CAPITULO 17

Zoé era un joven fuerte, su orgullo podía más que cualquier cosa y por esa razón no derramo ni una sola lagrima, se paró como una mujer digna, en ese momento con una voz seria dice.

• Padre, eres tan inhumano, tan irracional, que no me dejas otra salida y aun que yo no deseo estar casada, lo voy a hacer, por mi culpa no se va a derramar una sola gota de sangre de algún inocente; papá, voy a orar por la salvación de tu alma, para que el día que nuestro señor Dios te llame a su lado, te reciba con los brazos abiertos, porque a pesar de todo, te amo.

Zoé voltea a ver a Lín, por un momento espero algo de ayuda de su parte, una seña para hacer algo e impedir ese matrimonio; pero esos pensamientos se fueron cuando mira su enorme sonrisa en su rostro, divertido con lo que pasaba y su mano extendida ofreciéndole la pluma.

No le quedo más que tomar esa pluma arrebatadamente, después solo firma el acta de matrimonio, una vez que Derek se aseguró que su firma estaba bien bajo el arma, puso una enorme sonrisa y grito de emoción.

• Por fin somos familia Nil, tu hijo y mi hija ya son esposo; Lín querido hijo político, por favor besa a tu novia, sella esta boda de una vez.

Todos pusieron cara molesta, pero Lín puso una enorme sonrisa y sin que nadie se lo esperara, sorprendiendo a Zoé pega sus labios a los de ellas, mientras sujetaba sus manos para que no pudiera moverse o darle una bofetada; fue un beso largo, Nil tuvo que pedirles que se separaran, con el pretexto de felicitarlos, él fue el primero en felicitarlos, primero abrazo a su hijo y después a Zoé, en ese momento que la abrazo como si fuera su padre tratando de consolar a su hija, siente como la joven estaba temblando, como sus ojos se miraban tristes y por alguna extraña razón sintió que ella si acepto ese abrazo paternal, como si realmente sintiera su apoyo.

Nil sintió tristeza por la joven solo pensaba que de alguna manera tenía apoyarla, pero en ese momento solo le quedaba hacerse un lado y dejar que Derek hiciera lo que quisiera hasta llegara a sus terrenos, ahí todo tenía que cambiar todo; el siguiente en felicitarlos fue Derek, aunque el abrazo que su hija le dio fue rápido y con molestia, después siguió Sahara.

Ella fue cariñosa tanto con su hijo como con la joven, pero en el momento que abrazo a Zoé la escucha decir.

• Señora, discúlpeme, por haber sido grosera, no ha sido mi intención faltarle el respeto a usted; yo sé que ese señor es su hijo, pero tiende hacer un irrespetuoso y no me gusta las libertades que se toma al estar conmigo, su falta de respeto es tan…

Sahara sentía que era una linda y buena joven, no dejo que terminara de hablar cuando le dice.

• Zoé, hermosa joven, que por una mala jugada del destino para ti hoy te conviertes en mi hermosa y dulce hija política, no tienes que disculparte; yo, estoy ya avergonzada con la actitud tan negativa de mi hijo, que tus disculpas solo me hacen sentir peor, hija, mi hermosa jovencita, por favor trata de confiar en mi yo voy a tratar de darte mi apoyo y voy a tratar de evitar que mi hijo te lastime, tu no te mereces esto.

Las dos se dan un largo abrazo, después se van acercando a felicitarlos los demás miembros de su familia; cuando las felicitaciones terminaron, Derek corrió al juez y le exigió tener el acta de matrimonio para el día siguiente, algo que solo aumento el miedo del pobre hombre, que salió de la casa con los nervios destrozados, blanco por el susto, el pobre hombre termino en el hospital, alterado por todo lo que había pasado en esa casa.

después del que el juez se retiró, Derek ordeno traer el champan, los hizo brindar a todos, pero los único que alzaron sus copas con alegría, fueron él y Lin, los dos se miraban felices por ese matrimonio, mientras que todos los demás los miraban y apenas si tomaban de sus copas; pero la que ni siquiera alzo su copa fue Zoé, estaba demasiado triste, pensando en lo que acababa de pasar, en lo que seguía después, en que sus sueños se habían terminado ese día.

Zoé discretamente limpia unas lágrimas que tercamente salieron de sus ojos, lo hizo de tal manera que nadie se dio cuenta, todos estaban viendo a Derek y a Lin, que empezaron a cantar una canción de amor, pero a la vez de esas machistas, donde el hombre se impone sobre la mujer.

Después de que cantaron tres canciones, todos se fueron a la mesa donde comieron y siguieron bebiendo; Mariela al ver a Lin tan feliz, sintió la necesidad de unirse a ellos y festejar, a pesar de que no entendía por qué lo hacía, pero los demás miembros de su familia los ignoraron, se enfocaron más en Zoé, que apenas si estaba comiendo, que, a pesar de su postura tan fina al estar sentada, se podía ver su tristeza, algo que a toda la familia de Nil le causo tristeza.

Todo el día se la pasaron juntos festejando el matrimonio, Derek había preparado algunas cosas para festejar, primero el brindis, después la comida, los llevo al laberinto donde hizo jugar a todos a encontrarse y a salir de ahí, después los llevo al área de tiro al blanco con flechas, Lin era bueno para usar el arco, les dio una gran demostración, haciendo que todos se emocionaran.

En la noche Derek los llevo más allá del laberinto, ahí estaba un lago bastante grande, donde los hizo disfrutar de un espectáculo de juegos pirotécnicos; para Derek ese día era realmente especial, hizo que algunos periodistas estuvieran presentes durante todo el día, claro eso fue después de la firma del acta de matrimonio, tomaron fotos de las dos familias compartiendo ese momento supuestamente con alegría, aunque el que más feliz se miraba era Lín, parecía que realmente se casaba enamorado, feliz de ese momento, que para muchos sería el más feliz de sus vidas.

Zoé estaba tan desconsolada, tan triste por tener que estar con un hombre al que no amaba, su padre y Lín no dejaban de hablar de la gran noche que iban a tener, del momento más esperado de esa boda, sobre todo para Derek, que ya ansiaba la sorpresa de su nieto; Lín se daba cuenta de la tortura que Zoé estaba pasando y apropósito hacía que Derek, hablara sobre su noche de bodas, del su deseo de tener ese nieto o nieta, que ya ansiaba tener en sus brazos, eso solo lo hacía para molestarla, para insinuarle de manera indirecta que le esperaba esa noche.

Ella trataba de ignorar de sus platicas, que hasta indecentes llegaron hacer, Nil tuvo que pedirle algo de respeto para las mujeres de su familia, que estaban ahí con ellos; Derek y Lín se disculparon con ellas, pero Lín volteo a ver a Zoé, descaradamente le sonrió, hasta le hizo una seña con sus labios de deseo, la miro de arriba abajo con deseo y lujuria, todo lo hacía para molestarla.

Sahara a las 9:30 pm se despidió de todos, quería regresar a estar con su hija Lía, sentía que ya había cumplido con ese compromiso, que no le encontraba sentido, pero lo que más le molestaba era ver a su hijo tan feliz, como si realmente fuera el interesado en que todo eso pasara, mientras que la pobre joven tenía una mirada tan triste, como si estuviera en su propio velorio; Nil estaba igual que Sahara y también se retiró con junto con ella, se sentía arto de todo ese falso teatro.

Derek a provecho ese momento para hacer que Lín se llevara a Zoé a su habitación, según él ya era hora de cumplir con su obligación de marido y mujer, consumir ese matrimonio como tenía que ser; Lín al escuchar lo que decía puso una enorme sonrisa, hasta abrazo a Zoé de la cintura, algo que ella no se esperaba y mucho menos quería quedarse a solas con él, estaba tan sorprendida de que su mismo padre estuviera incitando a ese hombre desconocido a que cumpliera con un deber que ella no deseaba, no quería cumplir, porque ese matrimonio, para ella no tenía valor.

Lín no dudo en hacerle caso a Derek, rápidamente la tomo del brazo, se despidió de todos, para llevarla a la habitación que le indico Derek; Zoé literalmente estaba siendo arrastrada por Lín, que la llevaba agarrada de la mano, jalándola con algo de fuerza, porque, por voluntad ella no pensaba caminar.

Entraron a la habitación y Lin cerró la puerta con seguro, eso altero un poco a Zoé, empezó a caminar hacia atrás, sin dejar de mirarlo, buscaba alejarse de él, tenía miedo de que ese hombre frente a ella hiciera lo que su padre le ordeno y terminara violándola; Lín tenía una enorme sonrisa, empezó a caminar hacia ella, con pasos lentos hasta que la aprisiono.

Ella pego su espalda a la pared y el quedo frente a ella, trago saliva con fuerza, estaba realmente asustada, pero tenía que ser fuerte, en ese momento con su voz temblorosa le dice.

• Mi padre está mal, por favor, señor, no lo haga, esto no está bien, obligar a una dama a tener intimidad no es de un buen caballero.

Lín toma un mechón de su cabellera, lo acerca a su nariz para oler su hermoso aroma, era dulce y refrescante, como el aroma de una flor de noche, tenía una enorme sonrisa seductora, no dejaba de ver sus ojos, mientras la escuchaba hablar; él no era tonto, se podía dar cuenta de lo nerviosa que estaba o mejor dicho de lo asustada que se encontraba, hasta el punto de estar temblando y no podía ocultarlo.

Él en ese momento no le contesto nada, se quedó solo mirándola, recorriendo su cuerpo con la mirada, jugueteando con ese mecho de pelo que aun sostenía con su mano y cuando más desesperada la miro le empezó a decir.

• Zoé, eres una mujer atractiva, tengo suerte de casarme con una mujer que posee un cuerpo tan apetecible como el tuyo, mira ese pecho bastante grande que tienes, esa cinturita tan pequeña que tienes y aunque no e mirado tus piernas, casi puedo asegurarte que tienes unas carnosas piernas; yo si quiero comerte completita, voy a pasar mis manos por todo tu cuerpo, pero sobre todo pienso recorrerte con mis labios y lengua, voy a probarte, esta noche con todo lo que pienso hacerte seguro te dejo embarazada.

Zoé se sintió molesta, no le gustaba nada que la estuviera tratando de intimidarla, eso era lo que ella pensaba y con una voz enfurecida le grita.

• Hablas con tanto desparpajo, que no creo que seas un caballero, mi padre ni cuenta se da que me ha casado con un baladrón, que se aprovecha de las personas más indefensas, eres un despótico; pero desde horita te lo advierto, no pienso quedarme quieta, no pienso servirte como mi padre lo quiere, pienso pelear, aunque termines lastimándome.

Lin se empezó a reír con ganas, podía ver como trataba de ser valiente pero la realidad era que no dejaba de temblar de miedo y eso lo divertía; él se retira de ella, fue directamente a una mesa alta donde estaba una botella de champan y dos copas, sirvió el champan en las copas, aprovecho que ella buscaba en el lugar algo para defenderse, para poner el líquido del frasco que su amigo le entrego, mientras ella no lo miraba.

Al tener la copa preparada especialmente para ella, voltea y la mira parada aun lado de la cama, queriendo tomar la lampara que estaba en el buró; Lín se apresura a llegar a ella, antes de que tomara la lampara toma su mano, la hace que voltee a verlo, la sienta en la orilla de la cama, en ese momento pone la copa en su mano y con una voz seductora tranquila le dice.

• Zoé, cálmate un poco, vamos a tomarnos esta copa de champan, para relajarnos y hablar un poco, tal vez podremos llegar a un buen acuerdo o simplemente nuestros cuerpos se relajen, se puede hacer más fácil este gran momento de entrega.

Zoé se le queda mirando aunque sentía algo de insegura, tomo la copa sin nada de ganas, se quedó sentada en la orilla de la cama, mientras él tomaba su copa, cuando vuelve a sentarse a su lado, él le propone brindar; ella no le contestaba nada solo se le quedaba mirando, estaba a la defensiva, en ese momento pensaba “si te arrimas te rompo la copa en la cabeza, ni creas que esto va hacer que yo me entregue a ti voluntariamente, esta matrimonio para mí no es válido; este señor frente a mí, me hace exasperar, no me gusta nada que este frente a mí, como quisiera alejarme de él” sus pensamientos fueron interrumpidos cuando el sostiene su mano y con una enorme sonrisa seductora, le dice.

• Zoé, vamos tómale a tu copa, tienes que relajarte un poco, si sigues así te puedes enfermar y aparte no podremos hablar con tranquilidad, estas muy a la defensiva, así no se puede llegar a un buen acuerdo, que nos beneficie a los dos; creo que deberías tomarte la copa, para que podamos entendernos un poco.

Zoé no confiaba nada en él, quita su mano de la suya, no quería tenerlo cerca y mucho menos quería que la tocara, pero sus palabras la hicieron sentir un poco de confianza y al verlo tomar su copa de champan, ella también hizo lo mismo, sentía tanta sed, se sentía tensa, que pensó que eso la podía relajar un poco; ella dio un trago muy largo, casi se termina la copa, le quedo si acaso medio trago, confiando en él, pensando que realmente quería hablar.

Pero cual fue su sorpresa en cuanto termino de beber, se empezó a sentir mareada, débil, tanto que la copa se cayó de su mano, estaba por irse hacia adelante, para caer al suelo, cuando él la sostuvo; se acercó tanto a ella, empezó a dejar sus besos en su cuello, acariciar su pecho, ella apenas si tenía conciencia, sentía la necesidad de aventarlo, pero no tenía fuerza y sentía que sus ojos se cerraban, en ese momento escucho a lo lejos.

• El afrodisíaco es realmente fuerte, ya verás que vas a disfrutar de esto, pienso hacerte mujer, vamos a hacer de todo, tanto que seguro saldremos tres de esta habitación.

Zoé apenas si podía levantar sus manos, sentía una pesades y sus ojos se empezaron a cerrar como si tuvieran pegamento, lo último que sintió, fueron las manos de él en su espalda, bajando el cierre de su vestido, sus manos frías en su espalda desnuda, sus labios en el cuello y después de eso no supo que más paso.

Eran las 8:30 am cuando ella despertó, se sentía cansada, aturdida, sentía que todo su cuerpo le dolía, su cabeza le dolía muchísimo; se levanta de la cama y en ese momento se da cuenta que estaba completamente desnuda, rápidamente toma la sabana de la cama para taparse, pero al descubrir la cama mira una enorme mancha de sangre en la cama, voltea a ver su entre piernas y mira sangre en sus glúteos aun lado de su feminidad.

Ella suelta la sabana y lleva sus manos a su boca, sus ojos se llenaron de lágrimas, no necesito ser adivina para saber lo que Lín le había hecho; la había drogado y se provecho de ella, eso la destrozo, se dejó caer al suelo, llorando con una tristeza un dolor; lloro por largo rato y cuando por fin pudo calmarse un poco, se dio cuenta que estaba sola y eso lo sintió como un alivio, pero del llano paso al enojo, a la furia, se levantó, tomo su bata de dormir, se la pone, era larga, hasta llegar a sus tobillos, de manga larga, cuello redondo, bastante gruesa, que bien podría ser un vestido.

Una vez que se puso algo tomo el forro de la cama ensangrentado, lo hizo puyo y salió de la habitación, le pregunto a una de las empleadas que se encontró a unos pasos de la habitación ¿Dónde está mi padre? la joven le dijo que estaba en el comedor desayunando con toda la familia.

Ella se fue directamente al comedor, estaba por cruzar la puerta cuando escucha a Lín presumiendo lo que le había hecho, hablando de lo mucho que la había disfrutado, de lo buena que estaba; pero lo que más la sorprendió fue, que su padre no le creía, que le decía, que hasta no ver a su nieto lo iba a creer y seguido de eso se escucharon las risas de Lín, divertido por lo que Derek le decía.

Zoé estaba molesta, furiosa con su padre, por habérsela entregado a ese hombre, por dejar que abusara de ella, por entregarla a un hombre tan ruin; entra al comedor y todos se quedaron sorprendidos, al verla, sus ojos no dejaban de derramar sus lágrimas, su cuello estaba lleno de los besos de Lín, hasta donde estaba su cuello se lograban ver algunos besos, en ese momento ella le tira a los pies el forro ensangrentado a los pies de su padre y le grita con una voz llena de dolor.

• Aquí esta tu maldita prueba, era esto lo que querías, sabes lo que hizo ese mangante, me drogo y abuso de mí, fue violada de una manera ruin, por un cenutrio, cutre; padre, como puedes festejar algo así, como pudiste permitir algo así, soy tu hija y le pediste a ese agreste, que lo hiciera, como si yo no importara, como si no tuviera sentimientos, no es justo padre, yo tenía mi sueño, pero tú me arruinaste junto con ese abyecto ¿Por qué lo hiciste padre?

Todos se le quedaron viendo, escuchando lo que decía, podía sentir su dolor, su tristeza en su voz y sus lágrimas que no dejaban de salir, hasta sus manos temblaban con cada palabra; Nil se sentía molesto con su hijo, simplemente no esperaba que él llegara hasta ese extremo, nunca se imaginó que terminaría violándola.

Sahara estaba igual que Nil, dolida con su hijo, por lo que había hecho, se suponía que nada de eso iba a pasar y ahí estaba viendo a la pobre chica destrozada, por lo que seguro su hijo la había lastimado; pero el coraje de todos solo aumento cuando vieron a Lin, divertido viendo a Zoé, con una enorme sonrisa, como si lo que hizo no tuviera nada de malo.

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