capítulo 11- descubierto...

Xia les cuenta todo lo que vivió en el palacio del príncipe, los abusos de las concubinas y los castigos que recibía, incluso de la emperatriz, también sobre el leve castigo que se le dio a Suyin, cuando en realidad, ameritaba un castigo más fuerte. También el como un grupo de mercenarios la secuestraron y que estos parecen ser soldados de Shanxi que querían usarla para detener a los Yuan, pero les avisa que no la trataron mal y que por el contrario, ellos son de confianza. De igual forma les dice que Yao se quedo con ellos y que mantienen cautivo al príncipe Bao.

— comprendo todo y aunque no apruebo lo de esos hombres, sigo sin creer que hayas llegado sola y derrotado tantos solados del emperador.— expresa Ru.

— soy una Yuan, no creo que eso sea raro.— responde Xia.

— sabes que no me refiero a eso. No creo que el caballo te haya traído hasta aquí por si mismo, ¿quien te trajo? ¿Llegaste con esos hombres de Shanxi?— pregunta Ru.

— no, tuve que dejarlos tan pronto supe sobre los planes del emperador.—

Gao y Ru se miran entre sí, y aunque tengan dudas, lo preocupante es lo que Xia les ha revelado, si en verdad el emperador quiere deshacerse de ellos, no tiene caso seguir luchando.

— seguramente esos hombres llegarán pronto, debemos reunirnos con ellos, evitemos una batalla innecesaria.— menciona Xia.

Gao se queda pensando y menciona que esperaran a que Shi regrese, no pueden moverse sin que este sepa sobre la situación. Mientras tanto, le informan al general de los soldados del emperador, que el gran general castigo a Xia y que no la ha dejado hablar, además de que la enviará mañana de regreso al palacio, con su esposo como debe de ser. Aunque dicho general, no cree que sea verdad, por lo que deben de pensar en una forma de acabar con ellos.

— al menos tendremos la oportunidad de acabar con la familia completa.— menciona el capitán.

— supongo que si, pero a la chica la llevaremos viva ante el emperador, aunque primero quiero divertirme con ella.— sonríe con malicia.

El capitán reclama, pues tenía la misma idea, pero si el general la tendrá primero, no le importaría si se la presta.

Al día siguiente, en el campamento de los soldados de Shanxi, su general Li, informa que el príncipe heredero ha regresado, pero solo. Al salir, era Huo Liu quien baja de su caballo, ordenando que lleven al corcel a descansar y le den agua. Cuando cruza la cortina de la tienda principal, alguien anuncia su llegada.

— el príncipe heredero, Wang Shen a entrado.—

Ante esto anuncio, los generales hacen una reverencia. Huo Liu o mejor dicho, Wang Shen, les hace una seña para que olviden la reverencia, mientras que se quita la máscara y capucha, revelando a un joven de no mas de 20 años, con el cabello largo y ojos claros.


El general Li, le informa que el día anterior hubo un breve enfrentamiento, pero algo sucedió en el campamento enemigo que retiraron sus tropas y según el espía, fue la llegada de una chica lo que causo dicho alboroto.

— el informe dice que es la hija del gran general Yuan...alteza, eso significa...—

— significa que ella fue astuta y escapo, hemos perdido nuestra ventaja...— aprieta el puño.

Estaba enojado, se confío y ella aprovecho eso para huir, ahora, deben encontrar una forma de detener los ataques de Tianwi. Tras hablar un momento con los generales se retiro a descansar, era tarde y seguramente todos estaban cansados, les esperan días muy agotadores y llenos de batallas, pues piensa que el gran general buscará atacar para vengarse por haber secuestrado a su hija. Tras entrar a su tienda, se sobresalta al ver sentada en su cama a una persona usando una capucha, así que saca su espada apuntando a esa persona.

— así que eres el príncipe heredero...sabía que no eras alguien común.— menciona esa persona con una suave voz femenina.

Una voz que Shen conoce perfectamente.

— eres valiente al venir aquí, me hiciste creer que teníamos un trato.— menciona furioso.

— lo tenemos, pero tenía que llegar, escuche a personas esa noche en la posada, planeaban matar a mi familia, tenía que salvarlos.— Xia se quita la capucha.

— debiste decirme, no se si pueda confiar en ti.—

— no me habrías dejado venir, mi familia es más importante que pedir su permiso, alteza.—

—¿que quieres? Si no hablas te corto el cuello, así el gran general tendrá mejores razones para invadir Shanxi.—

En un rápido movimiento, Shen logra derriban a Xia contra el colchón, colocando la espada en su cuello, Xia solo se mantiene quieta.

— te ayudaré a luchar contra Tianwi, esta noche mi padre terminará de darse cuenta de la traición del emperador.— sonríe.

— entonces no te irás hasta que tu padre retiré sus tropas.— retira la espada.

Xia aprovecha para cambiar la posición, derribando a Shen y quedando encima de él y saca una daga de su cintura para apuntar en la mejilla del chico.

— haré algo mejor, los Yuan te ayudaran a ganar esta guerra.— sonríe con malicia.

Xia se aparta al escuchar que alguien se acerca y sale por un agujero que hizo en la tienda. Poco después el general Li se asoma, para dejarle agua y algo de comer. Shen agradece, pero se queda pensativo respecto a lo que Xia dijo.

— general Li, que el espía este atento de los movimientos de Tianwi.—

El general Li, obedece, saliendo para informar su orden.

Esa misma noche, el informante en las tropas de los Yuan, le informa al general de Tianwi, que la hija del gran general, se prepara para salir esa misma noche y que solo dos hombres la acompañaran, el general escucha gustoso esa informa y se prepara.

Una hora después, tres personas van a caballo, eran soldados de los Yuan y una persona que lleva capucha, se mueven a gran velocidad, alejándose del campamento, pero no demoran en verse rodeados de un grupo de hombres, siendo dirigidos por el general de Tianwi.

—¿que significa esto general? A un lado, debemos llevar a la princesa de regreso.— pide uno de los soldados.

— ustedes no irán mas haya. Lo siento princesa, pero debe venir conmigo.— ya sonreía con malicia.

— la princesa debe volver, no interfiera o el gran general sabrá esto.—

— al diablo con el gran general, pronto morirá también y ustedes deberán obedecer al emperador si no quieren morir.—

—¿acaso el emperador esta traicionando al gran general? Los Yuan han sido leales al imperio...—

— que se jodan los Yuan, morirán, se acabo su tiempo para ellos.— grita.

Los otros hombres atacan a los dos soldados y el general se apresura para derribar de una patada a Xia y al caer se baja él del caballo y la sostiene del cuello para jalar el cuerpo hacía el bosque.

— ahora si...mi mayor logro será deshonrar a la hija del gran Yuan.—

Su víctima lo empuja al tenerlo encima, pero el general le golpea la cara y le quita la capucha, pero se cae hacía atrás, al ver que se trata de Ru.

— parece que mi hermana no solo tenía razón sobre su traición, también eres un violador.— Ru le da una patada en la cara.

El general se lleva las manos a su nariz, la cual sangra por el golpe y antes de poder hacer algo, la espada de Ru se clava en su hombro, atravesando esto y causando que no se pueda mover.

— maldito...voy a matarte...—

El general, pronto se ve rodeado de luces, eran los faros de los soldados de los Yuan junto con el gran general y Xia.

— se lo dije padre, ¿es suficiente esto para que se de cuenta que el emperador lo quiere muerto?— pregunta Xia.

El gran general se sentía decepcionado, su familia le ha servido a los emperadores por años, no puede creer que los traicionen de esa manera.

— corten su cabeza y se la envían al emperador.— ordena Gao.

—¿que? N-no, gran Yuan...perdóname...yo solo obedecía órdenes.— suplica.

— claro ¿y entre ellas incluye abusar de mi hermana? — pregunta Ru.— maldito asqueroso.

Ru sin compasión, rebana el cuello del general.

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*****NOTA****

Las lectoras al ver al papá de Xia ayer 👇🏻

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