Capítulo 10.

...Escucho por segunda o tercera vez hablar a la señora Gley...

○ Señora que si va a cenar ya, no es bueno que no quiera comer nada...

° Yo, yo simplemente no tengo apetito, solo beberé un vaso de jugo y eso es todo por favor.

Veo salir a la señora Gley, tengo muchas ideas en mi cabeza de saber que es lo que estuvo hablando esa mujer con Renzo y a que se debe su llanto.

Han pasado tres horas y él aún no llega... Nuevamente, las ideas aparecen en mi cabeza...

▪︎ Quizás esos tienen una relación.

▪︎ Tal vez, quizás ellos están juntos.

▪︎ Le reclamó que me viera aquí en su casa.

▪︎ Seguro es por el matrimonio inesperado.

...Vaya que difícil es todo esto....

Me siento en la sala y observo caer la nieve, está muy fuerte la tormenta, es primera vez que puedo ver todo blanco, pero poco a poco se va oscureció y mis ojos están pesados.

... (Renzo Falcón Kirchner)

Llega de un de repente la mujer con la que tenía una relación íntima, pero fue solo eso, claro además de tener algunos negocios en la empresa. Me dice que perdió un hijo mío por una caída y que ella esperaba mi retorno para decírmelo. Perdió el bebe cuando se enteró de mi matrimonio. Todo eso me deja atónito, la verdad que yo me sorprendí, lo que no entiendo es porque en el tiempo que me fui de este país, no recibí ninguna llamada de ella para decirme, porque espero a que yo regresará.

En la fiesta tampoco me dijo nada, solo coqueteo conmigo diciéndome que está feliz de verme.

Voy por una emergencia y a mi regreso quedo atrapado por la ventisca invernal.

Me quedo sin batería y no sé como regresar, tengo frío, busco algún trago que sé que tengo por aquí debe estar en algún lado.

¡Bingo!

Encontré una pequeña botella de Brandy. Doy un trago para aliviar el frío. Me abrigo con mi capucha gruesa y espero. Ojalá y Talo y mis hombres puedan ver el GPS y dar conmigo.

Me toca solo esperar, por un carajo como no sé me ocurrió venir acompañado, ni siquiera dije nada al salir de casa, como estará Soriana...

Soriana Pirelli Montreal, una mujer muy dulce, jamás me hizo un reclamo, desde el primer día que nos conocimos en aquel encuentro para nada romántico, ya que venía siendo perseguido por el maldito de Drago y sus hombres y si no fuese por ella hoy estaría muerto, doy gracias de alguna manera a ese infeliz porque me pude encontrar con Soriana.

No quería aceptar que estaba enamorado de ella, de esos ojos color miel y sus labios sensuales. Cuando tuve intimidad con ella fue tan distinto a otros encuentros, me sentí como si ese momento fuese único.

Las noches que dormimos separados, venía a verla y la contemplaba. Ella es como un ángel en mi camino.

... (Casa Falcón)

○ QUE CÓMO... El jefe no regresa y esto ya es mucho.

○ Talo ve tú y mientras tanto yo iré en la motonave a buscarlo.

... Escucho ruidos en la sala, me decido a bajar, hay movimiento, hay dos hombres trabajando en sus computadoras y otro monitoreo un aparato raro.

Talo con otro hombre salen de la casa y logro ver que conducen unas motos raras, tienen cadenas en las ruedas.

¿Será que algo sucedió?

° Señora Gley, señora Gley …

○ Señora aquí estoy, se le ofrece algo.

° Dime que sucede, porque unos salen y otros entran. ¿Paso algo?

○ Señora le pido que tenga calma y no sé altere por favor.

... Siento que mi pecho se acelera y no puedo hablar, es una mala noticia lo sé estoy segura.

°Vamos dime, no me asustes.

○ Señora el jefe aún no llega y ha anochecido, los lobos a esta hora siempre salen.

... Renzo, me quedo perpleja escuchando lo que me dice y no puedo dejar de hacerme historias trágicas en mi cabeza. Pensé que regresaría temprano o quizás esté ocupado, vaya que no sé que hacer. Me siento y espero, la señora Gley me trae un té de tilo.

Aún no hay noticias, salgo lentamente hacia la puerta principal y el frío está fuerte, pero ya no hay ventisca. Me colocó una manta más gruesa y espero a que los hombres de Renzo traigan buenas noticias.

Mi té se ha enfriado, estoy por rendirme y voy viendo una tenue luz, me paro y si, es una luz.

Veo acercarse el auto, llegan los hombres que vi salir antes, sale Renzo, tiene frío, parece una paleta.

° Pero Soriana, explícame por qué no estás en tu cama.

... Yo lo abrazo y él me corresponde, mi corazón se calienta con solo verlo.

° Yo estaba preocupada por ti.

° ... Pero no te diste cuenta de que tu pie aún necesita descansar.

... Me ayuda a subir, pero esta vez no vamos a mi habitación sino a la de él.

Entro y es amplia, me deja en la cama y escucho que la ducha se abre.

° Soriana, acuéstate y abrígate por favor.

... Oigo que me habla desde el baño y yo tomo su abrigo y siento que su perfume me invaden mis fosas nasales... Está aquí conmigo. Tengo que aceptar que este hombre me tiene enamorada. Sonrió torpemente, me siento como un a jovencita de 16 años con su primer amor.

Él sale y trae una toalla en la cintura.

° No descansaste nada desde que me fui. Sabes que no tienes que forzar ese pie.

° Si lo sé, pero cuando desperté vi que ya era tarde y tú aún no estabas aquí. Escuché hablar y baje para saber que sucedió contigo.

° Salí por una emergencia y al regresar quede atrapado y encima estaba sin carga en el teléfono.

Pero ya pasó, ahora ven conmigo y abrígate esta noche como las otras dos noches que nos quedan aquí dormirnos juntos en esta habitación.

Estoy haciendo cargo de la remodelacion de nuestra habitación en nuestra casa.

Yo sonrió al escucharlo decir tantas palabras que hacen que mi corazón se acelere.

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