Capítulo 12: Una escapatoria hacia lo conocido

Siempre me he preguntado...

¿Qué es lo que piensa Luminor cuando se queda en silencio?.

Tiene una personalidad peculiar y no habla más de lo necesario. Es directo pero no tanto para ser arrogante, es fuerte pero no asesina de manera arbitraria, su mirada es fría pero sus acciones son amables.

— Victoria.

Yo levanté la mirada.

— ¿Si?. —Pregunté.

— Emma encontró unas bayas, ve con ella.

Es casi como una orden pero siento que la intención de sus palabras reflejara otra cosa, realmente se preocupa que yo coma, incluso si todavía estábamos en el bosque. No tiene problema en esperar mientras Emma y yo comemos, generalmente se sienta bajo un árbol, cruza los brazos y cierra los ojos como si estuviera meditando. Y es ahí cuando me pregunto... ¿Qué pasa por tu mente?.

Te he visto asesinar.

Como los aventureros que quedaron encerrados en esa prisión de fuego. Ni siquiera quedaron sus cadáveres, solo cenizas. No estoy diciendo que sea culpa de Luminor pero tampoco quiero justificarlo, ser un aventurero no es una tarea fácil y creo que todos saben que sus vidas están en peligro todos los días. A pesar de su actitud y los rumores que corren detrás de él, es como si tuviera una misión u objetivo pero tengo miedo de su respuesta si meto la nariz donde no debo y mucho más si fui yo quién decidió seguirlo sin importar qué.

Es un conflicto personal que ni yo misma comprendo.

— Lo mismo va para ti. —Dijo.

Pero cuando es amable conmigo, incluso de manera indirecta, mi corazón comienza a latir muy fuerte y todos mis conflictos desaparecen. Incluso cuando tuve la oportunidad de abrazarlo, una excusa barata luego de separarnos, solo me hizo dar cuenta de lo cómoda que me sentí cerca de ti.

Esto está mal.

Siento que me estoy enamorando de ti.

Si fueras cruel, no dejarías que nadie camine a tu lado y si fueras despiadado, habrías asesinado a Emma y a mí hace mucho tiempo. Pero no lo haz hecho.

¿Cual es tu plan? ¿Cual es tu objetivo?.

Fuiste tú quién me dijo que yo era una princesa aunque fuera hija de una concubina, entonces ¿qué eres tú?. ¿Sigues siendo el héroe de la profecía? ¿O haz decidido revelarte contra Dios para forjar tu propio camino?.

— ¡¡Hermana!!.

Todos observaron con horror como asesinaste a una mujer que estaba siendo amenazada. Todavía me pregunto porqué lo hiciste pero es extraño, cuando mi corazón comienza a dudar, basta con mirar a Emma para que ella me muestre una sonrisa.

Si yo decidiera irme y abandonarlo, ¿te sentirás solo?. Sé que no encontraré una respuesta de ti y quizá, estés muy acostumbrado a guardar tus sentimientos para ti mismo. No importa, no importa si me consideras una carga o una amiga.

Yo esperaré... por ti.

Hasta el día qué decidas ser sincero conmigo y me cuentes lo que estés pensando, hasta ese momento, me quedaré a tu lado y prometo protegerte. Porque hay un sentimiento dentro de mí, que me dice que confíe en ti y porque mi corazón no puede dejar de amarte con locura.

Tomé a Emma y la dejé sobre mi hombro.

— ¡Relámpago!.

Grité con todas mis fuerzas mientras yo enterraba mi espada al suelo. Una onda eléctrica chocó en el suelo y avanzó lo suficiente hasta llegar a la multitud. Las chispas hicieron que la multitud se separara en frente de mí, formando un camino que me llevaba a Luminor. Yo corrí con Emma en mi hombro y no había más que un rostro de sorpresa de Luminor que estaba al final.

Luego tomé su mano y yo lo arrastré conmigo. Corrí tan rápido como pude en lo que había una horda de gente furiosa corriendo detrás de nosotros.

¿Por qué asesinaste a esa mujer?

Espero que algún día me lo digas, yo estaré feliz de escuchar tu historia.

Y ese mismo día, también te diré lo mucho que te amo.

..... ..... ....

...........

.......

— Creo que ya los perdimos.

Miré a mi alrededor, Victoria usó magia de teletransporación luego de que nos escondimos en un callejón. Así que estábamos en un área sobre arena, un mar y algunos botes cerca de la orilla. El cielo estaba despejado con un sol caluroso, supongo que todavía seguimos en Hrameda. No había más que gente cargando mercancía y personas en el muelle, además, este lugar de la costa era muy amplio pero no tardará mucho en correr los rumores sobre lo que hice.

— Huh ...

Volví a dirigir mi mirada a Victoria.

— ¿?

— Tu mano, está helada.

No me percaté que Victoria seguía sosteniendo mi mano. Quizá deba ser impresionante que bajo este terrible sol, mi piel esté helada. Nunca me puse a pensar en la temperatura de este cuerpo, ¿siempre fui así de frío?.

— ¿Si?.

— ¿No lo sabías?. —Ella preguntó.

Mientras Emma nos observaba, gesticuló con las manos en dirección a Victoria.

— "Toca su mejilla"

Victoria no tardó en soltar mi mano para luego situarla en mi mejilla. Era la primera vez que sentía una mano cálida en mi rostro. Me quedé en silencio mientras Victoria me observaba con mejillas rojas, era como si quisiera decir algo pero las palabras estaban atoradas en su garganta. Aun así, observé de reojo a mi lado derecho, justo detrás de unas rocas.

— ¿Por qué simplemente no dices que es lo que quieres?. —Pregunté.

Victoria apartó rápidamente la mano y yo me giré hacia las rocas. Ahí, se asomó el mismo elfo del bar. Con la luz del sol, pude distinguir que era joven y su mirada parecía sostener algo de resentimiento contra mí.

— Entonces.. ¿Si eres ese Luminor?. —Preguntó, parecía un poco temeroso pero no iba a correr hacia mi otra vez.

— Supongo que quieres mi cabeza, ¿me equivoco?.

Si los rumores del bar son ciertos, entonces deben haber puesto una enorme recompensa por mí y no sólo el minotauro estaba interesado, también él. Si me descuido un poco, tendré todo un continente detrás de mi espalda.

— Mi nombre es Martis. —El joven elfo se quitó la capucha, parece que bajó la guardia al ver que no intentamos atacar.— y trabajo en el Castillo de Asgard.

— ¿Sirves a un Rey?. —Pregunté.

Pero fue Victoria que negó con la cabeza.

— El castillo de Asgard no es un lugar para vivir como tal, allá no hay nobles ni estatus, solo clanes. Así como las hadas tienen a una madre que lidera o las sirenas a un jefe a cargo. Es como democracia, ellos escogen a su líder y todos son tratados por igual. El Castillo es distinto, es como una enorme Biblioteca de conocimientos dentro del clan de los elfos y se dice que hay registros históricos ahí.

Tiene sentido, los faericos tienen vidas más longevas qué los humanos.

— Así es, el Castillo de Asgard guarda la historia de Aircraft desde sus inicios y todos sus secretos, mucho más de lo que conocen en el Santuario Sagrado. —Dijo Martis.— Y solo los elfos de mayor prestigio pueden trabajar ahí, así que arrodíllate ante mí, insecto.

Yo levanté una ceja.

— Solo si quieres.

— ¿Y qué tiene que ver Luminor con Asgard?. —Preguntó Victoria.

— Ah si. —Martis se aclaró la garganta.— Hace algunas décadas, los elfos descubrieron un portal sellado con lenguaje ancestral, así que como un lenguaje antiguo perteneciente a los dragones, solo un ser es capaz de hablarlo.

— ¿Te refieres a mí?.

— ¡Exacto!

— Pero yo no sé el idioma ancestral.

Creo, es la primera vez que escucho esto. Sé que los dragones no hablaban el mismo idioma que hablamos en el presente y usaban un lenguaje distinto. Según los libros, ese idioma era empleado por los dragones para comunicarse con Seraff.

— Lo sepas o no, por ser la Lágrima de Dios, debe haber algo de conocimiento en tu cerebro que tu desconozcas y los elfos están dispuestos a descubrirlo, ya sea que estés vivo o muerto.

En pocas palabras, quieren experimentar conmigo.

— Dejame adivinar, ¿Están ofreciendo una recompensa si me atrapan, ya sea vivo o muerto?.

— Si. —Respondió Martis.— Colocaron un anuncio de qué los elfos estaban buscando a Luminor, la recompensa era una suma de diez mil monedas de oro y un puesto de trabajo en el Castillo de Asgard. Aunque, es un hecho que los rumores acerca de ti llegaron hasta allá. Así que los elfos cambiaron el texto para que ningún clan de Asgard esté asustado, dijeron que era mejor atraparte muerto.

Un Castillo lleno de conocimientos liderados por elfos de prestigio y un portal sellado por dragones que solo se abre con lenguaje ancestral. No tengo ni la más mínima idea de cómo tomar esto, sin embargo, al levantar mi mano izquierda y observar el mapa de mi piel, pude distinguir que en Asgard hay cuatro demonios. Como ya terminé de aniquilar a los demonios de Rizz, lo más seguro es que mi siguiente destino sea allá.

Yo suspiré.

— ¿Sabes como llegar a Asgard?. —Pregunté.

Martis sonrió de alegría.

— Espera, ¿Iras allá a morir?. —Preguntó Victoria con sorpresa.

— No. —Luego de responder, yo miré a Martis. — Quita ese rostro y guarda ese cuchillo. Simplemente tengo asuntos allá, así que iremos a Asgard.

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