Capítulo siete- Abordaje

Habían pasado muchas cosas en los últimos días. Los chicos lo besaron (el recuerdo aún hacía a Matthew sentirse abochornado), la mudanza a su nueva habitación y había empezado a salir con Sam…porque estaban saliendo ¿no? Matthew no estaba seguro. Lo único que hicieron fue besarse en el pasillo.

De todas formas las cosas parecían estar en calma, como si el universo se hubiese puesto de su lado y los planetas se hubiesen alineado para complacerlo. Aquella mañana se levantó con el cantar de los pájaros posterior a una noche de sueño reparador. El rocío formaba cristales en la hierba y una apacible brisa mecía la pradera y las ramas de los árboles. Hacía un buen tiempo para salir a caminar. Matthew no podía contener una sonrisa.

Sin embargo, ahora estaba en la cocina pelando papas para el almuerzo. La Sra. Copper se había ido hace un buen rato al mercado a comprar algunas cosas que faltaban y Matthew decidido a ayudar inició su tarea después de desayunar y lavar los platos.

Por otro lado, Louis se estaba comportando bien, no había hecho ninguna broma. Aunque Agradecía eso, últimamente no escuchaba su risa. Matthew se quedó congelado. De hecho no había visto a Louis hablando con Sam (y viceversa). Le preocupaba un poco.

Estaba tan ensimismado que apenas notó que el sujeto de sus pensamientos entraba en la estancia. Louis caminó con pasos lentos y se sentó en el banco frente a él. Ya era media jornada. Pensó que tal vez quería ayudar, pero Louis no lo miraba.

-tú y Sam se han vuelto cercanos- comentó el gemelo después de un rato.

- ¿t-tú crees? - ´´demonios´´ Le había fallado la voz. ´´mejor cállate y no hables´´ se dijo a sí mismo. Enseguida Matthew bajó la vista.

-…sí- dijo Louis aun con la mirada pérdida. ´´ ¿qué está mirando? ´´.

Matthew consideró volver a lo suyo. Así que tomó otra papa sin esperarse que Louis bajara su mano hasta su miembro.

De la conmoción se le cayó el cuchillo y al instante siguiente Matthew abofeteó a Louis.

- ¿Por qué hiciste eso? -reprendió Matthew. Ciertamente\, habían tenido contacto físico antes\, pero este era esperado en ocasiones y nunca había llegado a mayores. De modo que la reciente acción de Louis lo tomó por completo desprevenido.

En seguida el gemelo se llevó la mano a la mejilla rojiza y la sobó dos veces con lentitud. Inmediatamente después Matthew se sintió mal por haberlo golpeado.

-lo siento- se disculpó Matthew. El otro lo miró con ojos impasibles.

- ¿Que lo sientes? -Matthew sintió que el aire se enfriaba y no supo qué decir.

No mucho después Louis le agarró la mano diestra y la acercó a su propio rostro, a la zona donde lo había golpeado. Los dedos le temblaron a Matthew cuando tocó su piel.

-digamos que esto es una compensación- Por primera vez en un par de días y desde que ingresó en la habitación Louis le sonrió.

La cara de Matt empezó a caldearse “¿Cómo fue que terminé tocándole?”, meditó con perplejidad. En ese instante la puerta se abrió por segunda vez.

Matthew retiró su mano. Vio que Sam se detenía en el umbral de la puerta y fruncía el ceño al fijarse en ellos.

- ¿Qué? -inquirió Louis en tono provocador- ¿no puedo tener un momento a solas con Matthew? Tú siempre lo monopolizas -mientras hablaba estrechó al susodicho en sus brazos. “Oh\, hace tiempo que no hacía eso” Los ojos de Matthew se fijaron en los incandescentes de Sam. No necesitaba ser adivino para saber lo que estaba pensando. Presentía que tenía que ver con el hecho de permitir que Louis lo tocara.

La puerta volvió a abrirse por tercera vez en el día y por ella entró la madre de los gemelos.

-Matthew, cariño, puedes dejar eso. Ya continuo yo -dijo la mujer descargando las bolsas de la compra en el mesón- Louis deja de atosigarlo y ayúdame a desempacar esto -Louis hizo un puchero, pero se levantó para hacer lo que le pidieron.

Matthew se lavó las manos y cuando terminó de secárselas Sam lo agarró por la muñeca y lo llevó fuera de la habitación.

Se detuvieron en un corredor lejos de la cocina.

- ¿qué estaban haciendo tú y Louis? -preguntó Sam cuando lo soltó. Matthew tuvo un déjà vu. Tenía la impresión de que aquello sucedió anteriormente: Louis lo condujo por un pasillo y lo empujó dentro de una habitación donde lo besó después de que lo había hecho Sam.

-...él...-empezó Matthew. Recordando lo acontecido hace apenas algunos minutos en la cocina. “No hay forma de que diga eso”. Giró la cabeza -solo estábamos hablando.

- te tocó -adivinó Sam.

- ¿cómo...? -dijo Matthew asombrado.

-tal vez él se dio cuenta de lo que hice la otra vez bajo la mesa –Sam suspiró. Por la cara que puso Matthew seguramente confirmó su sospecha -era eso o te besó- Matthew frunció el ceño.

-Es lo primero entonces -Matthew frunció sus labios siendo atrapado- Pero... Louis no pudo haber visto dónde te toqué... -Sam apoyó las palmas en el muro a su espalda a ambos lados de la cabeza de Matthew, quien concentró su mirada en un punto al costado de Sam. Luego levantó la mirada y observó la cara circunspecta de Sam. Quería que hablara.

“Vamos, solo hazlo - se dio ánimos en su mente- Si lo haces todo acabará más rápido”.

-él...él...tocó...mi...

- ¿mi...? -repitió Sam.

-mi...-Matthew ladeó la cabeza y miró a un lado-mi...entrepierna- al volver la mirada de nuevo se fijó en la expresión atónita de Sam. La revelación pareció sorprenderle mucho. Seguidamente, el gemelo frunció las cejas y clavó sus ojos en él.

- ¿y eso está bien para ti? –Matthew lo miró con la boca abierta. Había un matiz de desaprobación en su voz- si te toco también ¿me lo perdonarías?

No tuvo oportunidad de meditar su propuesta. Sam se acercó más a él. Tanto que Matthew percibió el calor de su cuerpo.

-...Sam- Matthew se apretó contra la pared- espera...- sintió el aliento de Sam en su cuello y poco después la mano ajena en su abdomen descendiendo hasta su cadera. Terminando de deslizarse bajo su ropa interior.

Matthew se quedó pasmado en el lugar. Un estremecimiento le puso la piel de gallina. Entonces sintió que le escocían los ojos antes de que las lágrimas cayeran por sus mejillas.

-Matthew...-al darse cuenta Sam apartó enseguida su mano con expresión conmocionada-perdón...yo... -Matthew se llevó una mano a la cara y se alejó a paso ligero.

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