¿TE CASARÁS CON ELLA, MAXIMILIANO?

"No sé" "No puedo decirles" "Eso es todo lo que sé", eran muchas de las palabras a preguntas que ellos hacían y que Rosabell esquivaba. Tal era el enojo que sentía por parte de la hija del aliado de su padre, que estuvo por tirarle la mesa encima, aunque sabía que nada le pasaría, sino fuera porque aquel salón era el favorito de su madre.

—¡Rosabell!—gritó Maximiliano—¡Habla ya! ¡No des vueltas!

—Es que no las doy—respondió sincera—con respecto a tu pregunta sobre que tiene que ver el emperador con Freya y con tu hijo, ¿Estás seguro de que me quieres preguntar a mí y no a ella?

Freya, debajo de la capa, observaba con ira a Rosabell. Su tranquilidad inmutable, así como el hecho de que ella aparentemente supiera todo la enojaban a más no poder. Aunque en parte agradecía que ella no dijera nada, ya que era a la antigua princesa la que solo le correspondía eso.

—Soy Luna Freya de Ymmitos, cuarta nieta de la reina Isobel y exprometida del príncipe Aqua, hijo del emperador Abelardo—respondió tajante—hace más de cinco años escapé del castillo imperial y pude cruzar la frontera, donde supuestamente he estado a "salvo" junto con Maxi; sin embargo, tampoco sé como es posible que él sea hijo del doctor Maximiliano. Lo único que recuerdo fue haber despertado en la cama con el príncipe, hasta esta mañana pensaba que su padre era él.

Ni Maximiliano ni Atenea podían creer lo que estaban escuchando, si todo lo que ella decía era cierto, entonces había entrado en su casa un miembro de la familia del enemigo. Un miembro que hacía parte de la única realeza que apoyaba al emperador en el continente y que le daba su apoyo para no perder la guerra.

—No entiendo—dijo Maximiliano—si es así, ¿Quién es en realidad la señora Luna? ¿No era ella la abuela de mi hijo?

—Ella...—estaba avergonzada, tanto que bajó la cabeza.

Rosabell observó con detalle la actitud de la princesa, sabía que le era difícil decirle quién era de verdad, por lo que de manera interna supo que debía provocarla.

—¿Tienes miedo de que te rechacen por tu verdadera forma?—dijo de forma burlona.

Freya abrió sus ojos con gran enojo, recordando con esa sonrisa las miles de humillaciones que sufrió.

El tan solo ver la sonrisa de Rosabell, le hizo recordar cuando su prima la molestaba. Siendo apenas una pequeña niña, sobreviviente de un incendio, cuando tenía todo su cuerpo vendado, Katherine había entrado y usado un puro encendido provocó que sus heridas se agravaran.

—¡¿De qué te ríes?!—le gritó enojada, arrojándole una taza de te.

Con frialdad Rosabell abrió un pequeño agujero negro que terminó tragándose la taza. Suspiró con más fuerza, necesitaba provocarla más.

—Si así reaccionas por esa pequeñez tonta—dijo—entonces no querrás saber la razón por la cuál Federico te hizo lo que te hizo...

—¿Fue Katherine?—preguntó adivinando.

—Katherine te colocó una maldición cuando era niña, una legión de demonios pisa donde tu pisas y mediante su espejo oscuro busca maneras desgraciarte la vida, entre ellas quitarte de la línea de sucesión—confesó.

Al igual que Maximiliano, ella también era sucesora, en este caso del trono de su abuela; sin embargo, tras lo sucedido, su abuela no solo la abandonó sino que la quitó de la sucesión.

—¿Por qué me odia tanto?—cuestionó—yo no le hice nada a ella.

—No puedo responderte del todo—dijo—perl una de las razones era para quedarse solo con el príncipe Aqua.

—¿Entonces seguiré huyendo de ella toda mi vida?—preguntó cansada —¿No podré descansar ni un día?

Estaba con la cabeza gacha, tan pequeña y temblando, que Maximiliano se acercó para intentar consolarla.

—Casate con Maximiliano y podrás descansar—adivirtió.

—¿Qué?—preguntaron ambos padres al unísono.

—¿No te has preguntado porque la marca de tu mano brilla, Maximiliano?—cuestionó—¿No te has parado a pensar que en parte es porque la princesa Luna Freya es tu pareja destinada?

Ambos se quedaron mudos, estáticos. De por si no entendían nada de la razón por la cuál era Maximiliano el padre de Maxi, tampoco podían entender que ellos eran almas destinadas.

—Ustedes los cercanos a los dioses y los mismos dioses...—dijo temblando de la rabia—¡Pueden hacer con uno lo que les de la reverenda gana!

Enojada con el destino que le había tocado vivír, aventó a un lado la mesa de té del salón, haciendo que la parte de arriba de la capa se bajara y mostrara su verdadero rostro.

Delante de el estaba la señora Luna, la supuesta madre y abuela de Maxi.

—¿Señora Luna?—preguntó confundido—¿Cómo es posible? ¿No estabamos hablando al lado de la princesa Freya?

Freya volvió a ocultar su rostro, quedándose muda. Por fin habían descubierto su segundo mayor secreto, por fin alguien más sabía sobre la maldición de convertirse en una anciana.

—Ella es la señora Luna, así como lady Freya o La Sombrerera Loca, y la misma princesa Luna Freya—respondió Rosabell—la mujer que para salvar a su hijo de la muerte, dos veces, dio parte de su energía vital, acelerando su envejecimiento.

—Antes solo me convertía en la noche—terminó de hablar la princesa—ahora estoy condenada a ser un monstruo para siempre.

—¿Te casarás con ella, Maximiliano?—preguntó de nuevo Rosabell.

—Casarme...Rosabell, ¿Qué más estás ocultando?—preguntó sintiendo que algo no iba del todo bien.—casarme en esta situación...

Con una sonrisa lastimera, pensando que Maximiliano quería rechazarla debido a su fealdad, se fue corriendo de la habitación para poder refugiarse en los brazos de su hijo j

EOS (DIOSA DE LA AURORA) PERSONAJE DE "LA ESPOSA ENFERMIZA DEL DUQUE INMORTAL" - ADELANTO CÓMIC.

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