Merienda Familiar explosiva

Isabella Belmonte

Después de un exquisito almuerzo con mis hermanos, decidí hablar con el chef, chocando con una sorpresa muy agradable, el magnífico hombre del hospital es quién con sus manos hace excelente trabajo. Por supuesto que estaba contenta y no iba a disimularlo. Según sus palabras, él me recuerda y yo no mentiría.

La reseña la hice a penas llegué al restaurante, donde todavía estaban modificando algunas cosas, pero mi oficina estaba disponible, por lo que agarré la computadora y disfrute cada palabra escrita. No sólo por la decoración o atención, sino por mi futura cuñada y por el dueño, mandándole a ambos un claro mensaje.

La reseña ya estaba hacía dos horas en línea, cuando Bastian me llamó al celular y supongo que es porque lo vio.

📱Hermanito...

📲 ¿Por qué escribes eso? ¿Sabes la humillación que me haces pasar? — bufó malo

📱Bastian, no dije con cuál de mis hermanos la quería a ella.

📲 Pero ella sabe que es por mí— Dijo con su voz temblando

📱¿Y? ¿Qué tiene? — Jugué con sus nervios— Puedo pensar que tú timidez va más allá de la vergüenza, ni que nunca hubieses tenido una mujer — El silencio fue absoluto y caí en cuenta— ¿Bastian, has tenido mujer o sigues virgen?

📲 A ti no te importa — Dijo enojado y Cortó la llamada.

Sigue virgen, está más claro que el agua. Con razón su personalidad. Él tan serio y preocupado en la empresa cuando ni siquiera se ha molestado en vivir su vida. Ahora entiendo por qué se sonrojó con la presencia de Ariam.

En cambio, Emilio ya nos hizo tíos, Dios mío, ¿Qué haré con estos chicos?

Siento que el peor será Federico, es mucho más atrevido, se preocupa por el ejercicio y sus "músculos" marcados. 17 años y es todo un playboy que disfruta ver a las chicas detrás de él, aunque no les dé importancia.

...

Saliendo del Restaurante, fui a la mansión y entré al comedor donde todos ya estaban por merendar.

— Buenas tardes, familia — Llamé su atención y varios me miraron, pero no emitieron ni un sonido. —¿Pasó algo? — Pregunté sentándome al lado de Marina.

—¿Se puede saber que tipo de reseña diste hoy? — Preguntó papá muy serio.

Mis ojos enseguida se dirigieron a Bastian, no podía creer que por nombrar a la chica, él vino a "llorarle" a nuestros padres.

—Una muy sincera, ¿Por qué? — no voy a retractarme.

— ¿Sincera? ¡Hablaste del chef y su hermosura! — Dijo papa tensó.

— ¡Ahhh! ¿Es por eso? — Puedo entenderlo mejor — ¿Estás enojado porque dije que el hombre es hermoso?

—¿Te parece poco? Eres una niña y no debes fijarte en esas cosas. —Dijo mi padre celoso —Además, es un señor.

— Ya no soy una niña, papi, aunque tú me veas así.— Le hice ojitos de cachorro para agregar lo siguiente— Y no, no es un señor, tendrá treinta años, más o menos.

— Hija, no digas eso que me dará un infarto. Tú eres mi bebé y no vas a elogiar un viejo de esos.

— Sí él es viejo, ¿Qué eres tú? —Defendió la abuela Fátima, llegando a la mesa con su bastón.

—¡Mamá! — exclamó derrotado — Ese hombre podría ser su padre.— Exagero

— Pero no lo es, aunque si gusta, puede decirle "papi" sensualmente — Agregó la abue

Papá estaba de muchos colores, aunque el que predominaba en su cara es el blanco, y a veces se pone un poco difícil hacerlo entrar en razón.

— Juro que me dará un infarto por culpa de mis hijas, pero más por ti, mamá— Papá Brandon hacía gestos bastantes chistosos y no aguanté la risa.

Marina me agarró la mano y creí que era para hacerme callar, pero ella hizo explotar una bomba.

— Tengo novio — Dijo provocando que todos quedemos en silencio.

—¡LO QUE FALTABA! —Gritó Papá— Emilio embarazó a una joven, Bella siente atracción por un viejo y tú, jovencita, con noviecito— Nos señaló a cada uno — Aquí solo se salvan mis muchachos, Isaías, Bastian y Federico.— Dijo con orgullo.

— Yo diría que solo Isa, porque Bastian tiene quien le quite lo santo con un simple mensaje y Fede es bastante mujeriego. — Si yo cargo, caemos todos, por no defenderme.

—¿Cómo qué mujeriego? —Exclamó mamá— Eso no les enseñamos.

—Bueno, no nos enseñaron a protegernos tampoco, ya que Emi olvidó esa parte — Dijo Fede riéndose

— Lo dice quién es virgen — Contraatacó Emiliano.

—Preferible ser virgen y no padre— Defendió la santidad, Bastian.

—Otro puro y casto — Bromeó Emilio — Llama a la moza de aquel restaurante para que te enseñe el placer — Siguió.

— Al menos, mis hermanos ya la conocen — Se defendió B.

— Apoyo esa, hermanito— Fede chocó las manos con él.

— Tan serias y calladas que las incitadoras de todo, son Mar y Bella — Tiró Emilio.

—Yo ya me defendí. —Alcé los hombros— Me gusta el chefcito y es mayor que yo.— Confesé y papá golpeó la mesa de la impresión.

—Los apoyo a todos, nietos míos. — Dijo la Abue y mamá asintió — Con hijos, vírgenes, con novios o sin... —Hizo silencio y esperamos su siguiente frase — Existe un mito que dice que los hombres mayores, enseñan cosas que los menores no saben, seguro sentirás placer — Me mira y yo no sólo quedé sonrojada, sino que varios en la mesa estábamos igual

Automáticamente, codeé a mi hermana y ella se animó a proseguir

— Ustedes ya conocen a mi novio — Bajó la mirada y agarré su mano alentándola.

—¿Quién es? — Preguntó mamá.

— Es Marcus, compañero de Bastian en Administración. — Cuando lo dijo, miramos a B y él Frunció el ceño.

— No, un asco de chico, juega con todas porque se cree superior a todos. No estarás con él — Negó nuestro hermano.

— Te juro que cambió — Defendió Mar.

—Sí, de víctima — Atacó B. — Él es un hijo de pu** y te hará sufrir — Mencionó frustrado.

—Para eso estamos nosotros — Dijo Isaías — Sí le rompe el corazón, nosotros le rompemos los huesos — Confesó y todos nos sorprendimos, ya que él es el más tranquilo, típico Nerd de estudios. Además estudia profesorado de Filosofía. ¿Dónde queda eso?

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Isaías

Bastian

Emilio

Marina

Federico

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