MARTIN (CAP. 19)

Ella sube sus brazos y las pone alrededor de mi cuello, mientras mis manos van hacia su trasero y la levanto. Sus piernas se aferran a mi cadera y froto mi erección en ese valle que muero por devorar.

Nos llevo a la cama y la recuesto con suavidad. Con la ayuda del colchón, puedo rozar mas fuerte ese punto delicioso en medio de sus piernas. Estoy perdido en una bruma de placer. Nunca fue así. No puedo evitar pasar mi lengua por el lado derecho de su cuello, el lado que ella misma inclinó para darme espacio.

Sus gemidos llenan mis oídos y soy un hombre poseído.

Hago espacio para que mi mano entre nuestros cuerpos. Rápidamente desabrocho su pantalón, paso por sus bragas húmedas y meto mi dedo en ese pozo mojado de deseo; ocasionando un pequeño grito de placer de ella.

Saco el dedo y bajo su atenta mirada llena de lujuria, la meto en mi boca. Cierro los ojos y un sonido ronco sale de mi garganta.

- Martín...

Mi nombre en sus ricos labios, me saca del trance. Antes de separarme, tocan la puerta y se escucha la voz de una chica.

-** mmm, ¿Cam? Debemos salvar a nuestra amiga, ¿cierto?

Cherry me aparta, se arregla y abre la puerta. Yo necesito un minuto para relajar a mi soldado y salgo. Mis hombres ya le dijeron donde tiene que ir. Me ve salir del cuarto y comienza.

- Vístanse. Entramos en 5. Seguirás mi plan o te vas. No me estorbes. Debo proteger a alguien muy importante para mi.

Se va.

Mis hombres me miran.

* 5 minutos. Andando.

Nos encontramos en un pasadizo paralelo a la suit.

-** Déjame entrar primero. Si hay guardias en la puerta, me encargaré de ellos calladamente y entramos.

- Ve.

Con la aprobación de Cameron, la rubia guarda sus shadow dagger en la espalda baja, se suelta el cabello y camina tambaleándose un poco. De lejos la escuchamos.

-** Chicos, alguno o los dos, ¿podrían ayudarme?

Después, solo silencio.

-** Listo.

Nos acercamos y vemos a dos tipos tendidos en el suelo.

- No tenemos tiempo para sutilezas. Entramos todos, rápido. Nos pegamos a la pared y tenemos nuestra mira en la cabeza enemiga mas cercana. 4, 3, 2...

Hace la señal y su escuadron de 25 entra primero, seguidos por mis nueve. Cuando escuchamos la falta de alboroto, entramos.

Veo la mirada sorprendida de Cruz, parece que no conocía estas facetas de las amigas de Layla. Qué grupito hacen las 3. No puedo evitar sacudirme. Espero que Dios nos proteja.

Cameron y la rubia se quedan en su sitio, mientras Layla llega a un acuerdo con el lider de Oriente. A cualquiera le daría miedo ese hombre, pero veo a Cruz mirarla orgulloso.

Una vez todo queda firmado y sellado, Layla estira los brazos mientras las chicas se acercan a ella para abrazarla, pero ella y yo estábamos equivocados. En lugar de abrazos recibe un par de puñetes en el estomago.

Me quedo sorprendido y Cruz solo sacude la cabeza.

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