Tarde Lo Entendí.
Mi nombre es Dianna Bernard, tengo veintitrés años, soy de piel clara, ojos color verdes, tengo el cabello castaño, y mido un metro sesenta y siete. Todavía recuerdo aquella vez que lo vi por primera vez, solo tenía dieciséis años lo amé inmediatamente, él era un joven alto, guapo, con un buen físico y esos ojos color azules que me mataban, una sonrisa preciosa y su cabello castaño, para mí era el hombre más guapo del mundo, yo era la mejor amiga de su cuñada Andrea Vasco la novia de su hermano ella tiene mi edad, siempre nos reíamos y suspirábamos viendo a los hermanos Morelli, eran muy guapos.
El tiempo fue pasando y él siempre me ignoró, era novio de una chica frívola y prepotente, Viviana Morales nunca me calló bien ni tampoco a mi amiga, al cumplir 17 años, unos meses después ese hombre de mis sueños, Edgar Morelli se acercó a mí y me empezó a cortejar así fue que empezó mi historia de amor, todo fue maravilloso nos casamos cuando cumplí los dieciocho.
Mi vida era genial estudiaba para ser la mejor diseñadora de todas durante dos años todo fue maravilloso hasta que un día Edgar empezó a comportarse extraño no me tocaba, no me daba la cara, rechazaba mis besos no sabía lo que sucedía me arreglaba para él y me llamaba ridícula, era una pesadilla hasta que casi un año después de que él se comportara así lo descubrí el día de mi graduación con su exnovia y al enfrentarlo me dijo que por mi culpa su vida era un infierno, que yo era la culpable de haber perdido al amor de su vida desde ese entonces todo empeoro.
Sus gritos y ofensas iban en aumento, se burlaba de como me vestía, decía que le daba asco tocarme, era horrible la idea de tenerme cerca y siempre me decía que se divorciaría de mí al cumplir los cinco años de matrimonio todo el tiempo me esforzaba por agradarle le pedía que la dejara, pero eso hacía que se molestará y me empujaba nunca me quiso decir que le hice.
Yo solo lloraba y quería que él me volviera a querer, pero todo fue en vano, él se la pasaba con ella a todas partes y ni vivía conmigo, venía de vez en cuando yo cada vez me sentía más sola, él decía que le daba vergüenza que él prefería que lo vieran con Viana y no conmigo, que cada vez que tuvimos sexo por qué solo fue eso nunca lo satisfacía dijo que pensaba en ella, eso me mataba.
Yo seguía intentando día con día en recuperarlo, que volviera a ser el mismo de antes, muchas me tildaran de idiota que no me valoro, pero las que han pasado por este proceso saben que a pesar de que todo esté mal y caótico, siempre nos aferramos al que esa persona cambiará por nosotros, a que vale la pena seguir luchando, es fácil decir vete, pero es difícil tomar la decisión cuando se vive el problema, muchas mujeres juzgan y todas alguna vez han sido yo aunque eso no lo reconocerán nunca.
Día con día quería entregarlo todo de mí, al terminar la universidad me entregué a la casa no salía dejé de visitar a mis conocidos porque me lo prohibió solo estaba en casa, yo aprovechaba para dibujar y crear diseños, los años pasaban y él no me tocaba solo salíamos cuando había una comida con sus padres o cuando estos se quedaban en casa, ellos me quería mucho, pero él no, yo soy huérfana mi tía me crio como a una hija, pero ella falleció tiempo después de que me casé, estoy prácticamente sola eso es lo que más me aterra, que haré cuando me divorcie, no sé qué hacer estoy muy triste.
— hola señora Diana, el señor llegó hace rato y le voy a llevar su comida— dijo Dulce, la empleada de confianza, trabaja desde hace muchos años para Edgar.
— Oh, gracias, Dulce, pero yo se la puedo llevar si quieres.— dije y le lleve la comida a mi esposo
— toc, toc — toque la puerta y me dijo que pasara.
— hola mi amor, te traje tu cena.— Dije y se la puse en su escritorio.
— dónde carajo está dulce por qué tienes que traerme tu la comida, ya la contaminaste y ahora está tan simple, desabrida y asquerosa como tú, dijo al Momento de aventarla al suelo — Dijo Edgar muy enfadado, yo me sobresalte y el paso por mi lado gritando y llamando a la empleada.
Recogí todo y me encerré en mi habitación, ah por cierto hace mucho que dormimos en cuartos separados, esto es un verdadero infierno, ya no falta mucho para que se cumpla el plazo, pero él se quiere divorciar de mí, yo lo amo y debo aceptar que él sea feliz, pero antes tengo que jugarme hasta mi última carta para poder salvar mi matrimonio fuimos muy felices y sé que lo volveremos a ser.
Una noche llegó muy tarde, tenía días haciéndolo, se le veía triste, entonces me le acerque.
— Mi amor dime qué te pasa mi vida, por qué estás así, mírate estabas tomando de nuevo.— dije mientras lo ayudaba a entrar, estaba tomado.
— hay, pero miren quién está aquí mi amada y desabrida esposa, pero como estoy tomado te veo ardiente, decía mientras me besaba.— me deje llevar un momento por el beso, deseaba sentirlos desde hace mucho.
— mi amor estás muy tomado, déjame te llevo a tu habitación.— dije separándome de sus labios y llevándolo a su habitación.
Lo dejé en su cama y le quité el saco y los zapatos, luego di media vuelta y me fui, pero al llegar a la puerta el hombre que tanto amaba me abrazo y me giro para luego besarme, yo me dejé llevar savia que estaba mal, sabía que era por el alcohol, pero deseaba tanto volver a sentir su piel que me deje llevar.
— mi amor, bésame, quiero que sea mía esta noche.— me lance a sus brazos y lo besaba, él empezó a besar mi cuello y luego mis pechos, parecía haber devuelto el tiempo atrás hasta hace unos años, cuando la pasión era el protagonista de nuestra vida, entro en mí y cada embestida me hacía gritar y gemir se lo deseaba, lo ama.
—Oh, mi amor, oh, Edgar, te amo.— lo repetía una y otra vez.
— oh mi amor, oh mi reina.— decía él entre jadeos me sentía en lo más alto del cielo hasta que llegamos juntos al clímax y caí rendida en su pecho.
— te amo mi amor— le dije.
— te amo Viviana, me dijo él.— inmediatamente lo empujé y me levanté, él me miró confundido y se dio cuenta de que era yo.
— esto fue un error.— fue todo lo que dijo y yo me retire a mi habitación envuelta en la sábana ni mi ropa me llevé, quería salir lo más rápido posible de ese lugar.
Llore tanto esa noche que no podía más, ni cuenta me di cuando el nuevo día llegó.
Diana Bernard.
Edgar Morelli.
Andrea Vasco. (Amiga y cuñada de Edgar)
Eduardo Morelli (hermano de Edgar)
Viviana novia de Edgar.
***¡Descarga NovelToon para disfrutar de una mejor experiencia de lectura!***
Updated 29 Episodes
Comments
lolipop
muy real... es lo que me pasa a mí 😭 aunque ya me di cuenta que mí amor no es suficiente. el jamás va a cambiar y solo me lastimó yo en esta relación que ya no va hacer muchos años
2024-11-15
0
Katiuska Rivas
𝕟𝕠 𝕥𝕚𝕖𝕟𝕖 𝕕𝕚𝕘𝕟𝕚𝕕𝕒𝕕 𝕢𝕦𝕖 𝕕𝕖𝕤𝕡𝕚𝕖𝕣𝕥𝕖 𝕕𝕖𝕛𝕒 𝕝𝕠 𝕓𝕠𝕓𝕒 𝕖𝕝 𝕟𝕠 𝕧𝕒 𝕒 𝕔𝕒𝕞𝕓𝕚𝕒𝕣 𝕕𝕚𝕧𝕠𝕣𝕔𝕚𝕒𝕥𝕖 𝕒𝕟𝕥𝕖𝕤 𝕤𝕒𝕓𝕣á 𝕕𝕚𝕠𝕤 𝕢𝕦𝕖 𝕖𝕤𝕥𝕒 𝕥𝕣𝕒𝕞𝕒𝕟𝕕𝕠 𝕢𝕦𝕖 𝕥𝕚𝕖𝕟𝕖 𝕢𝕦𝕖 𝕖𝕤𝕡𝕖𝕣𝕒𝕣 𝕝𝕠𝕤 5 𝕒ñ𝕠𝕤 𝕡𝕒𝕣𝕒 𝕖𝕝 𝕕𝕚𝕧𝕠𝕣𝕔𝕚𝕠 𝕡𝕠𝕟𝕥𝕖 𝕝𝕒𝕤 𝕡𝕚𝕝𝕒𝕤
2024-10-25
1
Paola Ferradás
sabía
2024-10-25
0