Festejo por cuatro

Luego de muchísimas vueltas, Marina nos invitó a cenar y más tarde a su casa para festejar las buenas noticias. También le pidió a su prometido que trajera a Mara y luego volviera con los hombres porque las mujeres haríamos una pijamada, cosa que ninguna sabía, pero lo sospechamos, al menos yo.

—¡Creo que ustedes me robarán a mi mujer!— Exclamó el chef, siendo dramático.

— Hagan reunión de hombres — Le respondió Fátima

— Sí, la haremos en el departamento de Emilio, aunque no está muy feliz — Dijo pensativo

—¿Por qué?— Pregunté

— No sé, tal vez le incomoda que invádamos su espacio personal — Respondió Antonio

— Es porque Lady prometió ir a dormir y no podrá — Dijo Marina riendo

—¡¿QUÉ?!— Preguntó él, sorprendido — ¿Eres la novia de Emilio?

— Sí — Dije tímida

— ¡Ay, Dios mío!— miró al techo — ¿Pascal ya sabe?

— No, ellas son las primeras — Señalé a las mujeres— Y tú, el segundo

— No me siento halagado, fingiré no saber nada. Ustedes deben contárselo. Así como nosotros nos presentamos ante Brandon y pedimos autorización, Emilio debe hacerlo.

—Pero, a mis padres yo no les importo, ni siquiera sé en qué país están ahora — Interrumpí

— Por eso debe hablar con Pascal, él es como tu hermano mayor. — Sugirió Antonio.

— Ok, le diré — Acepté.

— Como si mi chefcito pudiera decir que no — Dijo Bella, riendo

— No me meto en su respuesta, aunque yo diría "Sí"— Aclaró Toño — Bueno, me iré. Soy el encargado de comprar bebidas

— ¡Brandon no tiene permitido emborracharse!— Amenazó Marisol

— Tú tampoco— le dijo Mar a Toño

— Ni Pascal — señaló con su dedo, Bella.

— Imagino que Joaquín, Bastian, Emilio y sus otros hijos, tampoco — Interrumpió Antonio y nosotras reímos

— Puede hacerlo, pero no salgan del departamento— Dijo Amanda

— Ustedes tampoco. — Advirtió él — Siempre que se juntan arman problemas, hacen juegos raros, huyen de la ciudad o del país. — Nos recordó

— Tranquilo, no sucederá— Dije — Mañana todas trabajamos — Aclaré para su seguridad.

—Casi todas —respondió Fátima

Antonio miró a la abuela Fátima y sonrió, se acercó a Marina y se despidió de ella, al igual que lo hizo con su hija y acarició el vientre donde su bebé crece.

Al quedarnos solas, Marina nos mira con una gran sonrisa en su cara, pero no es algo simpático, sino más bien, travieso.

—¿Qué tienes planeado? —Preguntó su madre.

— Esperen aquí y ya sabrán— Sonrió dejando a las mujeres en la sala, mientras ella salía por la puerta principal con Mara.

— ¿Qué será?— Preguntó Ariam

— Nada bueno, seguramente — Dije yo.

Unos minutos más tarde, Marina se sentó con nosotros.

—¿Qué les parece un juego de bebidas?

— No puedes tomar — Le recordé

— Lo sé, yo seré la jueza — Dijo riendo

—¿Gana la más borracha?— Preguntó Ariam

— Algo así.

Preparamos las bebidas en vasos, diferentes licores, sabores y colores, pero todavía no podíamos tomarlos.

El timbre de la puerta principal sonó y Mar fue a abrir, por lo que unos segundos después, llegó con una bolsa de papel.

—¿Qué es eso?— Preguntó Nana.

— Esto, mi querida Felicia — Dijo Mar mirando dentro de la bolsa — Son llamadas "Pruebas de embarazo" — Dijo sacando una caja y mostrándonos

—¿Para qué compraste más? ¡Ya sabes el resultado!— Dijo Amanda

—Sé mi resultado y no puedo tomar, pero ¿Ustedes pueden decir lo mismo? — Indagó dejándome en shock. — Por lo que veo, Lady quedó blanca y significa que no se cuidó. — Dijo riendo— No te preocupes, pocas personas se acuerdan de usar protección cuando deben hacer cochinadas — Bromeó y me ofreció una, la cuál acepté.

Fui la primera en correr al baño, sin quedarme a averiguar que hizo el resto de las mujeres, pero cuando salí, Ariam también estaba por entrar y vi su caja.

—¿Sospechas?— Pregunté nerviosa por el resultado que obtendré

— No. Bastian y yo nos cuidamos en extremo, por ahora no queremos hijos. La haré para tomar tranquila, incluso las mujeres mayores deben hacerlo —Rió

Dejé que ingresara y fui a la sala.

Quince minutos después, todas teníamos las pruebas contra nuestro pecho, pero sin mostrar el resultado.

— ¡Tres, dos, uno! — Contó Mar y todas mostramos.

El mío definitivamente era negativo, así que observé el de las otras mujeres, encontrando uno positivo.

La embarazada es Bella... O sea que mi puesto como madrina debe ser solicitado.

— Soy madrina — Avisé, levantando la mano.

— Sí — Confesó Bella llorando — ¡Seré mamá! — Todas abrazamos a mi cuñada y nos confesó algo — Hemos estado un año y medio esperando por este momento— Dijo sacándose las lágrimas

—¿No podían tener un bebé?— Preguntó Marisol con cariño

— Estaba todo bien con nosotros, solo no sucedía — Aclaró

— La travesura de nuestras pijamadas — Rió Ariam

— El bendito regalo de las bebidas que Mar y Bella no pueden tomar — Bromeó Fátima

— Suegra, no sea borracha, usted solo piensa en alcohol — Bromeó Marisol

— No se puede desperdiciar — excusó la mayor.

— Opino igual — Dijo Nana— El cuerpo ya no aguanta como antes, pero valdrá la pena, ya que tenemos cuatro cosas que festejar; cada bebé de las chicas Belmonte, el casamiento sorpresa y él noviazgo de Lady.

— Y festejamos por la vida — agregó Amanda.

- Por las pijamas que alegran el corazón - Dijo Marina

- Por estar siempre unidas - Agregué

- Por la familia que construimos - Sumó Bella

- Por seguir aumentando- Brindó Ariam.

Casi todas tomamos bebidas, menos Bella y Mar que brindaron con gaseosa.

Agregamos algunos juegos extra y ya un poquito tomadas empezamos con el "Verdad o reto" pero la mayoría pedimos reto para escribirles a nuestras parejas, protegiendo también, algunos secretos íntimos.

Mi reto consistió en decirle a Emilio que quiero una vida con él, solo si todos los días me da duro contra todo... No tuve problemas con eso y sé que el receptor tampoco, aunque no contestó.

Ariam le escribió a Bastian que desea encerrarse en la fotocopiadora. Reto otorgado por Fátima, obviamente.

Marina escribió muy sobria que deseaba un equipo de fútbol con Antonio, cosa que él respondió gustoso.

Marisol le recordó a su esposo las noches de castigo y Amanda le dijo a Joaquín que casaría a uno de sus hijos porque quiere nietos.

Bella fue la última en escribir mensaje, diciéndole que en algunas horas debe comunicarle una noticia.

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