Capitulo 7

Capitulo 7.

Sentía mi cuerpo pesado como en aquellos tiempos cuando comencé a tener signos de mi enfermedad, tenia los ojos cerrados debía abrirlos tenia miedo de saber que todo este poco tiempo donde tengo un cuerpo sano y mas estéticamente bello sea solamente un sueño demasiado hermoso podía sentir emociones de alguien mas ajeno a mi acaso era empatía.

-¡ACASO NO LO ENTIENDES…TU ERES MIA!- Esa voz me era extrañamente familiar ya la había escuchado antes

-…Por favor no más- una voz nueva era de una mujer ¿Qué sucedía? Comencé abrir los ojos todo era borroso al inicio pero me fui acostumbrando con el pasar del tiempo mire una cortina que me tapaba la escena y junto a mi estaba un espejo de cuerpo completo y me vi, era mi viejo cuerpo tenia cables conectados a mi, mi piel pálida y ojeras enormes bajo mis ojos mi tez era casi gris y tenia la ropa del hospital del ultimo día que estuve con vida, no quise mirar mas y me fije en lo que tenia en frente moví la sabana y me encontré con una escena particular, era Asim que se veía muy furioso con sangre en sus manos y en el piso estaba ¿Shani? Su cabello rubio era inconfundible pero estaba en el suelo con el cabello hacia enfrente y en su espalda se veían muchos moretones.

-¡¿No más?! ¡¡¡ESO DEBERIA DECIRLO YO!!!- Asim estaba como loco se tomaba el cabello jalándolo mientras miraba con rencor a Shani, no recuerdo que describieran una escena así en el libro era algo inusual ver esto ya que era contado por el protagonista Aaron el hermano menor del Faraón ¿seria por eso que no describen este tipo de escenas? Quería apartar la vista cuando volvió a golpearla

-Acaba con ella Asim…solo yo puedo tenerte- mire de donde venia esa voz y era Nailah la villana de este mundo veía esa golpiza con placer y mostrando una sonrisa muy satisfactoria que descaro de su parte y eso que fue mi personaje favorito.

-No..no se a que se refiere mi Faraón- Shani casi ni podía hablar por los golpes que recibió, quería ayudarla

-¿Niegas la verdad?- ¿De que verdad hablaba?

-No…se de que habl…agg- ni siquiera la dejó terminar ya que le propino una patada en el estomago haciendo que sacara la comida para después tomarla del pelo y llevársela del sitio vi a donde se dirigían y era con unos soldados indicándoles que la encerraran en la mazmorra, ¿Cómo podía hacerle eso?

-¡Porque, porque, porque Shani! – cuando se la habían llevado él se derrumbó en el suelo tapando su rostro ¿Sentía culpa? No debería abusaba de una mujer que fue arrebatada de su hogar para ser concubina de Asim.

-¿No te lo dije? Ella negó todo pero las pruebas están claras- Nailah salió de donde se escondía acercándose sensualmente a él -Los soldados lo confirmaron t mas preciada mujer a la que mas amas duerme todas las noches con tu hermano- ¿Pero que decía esta mujer?

-¡No le creas! ¡Son mentiras, patrañas! - grite saliendo también pero al parecer nadie me escuchaba

-¡Ella no te salvara…en cambio yo te he salvado unas cuantas veces!- sus palabras hacían que el la mirase con lagrimas en los ojos -Solo déjame demostrártelo- ella se aprovecho de su debilidad y comenzó a besarlo para después llevarse de esa sala quise seguirlos pero el piso se rompió y comencé a caer cuando senti que toque suelo abrí los ojos muy asustada por lo que había visto mire a mis lados y me encontré en la cama que me dieron en el cuarto de Ain y como en las ultimas noches ha pasado Ain estaba abrazada a mi. ¿Qué significaba ese sueño? Sin despertarla me levante y tome del escritorio de Ain papel y comencé a escribir todo lo que había visto, si realmente eran escenas verdaderas había muchas cosas que desconocía.

La maldición o problema como relatan en el libro de Asim.

El por que golpeaba mucho a Shani y luego se soltaba a llorar ¿tendría que ver Nailah con eso?

Y lo mas importante porque Shani era la salvadora de ese cobarde Faraón, no tenia sentido si no buscaba respuestas con el mismo Faraón o hasta que Nailah haga su aparición.

-¿Maestra…. Donde esta?- escuche como Ain me llamaba y como toda niña comenzó hacer ruido de querer llorar me apresure a su lado

-Me alegro que despiertes pequeña Ain- cuando me escucho paro sus sollozos y corrió a abrazarme

-¿Ya es hora de entrenar?- si que tenia un objetivo o mejor dicho un sueño muy bonito pero hoy era un día algo especial ya que su hermano nos invito a desayunar y de solo recordarlo me llegaba ese recuero del sueño un Asim violento y agresivo con Shani

-Hoy no pequeña…recuerda que vendrá por nosotras para desayunar- escuchar eso la emociono aun mas -¿Nos bañamos juntas?- le sugerí y de inmediato acepto busque ropa para ambas y comenzamos a prepararnos el tiempo paso algo rápido cuando la puerta del cuarto se abrió mostrando a unos soldados.

-El faraón nos ordeno escoltar a la pequeña princesa y a la maestra a desayunar-

-Excelente ya teníamos hambre ¿Verdad Pequeña princesa?-

-Sii- comenzamos a seguir a los soldados al comedor principal era muy temprano aun se escuchaba los cantos de las aves pero algo no me gustaba, mire sobre mi hombro y vi como un hombre me miraba descaradamente desde la cabeza hasta los pies prácticamente me comía con la mirada era desagradable. Tome con mas firmeza la mano de Ain tratando de caminar un poco más rápido pero cuando vimos a lo lejos la entrada del comedor sentí como ese soldado me tomo del hombro

-Señorita ¿Puedo hacerle una pregunta? -

-Seli ….no molestes a la señorita-

-Solo es acerca del entrenamiento de la princesa- su sonrisa era falsa me gustaría darle una lección

-No hay problema será rápido- les dije y ellos siguieron caminando quedándome con el a sola y tan pronto se alejaron mas el me acorralo contra una pared seria satisfactorio golpearlo.

-Ahora entiendo por que te eligieron y no me importa morir si es que te pruebo antes-

-Lo único que probaras es una golpiza- me libere de su agarre y le proporcione un golpe en su entrepierna con mi rodilla para luego patearlo y dejarlo inconsciente. -Maldito asqueroso- lo mire con desprecio y cuando me iba alguien me detuvo de nuevo pensando que era ese soldado trate de golpearlo pero me encontré que era el Faraón Oh Oh.

-Me alegra que sepas defenderte- fue lo único que me dijo para luego ver con una mirada asesina a ese hombre…Maldición.

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