Capitulo 7

Al día siguiente Evangeline se levantó bien temprano y su sorpresa fue encontrarse en la puerta a su amiga lista para cuidar a su pequeña hija.

-Pensé que llegarías más tarde – le dijo sorprendida

-Debes llegar temprano a tu nuevo empleo y esa pequeña no puede quedarse sola, así que aquí estoy lista para lo que se me necesite – entró a la casa y Evangeline tomó un taxi hasta el hospital.

Al llegar al hospital la estaba esperando el director Venegas quien era el director del hospital, era un hombre de unos cuarenta años, de estatura media y bastante cordial, Evangeline lo saludó y le agradeció por que la habían llamado para comenzar a trabajar y él estaba entre los entrevistadores de aquel día.

El directo le dio una breve explicación acerca del hospital, que hacia y su historia para después llevarla a Recursos Humanos donde le darían oficialmente su ingreso, una chica muy amable la atendió, Evangeline debía trabajar entre la sala de emergencias y el quirófano, solo los días viernes haría consultas.

-Será un trabajo difícil, pero como ya tienes experiencia clínica creo que podrás manejarlo fácilmente – le comentó la chica

-No te preocupes voy a dar lo mejor de mi para hacer el mejor trabajo posible – respondió alegremente

-Casi que fuiste eliminada de los candidatos, pero una decisión a nivel gerencial lo cambió todo – no podía creer lo que le decían ¿habría sido él quien la contrató o habrá sido su hermano?

Quería agradecerle a Joshua, pero se quitó la idea de la cabeza ya que si no había sido él entonces se sentiría avergonzada, así que fue a cambiarse de ropa para comenzar a trabajar.

El trabajo de cualquier hospital siempre tiene una gran intensidad, aunque el primer día no tuvo mucho que hacer el segundo día tuvo muchísimo trabajo, tanto que al final de la jornada estaba agotada, tuvo que realizar numerosas operaciones por un accidente de colisión que hubo.

Cuando salió del quirófano era casi de madrugada y después de quitarse la ropa esterilizada solo pudo sentarse en el suelo para descansar, sacó su teléfono y vio que tenía un montón de llamadas de Lizy, solo pudo enviarle un mensaje para decirle que no volvería esa noche a casa.

Con las pocas fuerzas que tenia llegó a la habitación del hospital dispuesta para el personal médico y sin siquiera cambiarse de ropa se quedó dormida.

Al dia siguiente la despertó un mensaje publicitario en su celular el que decía “Allen’s International Company ha llegado a ciudad M para convertirse en la primera empresa de entretenimiento del país”

No sabia que la empresa de Joshua había ingresado al mercado del entretenimiento, cuando ella le dijo a él que quería ser cantante le había ofrecido crear una agencia solo para ella y no esperaba que después de tanto tiempo lo hubiera hecho, a lo mejor era Cindy Terrás la principal estrella de esa empresa.

Se levantó, se duchó y tenia un leve dolor de cabeza, luego de cambiarse de ropa salió a comenzar las labores del día, ese día le tocaba consulta médica, varias enfermeras se reunieron a su alrededor para felicitarla por el excelente trabajo realizado el día anterior, su corazón se llenó de alegría al sentir la admiración de sus compañeras.

Fue a desayunar y apenas se sentó a comer una enfermera se le acercó para avisarle que el director Venegas la estaba buscando para algo urgente y pensó que si la estaban buscando tan temprano era por algo de gran importancia.

Comió todo lo rápido que pudo y salió casi que corriendo de la cafetería con un jugo en la mano, no vio el camino y chocó con alguien derramando todo el contenido del vaso sobre la otra persona.

-Lo siento, que pena con usted – su pena fue en ascenso cuando vio que la camisa blanca del caballero con quien había chocado estaba totalmente de otro color

Estaba tan mojada que se había pegado a la piel y notaba sus músculos desde donde estaba, intentaba limpiarlo sin lograr otra cosa que empeorar la situación le pasaba las manos por el pecho tratando de eliminar el líquido derramado.

-Doctora Fraser no es apropiado que pase sus manos por mi pecho de esa manera en público, las personas pensaran que me está seduciendo – cuando escuchó la voz del hombre quiso que la tierra se abriera y la escupiera en otro lugar

Levantó la cabeza para darse cuenta de que era nada más y nada menos que Joshua, no podía ser que este hombre estuviera en todas partes a donde ella iba.

-No lo hice con segundas intenciones, no lo describa de esa manera - estaba entre apenada y avergonzada

-Podría levantarse para que pueda irme – Evangeline se levantó tan rápido como pudo y sentía que su cara estaba totalmente roja

-Dañé tu camisa, dime cuanto te debo – él sonreía sin ganas

-No se preocupe, solo tenga más cuidado la próxima vez que vaya por los pasillos del hospital, a otra persona a lo mejor le haga algún daño – él también se levantó y siguió su camino como si no hubiera sucedido cada

Ella se quedó viéndolo desaparecer por el pasillo, se preguntaba así misma en que momento ese hombre se había vuelto tan molesto, ¿seria así con todos los demás?, se arregló su uniforme y fue directo a la oficina del director.

-Buen día director Venegas me dijeron que me estaba buscando – le dijo apenas entró a la oficina

-Si doctora, es que le tengo una cosa importante que pedir, siéntese por favor – le mostró una silla delante de su escritorio

-¿Ha oído hablar del señor Joshua Allen? – Envangeline asintió con la cabeza y sintió su corazón saltar de la emoción

-El señor Allen tuvo un accidente automovilístico grave hace seis años y desde que su hermano se encargó de este hospital viene aquí una vez al año a realizarse sus chequeos pertinentes, su hermano nos ha pedido que le demos la tarea a los mejores médicos y después de tu excelente labor estos días quiero darte esa tarea a ti

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