitársela, pero aún no es el momento.

Ella se veía muy apenada así que me acerque y la abrace dándole un dulce beso, después nos fuimos a dormir y como lo prometí no intente nada con ella.

Sebastián: hueles muy bien.

Katherine: use tus productos para bañarme.

Sebastián: no me refiero a eso, es tu olor natural el que siento.

Katherine: bueno no sé a qué huelo.

Sebastián: ven volteate vamos a dormir abrazados, quiero que te acostumbres a mi cuerpo.

Katherine: realmente tienes muy buen cuerpo, me gusta lo que veo.

Sebastián: y a mí me encantas tú, puedo saber cuándo es tu próxima cita con tu terapeuta?

Katherine: para qué quieres saber eso?

Sebastián: me gustaría acompañarte, quiero ayudarte a superar este trauma.

Katherine: no tienes que hacerlo, no quiero molestarte con eso.

Sebastián: no es que tenga, es que quiero hacerlo y para mí no sería ninguna molestia.

Katherine: está bien, el miércoles es mi próxima cita, solo después de ese día no vayas a huir. El lunes hablo con mi psicóloga y le planteo tu propuesta a ver qué dice ella.

Sebastián: está bien, esperaré su respuesta.

Esta mujer es demasiado hermosa, aún recuerdo todo lo que me contó y me sangre se pone demasiado caliente, quiero acabar con Dylan, ese poco hombre de mierda, ya hablé con mi abogado y este me dijo que podemos deshacer ese ridículo matrimonio muy fácil, sin necesidad que Annia este presente. El lunes me llevaría toda la información solo faltaría que ella lo firmara.

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