Capitulo 1

En un lugar, donde muchos jóvenes asisten por una u otra razón, Aunque el principal objetivo sea estudiar, no todos lo hacen, ya que para algunos es el lugar perfecto para molestar o hacer cualquier tipo de bullying, mientras unos no se dejan, otros sean intocable, a menudo queda alguien que no es capas de defenderse, por no tener el valor, por miedo o simplemente por esperar el momento perfecto para atacar.

_La hija de la asesina._

Grito alguien, haciendo que todos hablaran y gritaran cosas feas a la chica que estaba frente a ellos, tratando de mantener su cabeza agachada, sus puños estaban apretados, sus labios iguales, repitiendo en su cabeza que se calmara, esas palabras se las decía de ella misma.

_¿Tienes sed?_

Una chica, quien era la hija del director, vacío su agua en ella, mientras la chica seguía sin hacer nada, pero esta vez si la quedo viendo a los ojos.

_Ya basta._

Un chico, quién era el Nerdo de la secundaria, tomo a la chica y se la llevó a un salón de clases.

_Estás bien._

_Sí, gracias._

¿El chico se quedó viendo como ella sonreía, acaso era loca? Debería estar llorando y solo sonreía.

_¿No te molesta que te hagan eso?_

_Sí, es muy molesto tener que aguantarme en partirlos en dos, pero ya llegará mi momento._

La chica se quitó la cacheta y uso una que cargaba de repuesto, arregló su cabello y salió junto a él, como si nada pasará, aunque el chico pensó irse, ella no lo dejo, desde ese día, sería su compañero y ella lo cuidaría, esas fueron sus palabras, palabras que hicieron que el chico pensará que estaba loca.

_¿Tu cuidarme a mí? Sí te molestan todos los días._

_Mañana será diferente, solo necesitaba hacer algo y ya está listo._

Busco su teléfono, en el mismo lugar donde la molestaron, con una sonrisa abrió el vídeo.

_¿Eso es para qué?_ 

_Necesito mandarlo al director, solo para que no diga nada mañana._

_No te estoy entendiendo._

_Mañana lo entenderás, por ahora solo ayúdame a buscar a alguien que se lo mandé al director en forma anónima._

_Yo puedo hacerlo._

_¿Tú? Ja, ja, ja._

El chico le quitó el teléfono y empezó a manipularlo, la chica solo veía como estaba concentrado y lo veía con una sonrisa, cuando ya había terminado, le entrego el teléfono.

_Ya está, solo te sugiero que cambies de teléfono, lo pueden rastrear y averiguar de donde fue enviado todo._

_¿Cómo digas, desde hoy nunca te separes de mí, estamos?_

El chico asintió y por primera vez sonrió, le parecía muy tonto lo que decía, para él eran dos chicos que no podían defenderse, solo huir y ya.

Ambos salieron de ese lugar, no sin antes ella sonreír con ansias por el día de mañana.

_¿Hola madre, todo bien?_

_Si cariño._

La mujer curaba su brazo, su hija se acercó y la ayudó, nunca preguntaba nada, pero sabía que era un trabajo que había hecho, era inevitable que no saliera lastimada.

_Oye, mañana puede que te llamen, tú solo pide que quieres que vea clases en casa._

_¿Qué piensas hacer, Eva?_

_Defenderme._

Le puso el vídeo a su madre, quien rápido se molestó.

_Ese viejo mediocre me va a escuchar._

_Tranquila, yo me encargo, no es recomendable que te metas en problema._

Después de tanto, la chica logro convencer a su madre, juntas cenaron y fueron a dormir.

Al día siguiente.

_La hija..._

_La hija de la asesina, ya lo sé, lo que no logro entender, es por qué no sienten miedo, al ser la hija de la asesina._

Eva se quitó la chaqueta, sin dejar de sonreír, viendo a los seis chicos y las tres chicas, que esta vez estaban sorprendidos por su actitud.

_Se te olvidó tu lugar..._

No termino de hablar, la chica le había dado un golpe que lo dejo inconsciente, al ver eso, todos empezaron a querer golpearla, pero sin tener éxito, los había golpeado a todos y por último saco un cuchillo, acercándose a la hija del director, pues las demás chicas se habían ido corriendo.

_Q. Que haces, no me mates._

_Ja, ja, ja, vez, ya dejaste de ser la más ruda, ¿por qué no gritas? Llama a tu papi._

La chica muy asustada Caminaba sobre sus manos, arrastrando sus pies hacías atrás, mientras Eva se acercaba con el cuchillo, moviendo sus manos en forma de burla, les había aguantado un año entero sus maltratos y humillación.

_Eva…_

_Mason, holaaa._

El chico nerd se acercó, no podía creer lo que veía, estaba en shock, Eva se cansó de ver a la chica asustada y la dejo quieta.

_Gracias por la función._

Hizo una reverencia y se fue con el chico quien seguía sin decir nada.

_ Habla hombre, me tienes asustada.. _

_¿Asustada? ¿Es una broma? ¿Acabas de darle una paliza a todos y me dices eso? Asustado estoy yo._

La chica se echó una carcajada y lo abrazó subiéndose sobre él, para qué la llevará en su espalda, a regañadientes la cargó.

_Te dije que seré tu guardiana._

El chico solo sonrió y la cargo hasta su casa, que no quedaba lejos, al llegar su madre la esperaba con los brazos cruzados, ella solo se acercó a besarla y darle el teléfono donde estaba la grabación.

_¿Y este niño?_

_Mi novio._

El chico se asustó, pero ya la mujer sabía que no era así, solo lo hacía para molestar y asustar al chico.

_Bueno, soy emmeline, espero mi hija no te cause problemas._

El chico asintió sonriendo con miedo.

Europa

Un guapo chico de solo 17 años estaba en su mejor momento en carreras de auto de Fórmula 1, ganando varios trofeos y campeonatos, pero la celebración no estaba completa, aunque su mejor amiga estaba a su lado.

_Siiiii, lo lograste, lo sabía._

_Gracias Bessie, agradezco mucho tu apoyo._

El chico abrazo a su amiga, quien estuvo a su lado desde que decidió ir a ese país.

_Tu padre..._

_No quiero hablar de él, no me llamó el día del aniversario de la muerte de mi madre._

_¿No crees que tiene una excusa?_

_No lo creo y no me importa oírla.._

Los días pasaban y la amistad de Eva y masón era cada vez más fuerte, ella conoció a su abuela quien estaba muy enferma, supo de sus trabajos de computación, así fueron pasando los días hasta que llegó la fecha de sus 15 años, por otro lado, Jesús David estaba por cumplir sus 18, su amiga Bessie lo apoyaba en todo y aunque trataba de animarlo hablar con su padre, él no aceptaba.

Pero ninguno pensó que sus vidas cambiarán por completo, ambos sufrirían tanto que sus vidas ya no sería la misma por un largo tiempo y cada uno tomaría rumbos y decisiones distintas, aunque solo el tiempo y destino, tendrían la última palabra.

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