Carol 3

⚠️ Advertencia:

Este capítulo tiene: Relato de escenas de violencia sexual, física, psicológica, abuso de sustancias, que podrían herir su sensibilidad. Se recomiendan dejar de leer si crees que esto puede herir tus sentimientos. Solo para mayores de 21 años ⚠️

Luego del escándalo que generé en la agencia de citas, la dueña se encerró conmigo en su oficina. Cleopatra parecía una gran empresaria y yo a su lado me sentía muy incómoda con mí ropa que se subía. Por la ventana se veían ir y venir jóvenes, su negocio de citas sin dudas estaba en auge.

Yo la había intrigado demasiado o tal vez sospechara de su esposo, y con justa razón. Si tan solo hubiera sabido que yo era su amante, me hubiera matado allí mismo. Yo tenía ganas de gritarle que su esposo le era infiel, que yo era la infeliz con la cual él cumplía sus múltiples fantasías y que también era su tapete, así que no era más afortunada que ella.

— ¿Así que conociste a Oscar en el evento de la fundación huérfanos? — me preguntó sin dar muchas vueltas. Me gustó que fuera tan frontal

— Sí, así es señora Cleopatra. No hablamos mucho, pero él se dio cuenta de que yo estaba acompañando a un caballero y que no era precisamente su pareja. Es decir, que me habían pagado por estar allí — le mentí mientras miraba para otro sitio. Fue lo mejor que pude inventar en solo unos segundos

— Que extraño. No es un tema de conversación usual en un evento ¿Verdad? — respondió con cierta duda. Supongo que tenía razón, pero supuse que ella iba a elegir mentirse a sí misma

— Oh, es que yo estaba nerviosa señora Cleopatra. Y al parecer él es muy perceptivo. Se dio cuenta de que yo era una simple acompañante en ese evento — volví a mentir

— Ya veo. Entonces, eres prostituta — preguntó de repente y sin mucho filtro ni tacto. Tenía una personalidad fuerte, de mujer que tiene poder. Me di cuenta de que ella ya me agradaba y que Óscar la subestimaba.

— Bueno, sí. . . Sólo lo hago como algo extra, ya que quiero independencia de mí padre, quien si tiene mucho dinero, pero con quién no me llevo bien — le respondí rápidamente. Al menos eso último era verdad

— Entiendo. Bueno Carol, lo que quiero que quede claro es que si decido que trabajes aquí vas a estar a mí cargo. No de Óscar, el negocio es mío. Él es simplemente un socio nuevo. Yo voy a manejar tus citas, te vas a comunicar conmigo y estarás a prueba un mes. No permito que consuman sustancias ni que beban alcohol antes de las citas, ¿Te queda claro?

¡Era perfecto! Yo quería alejarme del cerdo abusador de su esposo y necesitaba dinero con urgencia. En el peor de los casos si algo salía mal, aún podía denunciar a Óscar. Lo malo es que la policía quizás no me iba a tomar en serio y no tenía a dónde caerme muerta.

— Bien, ¿Dónde tengo que firmar? — le dije con una leve sonrisa

Luego de firmar, conocí a Milagros, quien me vio pérdida en la agencia mientras leía el contrato. Con Milagros hicimos conexión en seguida y ella tenía una sensibilidad especial, sentí que me la había enviado el cielo.

Ya desde el primer día, Mili me ofreció casa, así que pude vivir en su departamento un tiempo. Me mantuve limpia por casi 3 meses y 20 días. Toda una racha sin consumir y solo con mí fuerza de voluntad. Sí, bebía alcohol a escondidas para calmarme y fumaba.

¿Qué sucedió luego de los primeros 3 meses? Pues lo de siempre, cedí ante la tentación. Dió la casualidad de que estaba más tiempo sola en el departamento de Mili, ella estaba casi siempre en su otra propiedad. Por eso, yo pude empezar a consumir nuevamente y con más tranquilidad. Todo empezó luego de que en una cita un diputado de nombre Richard me ofreciera quedarme tiempo extra en su yate.

— Te doy toda la hierba que quieras si tenemos relaciones, o al menos, me masturbas— me propuso luego de enseñarme varias bolsas que tenía escondidas, junto con juguetes sexuales en un baúl dentro de su embarcación

— 'Hasta aquí pude aguantar' — pensé desconsolada mientras con la cabeza le decía que sí lo haría. ¡Tantos meses tirados a la basura!

Por favor, no me juzguen. Es muy difícil mantener el cuerpo limpio tanto tiempo, solo con fuerza de voluntad mucho alcohol y cigarrillos. Los temblores se hacían cada vez más frecuentes y tampoco estaba teniendo relaciones con los clientes para al menos calmarme.

La recomendación de no tener sexo con los clientes había sido de Mili. Ella me decía que si bien era más la ganancia, siempre había más riesgos. Eso no evitó que yo haga cosas que ella nunca hubiera hecho, como hacer un baile erótico en la fiesta de cumpleaños de una conocida estrella de rock y dejar que me filmaran.

Luego de unas cuantas citas fumando con el diputado, empecé a ofrecer relaciones sexuales con mis citas. El dinero extra ganado por ofrecer eso decidí usarlo en vicio. 'Así me voy a poder controlar' pensaba ingenua. El problema era que había perdido contacto con mis proveedores, culpa de Óscar que empezó a monopolizar todo cuando vivía con él. Así que no tenía nada para aspirar.

Mí error fue que, informé a la agencia de mis "nuevos servicios sexuales". A Cleopatra le pareció extraño, pero no objetó nada. De quien debí haberme cuidado era del cerdo de Óscar, que vio la posibilidad de volver a aprovecharse de mí situación.

— ¡Hola conejita!, me enteré por Cleo que estás ofreciendo sexo en tus citas ¿Qué sucede? ¿Volviste a los vicios? Supongo que tú amiguita Milagros no está enterada — me dijo una mañana en la agencia, luego de que por fin me encontrara a solas, intentó tocarme y yo lo aparté con fuerza

— Ja,ja y tu pareja tampoco está enterada de que yo era tu amante ¿O si? Si quieres le voy a contar ahora mismo — le dije desafiante, como lo hubiera hecho Milagros

— ¿Estás dispuesta a perder este empleo? Porque excepto ser amante de tipos con mucha pasta, creo que no sabes hacer otra cosa. Ah si, me enteré que Milagros te está enseñando masajes tántricos. Una drogadicta dando masajes sensuales, creo que todos sabemos cómo termina esoñ— se mofo hasta que yo le di una cachetada

— Y agradece que lo dejo aquí y no voy a la policia, tengo muchas pruebas de tus abusos — le susurré luego de dejarlo con bronca en uno de los pasillos de "Latidos Únicos". El abusador sabía dónde arrinconar a sus víctimas, pero yo aún estaba empoderada.

Yo lo había podido evitar durante muchas semanas, y no lo había delatado con Cleopatra ese primer día en la agencia porque quería hacerlo sufrir un poco. Y tampoco esperaba lo que ocurrió luego, que Cleo me ofreciera un contrato formalmente.

Luego supe que había una especie de competencia entre ambos y ella vio la posibilidad de robarle una trabajadora a su pareja. Cleopatra era muy competitiva y no le gustaba la idea de que Óscar hubiera contratado a una acompañante sin su permiso.

Fue una pequeña victoria en esos momentos y me duró algunos meses, gracias en gran parte a que conocí a Mili. Lo malo es que los adictos no podemos tener paz por mucho tiempo y siempre estamos al borde de caer nuevamente en malas compañías y en nuestros viejos vicios.

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