Viaje

Raquel nunca se imaginaba que viajar en el carruaje fuera agotador y largo han tenido que detenerse varias veces, ahora ella tiene 4 meses de embarazo y su vientre se ve ligeramente abultado, están en un hotel en la capital de Altair.

-Mi señora, debe descansar no podemos seguir así en hoteles debe tener un embarazo tranquilo.

-Si, pero quiero que nazca en Dark, descansaremos un mes aquí en lo que realizó movimientos en el banco, Fabián fue a buscar una casa para estar más cómodos, no ha de tardar

-Mi señora que pasará cuando el duque la busque

-😈 le dejé un recado en mi pequeña casa.

Raquel había descubierto al espía del duque, así que lo llevo al bosque donde le pregunto si era verdad que él había matado a Ernesto, el espía confirmo sus sospechas, por obvias razones no podía dejarlo vivo. Pero dejo una carta al encargado de la casa, incluso en la capital se entrevistó con la prometida del duque.

La señorita estaba confundida con la visita de Raquel, hablaron un rato donde Raquel le hizo ver qué debí tomar cartas en el asunto si no quería que su compromiso se rompiera.

La joven rubia solo se portó altanera con ella, presumía como se lo había quitado, Raquel se dio cuenta de que lo había planeado todo, pero con una sonrisa se despidió, diciéndole que los dos eran tal para cual y que le deseaba un infeliz matrimonio.

-Señora y si el la busca.

-Le costará trabajo, no hay registro de mi salida, el banco no puede decirle de mis movimientos, solo un socio de mi padre me ayudó a triplicar mi fortuna, pero el duque no sabe de él.

Y si Raquel tenía razón el Duque llegaba a la pequeña casa tenía casi dos meses que no recibía información, su trabajo era bastante, hasta ahora pudo salir del ducado para ir a la capital y terminar con su compromiso.

Al bajar de su caballo puede notar que no hay nadie, solo un señor riega las flores.

-Señor no está la doctora

-Duque buen día, no, ella viajó a la capital, pero le dejo esta carta, me dijo que se la diera cuando usted viniera.

El tomo la carta para leerla

***Duque espero que al leer esta carta yo esté a muchos kilómetros de ti, sabes yo jamás te hice daño, al contrario pensé que al alejarme te daba la oportunidad de ser feliz, jamás imaginé que tu desgarrarías mi alma como lo has hecho.

Que sentiste, que sentiste al soltar su mano y clavar tu daga contra él, no eres más que un cobarde, tus padres estarían decepcionados de ti, así como lo estoy yo, siempre creí que serías un honorable duque, pero creo que me equivoqué, no eres más que un idiota.

Jamás me busques, nunca podré perdonarte, no solo lo mataste a él, mataste el respeto que te tenía, ahora solo me queda el odio que hay en mi corazón, si algún día te presentas ante mí terminarás como tú espía, con una daga en la garganta, te dejo la ubicación de su cuerpo.

Martin espero que tu vida sea tan infeliz, que jamás tengas paz, no seré hipócrita diciendo que te perdono, por qué jamás lo haré ***

El duque no sabía que hacer, no creía que ella no estaba así que entró a la casa y vio que no había nada, se apresuró a ir a la capital, ella debe estar en algún lugar ahí, debe encontrarla y tratar de explicar todo, no puede perderla.

En su camino solo piensa en que realmente se equivocó pero los celos lo cegaron, su actitud termino con la vida de una persona pero ya no hay nada que hacer, debe encontrar a Raquel para implorar su perdón, al llegar a la capital solo ordena que la busquen en todos lados, el fue a dar su informe al palacio y pidió reunirse con el padre de su prometida.

El padre de ella estaba feliz porque pensaba que ahora que el conflicto está solucionado el duque se casara con su hija, pero sus ilusiones se apagan en cuanto él le presenta el documento para anular el compromiso.

-Pero Duque mi hija será la burla de la sociedad, no puede usted cancelar el compromiso.

-Lo siento, pero a ella no la amo y no creo poder hacerlo, mi amor es de otra persona la buscaré y me casaré con ella

El padre de su prometida no podía creer lo que el duque decía, si el compromiso se rompe, algunos socios que a ganado gracias al compromiso se irán, no puede permitir eso.

Pero recibe un rotundo no, así que el duque se despide y sale de su casa, en la puerta estaba aquella joven rubia.

-Duque, por fin viniste, has fijado la fecha de la boda.

-No, de hecho nuestro compromiso será cancelado.

-Pero que, no puede ser yo te amo, siempre lo he hecho desde antes, te amo más que ella

-Te creí cuando dijiste que Raquel te molestaba, la acuse pensando lo peor de ella, cuando era inocente, todo eso provoco esto, no me gustas y no quiero casarme contigo, si estamos comprometidos es por la presión social, pero no estoy dispuesto a hacerlo.

-Por favor viene el baile en el palacio, es en una semana pensaba ir contigo, solo está vez que sea la última vez, como amigos.

-Bien, pero el compromiso está roto, tu padre tiene los documentos.

-Bien, está bien.

La joven rubia entra a casa y va directo al despacho de su padre, quien está molesto y al verla solo le grita.

-Tantos años planeando esto y tú no has podido hacer que se fije en ti.

-Padre en el baile haré mi jugada, no pienso dejarlo ir, tengo el plan perfecto, solo confía en mí, tu hija será la duquesa.

-Está bien confío en ti, ella dónde está.

-Lejos no se a donde fue, solo me dijo que esto pasaría y que debería ser astuta para no perder el compromiso.

-Porque lo hizo, que buscaba a cambio.

-Solo me pidió que cuando yo fuera la duquesa bloqueara cualquier intento de búsqueda contra ella y así lo haré no dejaré que la encuentre.

Toda la semana el duque busco a Raquel, pero no encontró nada en ningún hotel, posada o casa de huéspedes, ahora amando a checar casas pequeñas que sean rentadas por dos mujeres, mando a pedir los informes de las fronteras para saber si ella había salido del reino.

Solo que no contaba que Raquel no usaba su título de baronesa, los plebeyos solo tienen un documento sencillo y al salir del reino solo dicen su nombre y ponen sus características físicas.

-Maldita sea y si dio otro nombre, búscala con sus características, dos mujeres una de cabello negro y la otra rubia, Raquel no pasa desapercibida, busquen y no paren hasta encontrarla.

Para el día del baile el duque no fue por su prometida solo la espero en el castillo él estaba hablando con el Emperador cuando ella llegó, ella fue hacia él, saludo amablemente a los emperadores.

-Duque su prometida es muy bonita, espero que su boda sea pronto.

-Gracias majestad, nos retiramos.

-Si disfruten la velada.

El duque no estaba feliz con lo que dijo el emperador, eso solo significa que el padre de ella no ha firmado los documentos.

-Martin podemos bailar, solo por esta noche quiero que te comportes como mi prometido.

-Bien, pero será la última vez.

Los invitados solo veían que ambos se llevaban bien, así que los felicitan por su compromiso y también les preguntan cuando será la boda, pregunta que evade, pero ella solo dice que será pronto

-Cálmate Martin ellos entenderán cuando sepan del rompimiento, ten toma una copa de vino.

-Gracias, creo que es hora que te retires, yo estoy en el palacio de invitados.

-Si, solo terminamos nuestra copa y nos vamos, podemos ver los fuegos artificiales y nos despedimos.

Al salir al jardín, muchos nobles están para ver los fuegos artificiales, así que la joven tiene testigos de que están juntos, con el paso de unos minutos Martin se empieza a sentir mareado y con mucho calor, se despide de ella, pero ella no suelta su brazo, él al no poder estar de pie se tambalea y ella lo ayuda para llevarlo al palacio de invitados, varias sirvientas los ven pasar, ellas no deben intervenir en los asuntos de los nobles.

-Que me diste...

-Nada, tal vez estás enfermo déjame ayudarte, cuál es tu habitación.

-No vete, no debes estar aquí.

-No te dejaré, siempre estaremos juntos, yo te amo, seré tu esposa y madre de tus hijos.

Ella lo besaba y él por más que se resistiera el afrodisíaco hizo lo suyo, termino teniendo relaciones con ella, al día siguiente él estaba enojado, pero poco pudo hacer, había testigos por todo el palacio, así como en las sábanas del cuarto, en el baño él se maldecía había caído en una trampa más que obvia, todos en el castillo ya sabían lo que había pasado, pero no sé les hacía extraño ellos eran prometidos, ahora solo se adelantara la boda.

-Martin no estés enojado lo disfrutaste

-Cállate pide tu té, no quiero tener hijos.

-Pero yo si, no tomaré nada y tú actuaras como el mejor marido, si no quieres que se enteren de que has matado a un caballero para quedarte con su mujer 🤣🤣

-Que, como es...

-Como lo sé, tu querida Raquel me lo dijo, no hay pruebas, pero cuando todos sepan que ella tenía una relación con aquel caballero la duda siempre estará ahí, así que nos casaremos yo seré la duquesa y tú serás mío, como siempre lo quise, ella se fue y jamás la volverás a ver, también me dio la idea de esto, ha y si quieres hacer alguna prueba puedes hacerlo, ella me dio el medicamento y no deja rastros, ella fue la que lo planeo.

-No puede ser.

-Ella es doctora sabe de medicamentos, aún lo dudas, bueno pediré ropa porque rompiste la mía, podemos repetirlo cuando quieras, no necesitas amarme para tenerme en tu cama, eres muy apasionado, lo disfruté 😏

El destino del duque había quedado sellado, ahora tendría que casarse con ella, una mujer a quien no ama, está noche es lo peor que le ha pasado, no sabe que hacer, Raquel planeo esto, a eso se refería con desearle una vida infeliz y tal vez se lo merezca, será su castigo por el pecado que cometió, de ser posible quisiera regresar el tiempo y no hacer lo que hizo, ahora no sabe dónde está ella.

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