Capítulo 8

Una vez más, la falta de compasión de sus padres en un momento tan delicado hizo que Alessandra se sintiera sola. Desde el momento en que decidió tener a su hija, sus dos padres le dieron la espalda, querían que abortara para que le fuera más fácil encontrar otro pretendiente, pero Alessandra se mantuvo firme en su decisión y nunca pensó en quitarle a su hija. Durante todo el embarazo sólo contó con la ayuda de la empleada más antigua de la casa, que era la que la cuidaba cuando era pequeña, y con la ayuda económica de su madrina, que todos los meses le enviaba una cantidad para ayudarla con los gastos y para comprar su ajuar, y desde que Laura nació ha realizado algunos trabajos como consultora financiera, ha trabajado como responsable de analizar los costes de producción y funcionamiento de algunas empresas de la ciudad vecina.

Tras el diagnóstico de su hija, Alessandra quiso saber un poco más sobre su abuelo. Su madre le explicó que su padre murió cuando ella aún era una niña y que no recuerda mucho de él, sólo sabe que perdió el movimiento en las piernas a causa de la enfermedad y que iba en silla de ruedas.

Alessandra se dio cuenta de que después de aquello sus padres se volvieron aún más distantes y evitaban acercarse a su hija, especialmente su padre. Se sintió decepcionada al darse cuenta de que sus padres no aceptaban a su hija y no le ofrecían ningún apoyo.

Había decidido que nunca lo haría, pero dado el diagnóstico de Laura, sin duda él tenía más conocimientos sobre el tema que ella, y aunque no sabía cómo encontrarlo, lo intentaría. La única información que tenía era el pueblo donde vivía, y por suerte era el mismo pueblo donde también vivía su madrina. Alessandra esperaba que, aunque no aceptara a su hija, pudiera ayudarla a encontrar un tratamiento más adecuado para ella. Aunque el médico despejó algunas de sus dudas, el pueblo donde vivía no disponía del tratamiento necesario.

Llamó a su madrina y le preguntó si podía tenerla un tiempo en su casa. A su madrina le encantó la idea y le dijo que podía quedarse en su casa todo el tiempo que quisiera, que ambas serían bienvenidas. Alessandra estaba contenta, y después de hablar con su madrina, decidió poner su coche en venta, y en cuanto lo vendió, recogió sus cosas y se dispuso a ir en busca de una nueva vida, y aunque no encontrara al padre de su hija, ella misma buscaría el mejor tratamiento, investigó mucho sobre el tema y descubrió que se había descubierto un tratamiento revolucionario, que permite llevar una vida normal a quienes se someten a él, y que ese mismo tratamiento se probaría ahora en niños, se llenó de esperanza, saber que su hija podría crecer sin restricciones era todo lo que deseaba.

Alessandra _ (acompaña a su hija mientras juega en la alfombra) ¡Hola, mi amorcito! Mamá tiene que hablarte de algo importante.

Laura _ (mirando con curiosidad a Alessandra)

Alessandra _ (sentada junto a su hija) Sabes, mi amor, mamá está pensando en mudarse a otra ciudad.

Laura _(haciendo una expresión divertida)

Alessandra _ Así es, querida. Nos mudamos a otra ciudad en busca de un tratamiento que te ayude a vivir mejor, con más calidad.

Laura _ (escuchando atentamente)

Alessandra _ Mamá se enteró de que en esa ciudad hay médicos y especialistas que pueden ayudarnos a atenderte con más eficacia. Son muy buenos y tienen experiencia en casos como el tuyo.

Laura _(murmurando algunas palabras)

Alessandra _ Sí, hijita, será un gran cambio para nosotros. Pero quiero que entiendas que todo lo que hago es pensando en ti, en tu bienestar. Quiero hacer todo lo posible para que crezcas feliz y sana.

Laura _ (sonríe ligeramente)

Alessandra _ Además, mi amor, en esta nueva ciudad, vamos a conocer gente nueva, hacer nuevos amigos y tal vez conocer a tu padre, no sé cómo va a tomar esta información de que tienes una hija, tal vez hasta esté casado y tenga otros hijos, y si no te acepta, será él quien pierda a la hermosa hija que eres.

Será una oportunidad para que te desarrolles más y tengas experiencias diferentes.

Laura _(haciendo un sonido feliz)

Alessandra _ Sé que va a ser un reto para los dos, pero quiero que sepas que siempre estaré a tu lado. Esta mudanza será nuestra oportunidad de darte todo lo que necesitas para ser feliz.

Laura _ (mirando fijamente a Alessandra)

Alessandra _ (abraza a su hija) Vamos a afrontar este reto juntas, mi amor. Lo importante es que sepas que te quiero y que haré lo que sea para cuidarte. La nueva ciudad será nuestro nuevo hogar, un lugar donde tendremos todas las oportunidades para mejorar tu vida.

Laura _(sonríe y abraza a Alessandra)

Alessandra _ Gracias por escucharme, cariño. Siempre te explicaré las cosas de la mejor manera posible. Ahora, ¿qué tal si mamá juega un poco más contigo?

Laura _ (haciendo un sonido feliz y agitando los brazos).

A la hora de cenar.

Alessandra _ Esta será mi última cena aquí, mañana me voy de esta ciudad, aquí mi hija no recibirá los cuidados que necesita.

Jonas _ Hija, ¿por qué no das a esta niña en adopción y te vienes a trabajar conmigo a la empresa? La licencia medioambiental está casi lista y pronto empezaremos a extraer mineral de hierro en nuestras tierras, volvamos a ser como antes.

Alessandra _ A veces pienso que no tienes corazón, sólo te importa el dinero y el estatus, nunca le daría mi hija a un extraño.

Rose _ ¿Hija y cómo te las arreglarás con esta chica?

Alessandra _ Me voy a quedar en casa de mi madrina hasta que consiga trabajo, puedo trabajar desde casa como hacía aquí.

Mientras tanto, en el hospital de Barreto, Guilherme va a visitar al médico que lo atiende desde que le diagnosticaron hemofilia. Llama a la puerta y entra.

Dr. Samuel _ ¿Cuándo regresó de su viaje?

Guilherme _ Ayer.

Dr Samuel _ ¿Y todo salió bien?

***Este trabajo esta bajo contratado con NovelToon y la piratería, como la reimpresión sin permiso, están estrictamente prohibidas.***

***¡Descarga NovelToon para disfrutar de una mejor experiencia de lectura!***