Capítulo 8

... No sé cuando me dormí, pero que me levanto con un calor en mi cuerpo, como puedo tener calor si el clima es frío afuera y aquí en la habitación el aire está en 24°. Me siento y despacio me quito el pantalón y trato de sacarme mis calcetas de gato y no puedo. Me duele mucho mi pie.

Me acomodo junto a una almohada y siento que la puerta se abre.

° Soriana baja a cenar. ¿Te sucede algo?

° No. Quiero estar sola.

... Soy igual de tajante que él.

° Estás segura de que no sucede nada aquí, sabes te ves con las mejillas coloradas.

... Renzo se acerca y toca mi frente y mi mejilla.

° Soriana quítate la blusa de inmediato.

° ¿Qué mi blusa? Yo no...

° Déjame ver, estás hirviendo en fiebre. No sé por qué saliste sin tu abrigo en un clima como este. Porque tienes que ser tan terca mujer.

... Renzo va quitando botón por botón. Luego me ayuda con mis calcetas. Veo su rostro y está serio, pero esta seriedad es diferente, parece asustado.

° Soriana, explícame que sucedió cuando saliste de la reunión.

° Bueno yo salí, quería ir al auto, pero no lo encontré, así que me devolví a la casa. Y bueno después tú...

° Soriana tienes el tobillo de muchos colores.

¡Esto se ve mal!

Pero cómo... quizás sea un esguince o desgarro por algún tropiezo.

¿Qué paso cuando saliste de la reunión?

° Si, yo tuve un tropiezo, pero no pensé que sería tanto.

° No logro entender como puedes estar así como si nada, teniendo fiebre y estando con el tobillo mal.

... Veo que Renzo baja, no creo que sea para tanto, cuando siento que voy cayendo hacia delante y ya ni sé que hago aquí... Las nubes son claras y el cielo está despejado, voy caminando entre flores y tras de mí, viene Renzo sonriendo y se ve tan bien que gusto verlo sonreír y que sea conmigo.

... (Renzo Falcón Kirchner)

° TALO... TALO.

DATE PRISA, PERO YA.

○ Jefe, Talo no está, recuerda que lo envío a...

° Llama ahora a un doctor, pero ya.

○ Jefe hay nevada justo ahora y los caminos están cerrados, Talo está atrapado en la carretera hasta que llegue la maquinaria.

° ¡ Rayos me lleva un carajo, por la mierda! Tráeme paños húmedos y busca alguna medicina que sea para bajar la fiebre y alguna pomada para los esguinces.

... Subo rápidamente y veo que Soriana está dormida, me acerco y no es así, se desmayó y a causa de la fiebre, la desnudo completamente.

Suena la puerta y yo me doy prisa, recibo lo que pedí y trato de colocarse los paños en la frente y froto la pomada en su tobillo, espero y solo sea un golpe y no algo grave.

Va cayendo la noche, aunque con este clima no se nota mucho. Cubro su cuerpo con una sábana. Me siento un lado de la cama y espero que el termómetro baje los grados.

... (Soriana Pirelli Montreal)

Despierto y solo una lámpara que está en frente de la cama me ilumina, me tocó por instinto y me doy cuenta que estoy desnuda.

O YO ... A CASO... YO.

Quiero bajarme de la cama y veo que está Renzo sentado en el piso su cabeza descansa sobre el borde de la cama. Un paño cae sobre mi mano, ahora entiendo se la paso cuidando de mí, busco el termómetro y espero a ver cuanto de fiebre tengo. Espero sin hacer el menor ruido, trato de buscar mi Pijama y no está.

Pasa algunos segundos y el termómetro está listo, marca 37 ya está bajando la fiebre.

Cuando estoy poniendo un pie sobre el piso, veo que Renzo se mueve y despierta.

° Soriana, no te atrevas a caminar, aún estás convaleciente.

° Renzo me siento bien.

° Tú tobillo... Déjame ver tu tobillo.

Al parecer bajo la hinchazón, esperemos que solo haya sido un golpe.

° Gracias, estoy bien.

° No te pares, dime que necesitas.

° Puedo sola, no te preocupes.

° Que si me preocupo y para qué quieres pararte.

¿Quieres ir al baño?

¿Agua?

¿Tienes hambre?

° Yo... Yo, estoy desnuda y quiero mi bata.

... Veo que el rostro de Renzo se torna de colores, se avergonzó cuando le dije que estoy desnuda, se para y va al closet, llega con mi bata, me ayuda a colocarla ante mí, se gira, pero él puede ser tan insistente que me aveces me rindo.

° Que va si tuve que desnudarte para que la fiebre te pueda bajar, además te recuerdo que estamos casados. Tengo el derecho sobre ti, de tomarte cuando sea necesario.

° Pensé que solo era un papel sin importancia.

° Te recuerdo que salvaste mi vida, no me eres indiferente, pero tampoco te forzaría a consumar un matrimonio y obligarte a que cumplas con tu vida de esposa.

° Cuando dices indiferente, a que te refieres.

Haces esto solo porque salve tu vida o hay algo más que te tiene unido a mí.

° Y si te digo que hice lo posible por no sentir nada hacia ti, pero fallé y hoy estoy cultivando un sentimiento que va creciendo rápidamente en estas semanas y que te podría asegurar que tendrá frutos.

° Me confundes con lo que me dices yo no logro saber si tú...

... Me quedo en silencio cuando veo que Renzo se acerca a mí y sus labios se unen con los míos, son tan suaves, me hundo en sus brazos al sentir su calor, me aprieta contra su cuerpo. Voy sintiendo su piel, sus manos recorren por abajo de mi bata y me deja desnuda ante él. Se quita la camisa y deja a la vista sus tan marcados pectorales.

Me acuesta con cuidado, me mira a los ojos y se detiene.

° Yo no quiero que sientas presión para entablar un matrimonio y que sea consumado.

° ... Y si soy yo la que cayó en tus ojos. Y que tengo un sentimiento hacia ti que ni yo misma me sé explicar, pero de que estoy segura es que te quiero cerca de mí.

° Soriana, no quiero entregar mi corazón para que sea dañado. Te pido disculpas por lo que acaba de suceder. Lamento ser tan propenso ante ti.

° Pensé que no te era indiferente, no puedo negar que me gustas y mucho. Renzo es mejor que no nos causemos daño antes de que ...

...Me paro de la cama y siento que Renzo me acerca hacia él...

° No voy a dañarte y tampoco quiero que te alejes de mí, que sea lo que tenga que ser.

Me besa, pero esta vez es la pasión que se siente, me acuesta lentamente hacia la cama y va besando mi cuello.

Siento que su erección va rozando mi entrepierna y eso me causa nervios mezclados con sentimientos claros.

° Soriana te sientes segura...

° Yo quiero que tú seas mi seguridad.

Renzo entra lentamente en mí y me arqueo, sentir su masculinidad hace que me sienta llena de placer. Es tan imponente ante mí, me susurra palabras en mi oído y eso hace que yo quiera más y más, sus movimientos se van acelerando y cada vez estoy más cerca de ... Siento como me humedezca en él... Él me mira y sonríe levemente y aprieta mi trasero hacia su pelvis y se va con todo.

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