Capítulo 3. Estoy muerta.

En una especie de tolvanera salí, estoy aterrada saliendo del polvo, si, mucho polvo, ¿que es esto?, toso, sacudo mi cuerpo, mi cabello, estoy hecha un desastre.

Estoy de pie sobre un montón de arena, es como si hubiese renacido de los cimientos de la tierra, estoy enojada muy enojada, puedo ver que hay varios hombres con ropa de trabajo, casco e implementos de construcción, grito: ¿qué sucede aquí?.

Nadie me escucha, peor aún nadie me ve...

Estoy pensando sorprendida.

No puede ser, estoy muerta y grito: Estoy muertaaaaaaaaaaaaaa.

Tengo tanta rabia, estoy furiosa, gritando sobre el montón de arena doy vuelta y vueltas llorando y gritando hasta hacer un pequeño remolino de arena que se movía rápidamente y daba contra la humanidad de los trabajadores.

Escucho que gritan, preguntándose ¿Qué sucede? Mientras corren a guarecerse, uno dijo es una tolvanera hizo un pequeño remolino en la arena.

Estoy en Medio del patio de una casa, no sé donde estoy realmente, aturdida, me siento derrotada y peor aún muerta, si muerta.

Estoy muerta, me siento y sigo llorando, ahora me muevo, puedo moverme, veo mi cuerpo, está intacto, con mi ropa que tenía puesta,asi dudo, ¿cuándo?, me pregunto¿cuándo tenía esta ropa?.

Además, no puedo tener mucho tiempo mi cuerpo está intacto, lo veo intacto, no tengo, sangre, trozos de carne goteándole nada, reviso mis manos, mis pies, estoy descalza, y mis zapatos donde están, hay piedras, como caminaré.

Continuó en este trance, es una especie de pesadilla, claro eso es. me digo estoy soñando, intento pellizcarme y nada.

¿Cómo despiertas de una pesadilla?

E intentado de todas las formas posibles y no he podido despertar, sigo aquí viendo a los hombres, trabajar, hablan de trabajos, lo que van a hacer, chismea de la mujer de uno de ellos, que lo está engañando, los veo sentándose sobre unos bloques a comer, están almorzando.

Continuo aquí pegada sobre una pared, observando lo que ocurre a mi alrededor, a ciencia cierta no sé que hacer, más que seguir llorando ya han pasado horas, los hombres recogen los implementos, se disponen a cerrar una especie de portón trasero, no me he movido, estoy descalza, temo lastimarme los pies.

Así llegó la noche, sola en aquella especie de solar, si un patio trasero de una casa, voy poco a poco intentando llegar al interior pisando con cuidado de no lastimar mis pies, he tardado mucho tiempo, puedo ver la oscuridad de la noche, las estrellas sobre un cielo muy oscuro, escucho voces de personas que pasan por la calle, por fin he llegado al interior de la casa, la cual es inmensa, son muchas habitaciones, está en construcción, los pisos son rústico, ya tiene techo bien alto con puertas y solo protectores en hierro las ventanas, entro a una habitación parece ser la alcoba principal, tiene un baño y el clóset, no puedo moverme, me siento rota, olvidada abandonada pero sobre todo muy muerta.

No sé cuántos días han pasado, pero permanezco en esta habitación, siempre está a oscura, ahora han colocado una puerta, dentro han ido colocando mucho material, parecen cajas de cerámica o algo así veo un juego de baño, tubería, lámparas, muchas cosas más, he querido salir de aquí, sin embargo, temo lastimar mis pies o encontrarme con alguien, solo sé que no pueden verme o eso es lo que dicen de los fantasmas.

Las ventanas de esta habitación no dan hacia la calle, estás mas bien dan a una especie de patio central como un saguan que por alguna razón me parece conocido, de pronto me ha parecido que conozco este sitio, quizás en algún momento estuve aquí, pero es el olor a playa, a costa, a caribe, si, estoy en la Vela de Coro, en Venezuela, ahora es doble la confusión cuando morí en Venezuela, si estaba en España.

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