Cercanía.

Daniel en el fondo sentía que había sido muy Injusto con Mia Pero no podía negar que ella era la culpable de que en ese momento se encontraran viviendo sobre el mismo techo, no estaba dispuesto a ceder las cicatrices que le había causado Luisa no era fácil de borrar necesitaba tiempo y no estaba en el momento más justo para tener a otra mujer cerca y más que ahora fuera su esposa.

En un abrir y cerrar de ojos no podría imaginar Qué tan lejos había llegado todo lo que había causado aquella pequeña muchacha, durante la charla que tuvo con Isabel ella le preguntó si aún guardaba las esperanzas de seguir con Luisa ella era amiga de Luisa pero en el momento que se enteró de que fue muy injusta con su hermano no Estaba dispuesta a continuar mirándose con ella no era justo lo que había hecho.

En el fondo él guardó las esperanzas de que ella regresara a su lado pero el golpe que tenía con la realidad lo despertaba rápidamente, Qué mujer estaría dispuesta a regresar con él Después de enterarse de que se encuentra casado dos días después de que terminara, la resignación era muy grande pero tenía que continuar con su vida, en las revistas del país ya estaba la noticia de que él se encontraba casado con una muchacha de Singapur no había foto de ellas ni nada solo el empresario en la portada, desconocían Cómo se miraba había tantos rumores tanto así que decían que el joven no quería presentar a su esposa pues no había dado a conocer en los medios de comunicación su relación, lo tachaban de infiel en las revistas amarillistas tenían conocimiento de su relación con Luisa y se dieron con semejante notición no podían perder la oportunidad de ser los primeros en dar las noticias.

a las 4:30 ya se encontraba listo para irse a la oficina de su padre ahí se encontraba en compañía de Raúl tenían que entregarles toda la documentación respectiva, en Berlín lo estaría esperando Mónica la mano derecha de Raúl en ese lugar era la encargada de llevar todo en orden en lo que ellos se encuentran en otros labores, pero los problemas que tenían pedían la presencia de uno de los dueños.

- Bienvenido señor Daniel.

- Gracias Mónica dime solo Daniel.

- Ni loca, El señor Raúl me mata primero a que eso pase.

- Ja ja tienes razón, pasemos a lo más importante prepara una reunión.

el resto de la mañana se la pasó hablando con los empleados y socios encargados de la publicidad en el exterior tenían problemas con una de sus modelos para las publicidades, decían que no estaban dispuestas a hacer la cara de esa empresa, ya que sus dueños no se encontraban al frente del panorama.

Daniel les dio entender de que no importaba si alguno de ellos se encontraban ahí Mónica estaba con todas las capacidades necesarias de llevar a cabo la empresa y si alguno de los que están interviniendo en ese momento llegan a hacerlo nuevamente contarán con la dichosa oportunidad de trabajar en otro lado porque no están dispuestos en tener personas que no quieren poner de todo, sino que intervienen con su trabajo, con una simple mujer todas estaban en huelga y no había persona alguna que quisiera trabajar con ellos como modelo en ese momento tuvieron que llegar a muchos diálogos varias renunciaron y la que se había encargado de hacer tanto revuelo se quedó ahí pues al ver a Daniel no le entraron ganas de salir de ese lugar.

Por otro lado en el Reino Unido Mia se encontraba en la cocina observando qué haría de comer Tenía muchos conocimientos de cocina siempre le cantó hacer pasteles y galletas cuando su madre estaba con vida la aconsejó mucho.

Estaba concentrada picando la cebolla cuando sonó el timbre, Isabel se encontraba en la puerta con sus dos pequeñas no quería utilizar la llave le daría su espacio no quería entrar y asustarla.

Se dirigió a la puerta luego de ponerse el velo negro, encontrándose con dos bellas niñas que daban ternura.

- Hola Mia, ellas son mis hijas Sara y Luna.

- Hola Isabel sigue, son divinas tus niñas.

- Gracias.

Las pequeñas solo sonreían se les hizo muy extraño que ella tapara su rostro Así que le preguntaron a su padre de por qué ella no mostraba su cara.

- Solo no le gusta mostrarla.

- Tía.

-¿Tía?.

- Si eres nuestra tía, ahora eres la esposa de mi tío Daniel, ¿Cierto mami?.

- Si mi amor.

Solo con escuchar a esas pequeñas hacía que no recordara nada de lo que estaba viviendo o pasando como iniciar de cero con otra vida Eso era lo que le estaba pasando a ella.

- ¿Ya almorzaron?.

- No, a eso veníamos a invitarte a comer.

- en realidad en este momento me encontraba picando las verduras para hacer la comida por qué no mejor comemos aquí y después llegamos a esas pequeñas niñas a comer un helado.

- Si mami.

- Dile que si...

- Pues ellas mandan, vamos a lavarnos las manos para ayudar.

- Si mami.

Las niñas salieron corriendo al baño para lavarse las manos Isabel aprovechó para hablar un poco con ella quería saber de por qué seguía llevando ese velo a ellos no les importaba si su apariencia era buena o mala solo querían convivir y que se sintiera bien.

- tu hermano me dejó muy claro que porque soy fea no quiere que esté cerca de él y la verdad a mí eso no me importa, Pero tienes razón es momento de dejar de utilizar este velo pero creo que necesito mi tiempo he llevado este velo durante más de 15 años, ni siquiera mi padre sabe cómo luce mi rostro.

- Tengo una idea vamos a preparar una fiesta para darte la bienvenida a esta familia.

Isabel se arrepiente mucho de haberse burlado de su fisco, son mujeres y no es justo que se ataquen entre ellas.

- Gracias.

- Por cierto Mia Te voy a pedir disculpas De antemano por haberme burlado de ti imaginarme que tu apariencia, me vi muy caprichosa al hacerlo y lamento si aquellas palabras llegaron a tus oídos haciendo que te ofendas.

- Tranquila Isa, que eso es pasado mejor hagamos estas altas a la BBQ.

Se la pasaron en risas y cantos mientras preparaban la comida Isabel se encontraba asombrada de todas las preparaciones que hizo su cuñada en menos de media hora todo le había quedado delicioso ellas tres solo fueron ayudantes todo lo hizo Mia.

- Es delicioso, Tía gracias.

- Si mami, podemos volver a que la tía nos prepare algo rico.

- Pregúntale a ella.

- ¿Podemos tía?.

- Por supuesto, yo feliz de hacerlo. Cuando quieran pueden venir y acompañarme ahora estoy sola.

- Siiiii.

Gritaron juntas de la emoción esas gemelas tenían pilas con demasiada energía.

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