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Cuando Ágata estuvo a punto de atraparla, otra flecha la derribó, al cortar la rama dónde estaba parada. Cayendo al suelo brutalmente. Cuando intenta pararse es atacada por una lluvia de flechas. Asiendo que se cubriese con las sombras, para detener la que iban directo a sus órganos. Erick al ver que su hermana era atacada no dudó en cortar los troncos con una de sus mejores técnicas. Desenvainando su espada, cubre la hoja con un velo negro, que al agitarla en el aire, crea un filo oscuro que corta los árboles de un tajo.

Ágata al ver cómo los árboles eran cortados, se quita, esquivando los troncos que caían, al mismo tiempo que se escuchaba el grito de las mujeres por todas las arboledas cortadas.

-les dije que no estábamos solos. -comenta Carlos apareciendo con una joven, la cual llevaba amarrada de las manos, con una cuchilla en la garganta.

-y quien es tu linda amiga? -preguntó Ágata crujiendo los nudillos.

- ¿Por qué no le preguntamos a sus amigas? - propone Carlos observando las copas caídas, en dónde barias estaban escondidas. -¿Quiénes son vosotras? Y ¿Por qué nos atacan?

-niño estúpido. -le responde la chica que tenía atrapada. -no saldrán con vida de esta.

-eso veremos. -dice Ágata cubriendo el suelo con su sombra.

La mancha oscura empieza a devorarse los troncos, dejando a las mujeres desprotegidas. Manos negras las atrapan y las elevan en el aire. Sin posibilidad de escapar una de ella sopla un silbato. Fue entonces que el rugido de una bestia los hace desmoronarse. Ágata es la primera en desmayarse, seguido de Carlos, quien suelta a la chica cayendo a su lado. Erick logra soportar la vibración solo por un instante, antes de caer de rodillas. La sangre empezó a salir por sus orejas y nariz, pero no estaba dispuesto a sucumbir frente al enemigo.

Sabía que no tenía otra elección, sus hermanos yacían detrás de él, y si quería protegerlos tenía que usarlo. Fundiendo su cuerpo con la oscuridad de su sombra, este cambia de forma a la de un enorme gato negro con dos cuernos que sobresalían de su frente. Con solo un gruñido hace que el suelo se agriete a su alrededor. Liberando un poco de su magia, trata de hacerlas retroceder, mientras se lanza sobre su hermana, dejando que su sombra la devorara. Era la única forma que tenía de mantenerla segura estando inconsciente. Sin embargo, no tuvo la oportunidad de tomar a su hermano, ya que este estaba en mano de la chica que había sido su presa.

Cuando intentó quitárselo fue atacado por las lluvias de flechas envenenadas, lo que lo hizo alejarse del lugar. Tenía que poner primero a Ágata fuera de peligro, para tener una mejor posibilidad de rescatar a su hermano. El único problema era que no sabía en dónde estaba, y qué lugar podría sé seguro.

Con forme se preguntaba qué dirección tomar, no nota los carteles de advertencia colgados en los troncos de algunos árboles. Hasta que es emboscado esta vez por una manada de lobos del tamaño de un oso. Erick maldice su mala suerte, pero está listo para atacar; todo lo contrario de los lobos, quienes se quedan quietos, al ver la extraña bestia casi de su tamaño.