Un mes

Linda

Ya ha pasado un mes desde mi supuesta muerte, como los rescatistas no pudieron encontrar un cuerpo, me dieron por muerta oficialmente y Amanda se apoderó de todo lo mío, voy a disfrutar tanto el día de mañana cuando en la Junta de accionistas mensual, me les aparezca. He estado viendo los movimientos bancarios que ha estado realizando y si sigue así, en menos de un año, hasta yo seré una pordiocera. La muy sinvergüenza compró un Penthouse, cosa que nos llamó la atención a mi padrino y a mí, por lo tanto decidimos contratar a un investigador privado para descubrir la naturaleza de tan grande gasto y ¡Voilà! Mi abnegada madre al parecer hace años, mucho antes de morir mi padre, tiene un amante 10 años más joven que ella, y ella me tuvo cuando tenía 27 años, mi padre murió hace 6 años víctima de infarto, cosa que estoy empezando a dudar, porque sí ella fue capaz de empujarme por ese acantilado, ahora sé que es capaz de matar a cualquiera que según ella, le estorbe.

¡Dios mío ¿qué clase de psicópata tengo por madre?!,

Por otra parte, Articus y Zei se han adaptado bien al lugar donde estamos viviendo, sobretodo porque él mar es nuestro patio trasero y la casa más cercana está a por lo menos un par de kilómetros de aquí, así que tenemos bastante privacidad.

A veces me baño en la playa mientras ellos dan sus extensas salidas a profundidad, una de esas vueltas, el precioso tritón me trajo una bella cadenita con un camafeo, la joya me encantó y desde entonces es la única que uso pues quiero que sepa que es importante para mí.

No he extrañado para nada la presencia de Fabián, cosa que me alegra pues antes parecía no poder ni siquiera respirar si no lo veía siquiera un momento. Pero ya no es así, verlo y oírlo burlarse de mi como lo hizo en el club, logro arrancar la venda que tenía en los ojos. Muchos dirán que cómo voy a extrañarlo si Articus tiene ahora mi atención.

Pues no es así, el tritón es un ser precioso, diría que hasta perfecto, sin embargo, no lo creo interesado en mí de manera romántica, pienso que más bien está agradecido por mi hospitalidad, aunque yo si que estoy empezando a experimentar sentimientos que ni con Fabián sentí y eso me asusta porque sé que él se irá en algún momento y no lo veré más, aunque el solo hecho de pensarlo me constriñe el corazón.

- Me gustaría saber qué piensa la dueña de esos hermosos ojos - me dice Articus muy cerca del oído, tanto que siento su aliento en mi nuca.

- ¿En qué momento llegaste? - me sorprendí porque de verdad ni siquiera me percaté de su presencia.

- Estabas tan metida en tus pensamientos, aunque te veías tan hermosa que me recordaste a una mujer de piedra que vi hace años cuando pasamos por la gran isla que llaman Australia.

Sus palabras me hacen sonrojar pues él siempre me da cumplidos, pero solo son eso, nunca ha intentado nada más y yo queriendo probar esos labios tan provocativos.

- Es que... estoy preocupada por la Junta de mañana, mi madre enloquecerá porque creyó haberse deshecho de mí.

- Tu padrino y yo estaremos contigo, no permitiré que ningún humano se acerque a ti, eres muy especial para Zei y para mí.

¡Para Zei y para mí! No para ¡Mí!

Al final creo que voy a morir sola y cuidando gatos, tendré que ir al refugio de animales y adoptar a varios.

Ya por la noche mi padrino vino a nuestra casa para enseñarme los soportes de los despilfarros de Amanda, junto a mis 2 testamentos y la invalidez que tiene mi madre ante el uso de mis recursos. Ella simplemente hizo uso de mi dinero y vienes ilegalmente, con eso la puedo enviar a prisión, pero la calle es lo que más la aterra y es justo lo que obtendrá. Mi antigua yo hubiera querido que ella se arrepintiera y me dijera que me ama, ahora soy consciente de que jamás sintió por mí, el más mínimo aprecio, tanto así, que quiso asesinarme, que gracias a Dios aparecieron estos dos seres para salvarme.

A la mañana siguiente me puse mi mejor atuendo para presentarme en mi compañía, sé que Fabián estará allí por ser socio y quiero que se dé cuenta de lo que perdió por estúpido y prejuicioso.

Al bajar las escaleras ya mi padrino y Articus me están esperando, y definitivamente a ese hombre le queda hermoso todo, lleva una camisa negra y su rubio cabello suelto. Mi corazón se acelera por su mirada tan fija, es como si hiciera que todo a mi alrededor desapareciera y solo existiéramos él y yo.

- Estás demasiado hermosa, te pareces a Afrodita - me dice, juro que mis piernas me van a traicionar.

- Tú también estás muy guapo - apenas logré decir.

- Muy lindos todos, pero necesitamos irnos - dice mi padrino con tono divertido.

Salimos de la casa y nos subimos a la camioneta en la que iremos a la compañía Umbrella Color, la cual es número uno en todo lo referente a moda y producción de publicidad a gran escala.

Llegamos por fin al edificio y veo cómo Articus observa todo maravillado, aunque creo que él ha visto cosas más impresionantes, quizás hasta la Atlántida habrá visto. Todos parecen haber visto un fantasma, y cómo no, prácticamente es lo que soy, debido a que se me reporto como desaparecida y posterior, muerta.

Repitiera mil veces las caras de sorpresa de todos. cuando hice mi magistral aparición en la sala de juntas.

- Buen día, espero que aún no hayan dado inicio sin mí.

El rostro de mi madre palideció de manera catastral.

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