capítulo 3- pesadilla...

En la habitación de Mariam, ella estaba ya calmada, pero al anochecer, ella comienza a soñar con lo sucedido, viendo nuevamente la escena de la doncella colgada, pero esta vez, ella abre los ojos.

"Tú eres la siguiente." Le dice la doncella y comienza reír mientras su rostro parece derretirse.

Mariam despierta gritando desesperada, claro que de inmediato la marquesa entra a su habitación para consolarla. Mientras que en el balcón de la habitación, Charlotte se esconde y muestra una sonrisa al observa sus manos de las cuales se forman una especie de neblina negra.

— la magia es increíble...—

******

Al día siguiente, Charlotte ha bajado a la cocina, donde le pide a las cocinera algo para desayunar, pero estas solo le dejan un huevo frito y pan duro, Charlotte ante esto, lanza el plato contra una de las cocineras, llamando así la atención de todos.

— esperen a que le diga esto a mi abuelita, ella hará que el Marqués los eche.—

Las cocineras se miran entre si y ríen.

— nadie le cree a una niña mentirosa, todos sabemos que el Marqués te castigo por mentir sobre el joven amo.—

— ¿mentir?, que asquerosas al apoyar a ese enfermo.— menciona.

Charlotte decide servirse algo, pero le detienen, una doncella le agarra la mano con fuerza para arrastrarla fuera de la cocina.

— mocosa malcriada, ahora veremos que te hace la señora.—

— si no me sueltas acabaras peor que Doroti...—

La escuchar esto, la doncella se detiene, mirando a Charlotte de manera intrigada.

—¿que cosas dices? No eres más que una mentirosa, respeta la memoria de Doroti.—

La doncella intenta tirar de Charlotte, pero siente un escalofrío recorrer su cuerpo, mientras ve una neblina negra envolver su cuerpo, ante esto, sale corriendo dejando ahí a Charlotte, la cual deja que esa neblina cubra toda la cocina y mientras las cocineras quedan asustadas y confundidas, Charlotte aprovecha para tomar la suficiente comida, necesita alimentar bien ese cuerpo, para tener un condición como la tuvo en su vida anterior.

Por otro lado, el doctor había llegado a la mansión para revisar a Mariam, la marquesa le explica que su hija ha estado teniendo pesadillas recurrentes desde que vio a esa doncella quitarse la vida, pero lo único que puede hacer ese médico es darle medicina para pueda dormirse, pero no garantiza que las pesadillas desaparezcan.

— no madre, no quiero dormir...si duermo viene por mí...— Mariam estaba abrazada a su piernas en un rincón de su cama.

— pero si no duermes te pondrás muy horrible, tus ojeras te hacen parecer una anciana.— le dice la marquesa.

— señora...—

El médico le pide salir, ahí le dice que durante la cena le pude poner dos gotas del medicamento a su comida, para que así la niña pueda dormir bien. Pero si la misma pesadilla es recurrente, lo indicado sería llamar un mago, pues podría ser alguna clase de hechizo.

La marquesa no podía creer que su hija fuese a tener algún tipo de hechizo, pero cuando el médico se va, busca al mensajero para pedir al palacio que envíen un mago de la corte.

— si es verdad que fue un hechizo, debemos encontrar a quien lo hizo o la siguiente podría ser yo.— expresa la marquesa.

— ¡o yo! Mamá tienes que pedir un amuleto, ahí fuera hay quienes nos envidian, seguramente fue alguno de ellos.— menciona Rogelia.

La marquesa se queda pensando y se le ocurre quien podría ser, tal vez fue una de las dos concubinas del Marqués, después de todo, si ella pierde a sus hijos, podría perder su posición, por su suerte su hijo estaba en la academia, a él, nadie le puede hacer daño, es el futuro heredero del Marqués y debe asegurarse de que Mariam se recuperé, pronto habrá un baile en el palacio y quiere que su hija sea la más hermosa para captar la atención del príncipe, el cual tiene la misma edad.

La doncella de hace un momento y las cocineras, buscan a la marquesa para hacerle saber que Charlotte entro a la cocina y robo comida.

— como si no fuese suficiente, la bastarda me causa más problemas.—

La mujer va en compañía de las mujeres hasta la habitación de Charlotte, al entrar la ve sentada en su cama, ella al ver a la marquesa se pone de pie y saluda.

— ya me han dicho que robaste comida, sabes que no tienes permitido tomar nada.—

— lo se marquesa, yo no he salido de la habitación en todo el día.—

— miente, madam, ella se robo carne.—

La marquesa ordena que busquen en la habitación, pero no había nada, así que las doncellas son las que han quedado como mentirosas.

— no tengo tiempo de lidiar con esto. Escúchame bien bastarda, deja de causarme problemas.—

La mujer no dudo en pegarle una cachetada a la pequeña y ordeno que la cierren con llave la habitación, las doncellas se burla y no dudan en cumplir la orden de la marquesa.

— parece que todos en esta casa suplican por ser enviados al infierno...— sonríe con malicia.

Tendrá que pensar, quien es la siguiente después de que acabe con Mariam, a la cual, debe hacerle una visita esa noche.

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