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-quiero ir. -le exclama Lilith a Jonathan, quien le prohíbe ir con ellos a lo profundo del bosque.

-no. -le responde tratando de ser paciente con ella. -el bosque es peligroso.

-no es justo. -le agarra por el brazo. -yo quiero verlos en persona. De que me sirve el que me traigas uno medio muerto.

-la señorita tiene razón. -dice Einar dándole la razón a Lilith. -además, le puedo asignar algunos de los mejores guerreros para que la mantengan segura.

-le agradezco su ayuda. Pero…

-deja de tratarme como una niña. -lo interrumpe con enfado. -no tienes por qué preocuparte por mí. Sé cuidarme sola.

-lo dice la niña que casi es asesinada. -le responde fríamente.

-y eso que tiene que ver. -le suelta. -no eres nadie para decirme lo que puedo o no hacer. -le mira con enojo.

-creo que deberías parar. -dice Adrián entrando a la sala de invitados. -amigo, podemos hablar un momento. -Llevándose casi a rastras al lobo, salen de la habitación. -no deberías ser tan sobre protector con la niña.

-de qué rayos hablas. -le quita la mano de su hombro.

-tú sabes muy bien de lo que hablo. -suspira. -sé que tienes un interés personal por la niña. Pero no crees que te estas pasando un poco.

Jonathan no dice nada al respecto, sintiéndose frustrado por la forma infantil en que Lilith actuaba, incapaz de hacerla cambiar de opinión.

-y que exactamente quieres que haga. -se recuesta a la pared.

-¡Vaya! Nunca creí verte de esa forma por alguien. -se masajea el cuello. -si realmente quieres que te tenga confianza, no crees que lo mejor es demostrar que le tienes confianza a ella primero. No simplemente esperes que ella haga lo que tú le digas. Porque lo único que lograrás es que termine odiándote.

...****************...

Mientras Adrián le daba consejos a su amigo, en la sala de invitado, Lilith hablaba con el Einar.

-entiendo tu molestia. -le dice él. -pero debes entender que el joven lobo se preocupa por tu bienestar.

-lo sé. -le responde con los brazos cruzados. -sin embargo, no me agrada que me traten de decir lo que puedo o no hacer.

-puedo notar que eres una joven guerrera. -le mira fijamente. -aunque no lo demuestres a simple vista.

-no me gusta pelear innecesariamente. -le responde seriamente.

-comprendo. Hay guerreros que se dejan llevar por sus emociones y fuerza. Pero hay otros que son más astutos como el zorro, piensan antes de actuar y siempre tiene miles de planes en su cabeza, para todas circunstancias. Sin embargo, tú no pareces ser ninguna de las dos. Más bien, te ves como alguien que le gusta ir a su manera, de forma libre y en constante cambio.

-se puede decir que sí. -le sonríe dulcemente. -ya que puede ser más divertido cuando las cosas se vuelven impredecible. -cambia su semblante a uno más serio. -Algo que sus amigos los troles han estado haciendo, por la forma como los describió.

Einar se queda en silencio por un momento antes de decir: -crees que alguien lo esté manipulando.

-es muy posible. -Suspira. -por eso quiero verlos personalmente.

-sí es así. No hay de otra. -le dice Jonathan entrando a la habitación.

-lo dices en serio. -le responde alegremente. Sorprendiéndose a ella misma. -qué bueno que te diste cuenta.

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