CAPITULO # 1

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Soy Isabel silver Guerrero tengo 28 años, mido 165 mts, tez blanca y ojos verdes, cabello rubio castaño.

Ya terminé mi carrera de arte y arquitectura, me fascinan esas carrera.

Aunque, no tengo la dicha de tener a mis padres, por que desafortunadamente ellos fallecieron en un accidente automovilístico, cuando estaban de vacaciones. Era una niña de 13 años mis abuelos me criaron, al igual que mi hermano, han cuidado mi herencia todos estos años.

Mis padres, nos dejaron todo su capital están invertidos en acciones, en muchas empresas, así pasaba más tiempo con sus hijos.

Mi hermano mayor, está en el ejército y ya tiene su propia familia, siempre está pendiente de mí, y eso me alegra, cuando mis padres fallecieron él hacía parte del ejército, compartimos las ganancias de cada inversión.

Mi hermano, menor falleció con mis padres en el accidente.

Conocí a mi esposo, en un restaurante, ese día estaba cumpliendo años, y mis abuelos me dieron una cena en un lujoso restaurante.

Él, me miró y me regalo una sonrisa sexi, me derretía con esa sonrisa, me sonrojé porque no le quitaba la mirada de encima, mi mejor amiga llegó y nos presentó, porque ellos se conocían de la infancia.

Maira _ amiga te lo voy a presentar ven, mi amiga me llevo arrastra dónde él estaba con unos amigos.

Maira _ buenas noches, muchachos disculpen la interrupción, pero vengo a presentarles a mi mejor amiga.

Isabel _ se sonrojó de pies a cabeza, todo se reía, ya que mi amiga maira siempre es loca y extrovertida.

Milán_ se levantó como todo un cabello tomo mi mano _ para mí es un gusto conocerte el día de hoy, en el dorso me dejó un beso, me llamo Milán y ¿tú?.

Isabel _ sonrojada mucho gusto Isabel.

Maira _ amiga deja de ser tímida, mi amigo está para comérselo a besos.

Todos reían incluidos mis abuelos.

Milán _ Mai ¡déjala en paz ella no es como tú!.

Maira _ ustedes todos son unos aburridos, lo que pasa es que mi amiga es muy tímida y necesita socializar con jóvenes de nuestra edad.

Y mi amiga está de cumpleaños número 28.

Todos me felicitaron, mis abuelos se acercaron dónde estábamos todos y traían un pastel.

Me cantaron la canción de cumpleaños, compartimos entre todos el pastel, al retirarme del restaurante, compartimos números telefónicos.

Desde ese día, comenzamos a tratar más seguido, me invita a cenar, ir al cine, me recogía en la universidad.

Hasta que paso un mes, paso por mí a la universidad, ese mismo día se me declaro y me pidió ser su novia.

Me sentí la mujer más feliz del mundo, le dije que si, al ser muy tierno y respetuoso me pidió permiso para darme un beso, y le confirme.

Fue mi primer beso, no sabía hacer nada y torpemente le correspondía.

Él, se dio cuenta y me fue guiando, tomo mis brazos, las paso por el cuello y me acerco a él, me sentí incómoda, ya que nunca había estado a solas con un hombre y menos intimidando

Así él tenía más ascenso a mi boca, y fui tomando el ritmo, sentí sus manos acariciando mi espalda, me tensé y enseguida lo empujé.

Me coloqué nerviosa porque lo había ofendido, pero no fue así, me regaló una cálida sonrisa.

Milán _ no te preocupes, no me ofendiste, discúlpame por verme pasado contigo.

Isabel _ no, es eso nerviosa lo que pasa es que es mi primer beso. Y me tapo la cara.

Él toma mis manos y le da un beso en cada mano.

Milán _ me siento el hombre más feliz del mundo, por haber tenido el privilegio de recibir tu primer beso.

Me sentí tranquila ya él me comprende mi amiga Maira, siempre me cuenta su vida íntima, dónde disfruta. Con cualquiera, dónde sea.

El tiempo pasó rápidamente y estábamos, cumpliendo un mes de novios, me invitó a una cena, me fui muy emocionada, me vendo los ojos, cuando llegamos a mi sorpresa, estábamos en una hermosa cabaña.

Todo está hermosamente decorado, con flores, velas, chocolates y una botella de vino.

Me giro sobre mis talones, le doy las gracias, me empino y le doy un casto beso, él me toma de la mano y me lleva a unos cojines en el piso, me da fresas con chocolates, y una copa de vino.

Hicimos un brindis y él comenzó a darme besos, estaba muy romántico hasta que comenzó a bajar por mi cuello, lo detuve enseguida.

Isabel _ lo siento, no estoy preparada y apenas tenemos un mes de novios.

Milán _ lo entiendo, no va a pasar nada que tú no quieras.

Seguimos disfrutando hasta que mis abuelos, me llamaron y pedí que volviéramos, ya que era muy tarde, Milán enseguida entre lazo nuestra mano y me llevo a casa, nos despedimos con un beso.

El tiempo pasó muy rápido y estábamos cumpliendo tres meses, ese día me invitó a una cena familiar, se me hizo extraño ya que casi nunca hablaba de ellos.

Al terminar la cena, veo que se arrodilló y saca una caja de terciopelo rojo, con un diamante pequeño, pero sencillo,me fascina no dude en decirle que si.

Me coloco el anillo y me lance a sus brazos.

Mis abuelos aprobaron el matrimonio y mis futuros suegros también. Que decidieron que la boda fuera lo más pronto posible en seis meses.

mis suegros lanzaron la noticia en la prensa, mis abuelos no estaban de acuerdo ya que mis padres siempre fueron muy reservados con su vida privada.

Mi hermano al enterarse, no estaba feliz por una boda tan repentina, y menos en un corto tiempo.

le rogué para que aceptará nuestra unión por el bien de mi corazón.

A regañadientes acepto, pero me lo dejo muy claro no iba estar presente, con dolor en mi corazón lo acepte, el era lo único que me quedaba de mis padres aparte de mis abuelos.

A pesar de todo me dió un regalo, que acepte sin dudar era un apartamento amueblado bien ubicado, con mucho arte, en seguida le avisé a Milán y estaba muy feliz por el regaló de mi hermano.

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