Capítulo 15

Llegaron a la prepa y se consiguieron con Karla y Johana que iban entrando también.

Enrique: hola chicas ¿cómo están? (dándole un beso en la mejilla a cada una)

Johana: hola (abrazando a Enrique y dándole un beso)

Carmelo; Hola Karla, hola Johana (saludo con la mano, igual que Karla)

 Karla: hola y chao, a los dos que es tarde, nos vemos a la salida. (nerviosa mirando a Carmelo)

Karla se fue a su salón y los chicos junto a Johana se fueron a clase, a la hora del receso fueron a la cafetería y luego a clases. Mientras Karla tenía el día full, hoy tenía clases de gimnasia, piscina entre otras.Así fueron pasando los días, y cuándo se dieron cuenta habían pasado ocho meses, Enrique y Alicia hablaba en la madrugada o antes de irse a la prepa, en ocasiones él, la llamaba en las horas que tenía libre, ellos hicieron cómo una especie de horario en donde estaban desocupados, solos para hablar y declararse su amor y lo mucho que se extrañaban, él estaba tratando de adelantar materia para irse ante de terminar el año, no le importaba asistir a la graduación, sólo quería estar con ella y él quería darle la sorpresa de llegar aunque sea dos meses antes, pero seguía sin decirle de su pasado a su princesa mimada, Carmelo y Karla, estaban comenzando a tener sentimientos el uno hacia el otro, tenían muchas cosas en común, pero ellos solo se dedicaron únicamente a ser amigos, cada uno había decidido a esperar a su mate.

Karla y Johana le enseñaron todo sobre los lobos, fueron de más ayuda que el propio Enrique. Johana se resignó a que Enrique ya tenía a alguien en su corazón y se dedicó hacer solo su amiga, los cuatros habían formado un grupo incondicional de amigos se llevaban de maravillas, salían a pasear iban a la playa, al parque, se iban de rumba, se divertían muchos juntos.

La madre de karla fue a pasar uno días con su hija, ella estaba feliz, su madre le contó como estaba las cosas por la manada y ella le hablo de sus amigos, Carmelo y Enrique, pero sobre todo hablaba de Carmelo, su madre vio un brillo nuevo en los ojos de sus hija, cada vez que hablaba de ese chico y se asustó.

Madre de karla: princesa ¿te gusta ese chico Carmelo?.

Karla: no madre, ¿cómo crees?, sólo es un amigo.

Madre de karla: corazón a mi no me puedes engañar, soy tu madre te conozco mejor que nadie.

Karla: tienes razón madre, me gusta Carmelo, es un chico lindo, cariñoso , nos llevamos muy bien y nos divertimos mucho juntos.

Madre de karla: ¿sabes que enamorarte sin mate, puedes ser el peor error de tu vida?.

Karla: lo sé madre, me sé la leyenda de memoria, no lo hare, sólo somos amigo, él al igual que yo quiere esperar a su mate.

Madre de Karla: Gabriel te envio una carta, me la entrego hace mucho tiempo y no te la habia quierido dar.

Saco de su cartera el sobre cerrado y se lo entrego a karla, quién lo tomo con sus temblorosas manos y lo guardo en un cuaderno que tenia en la cama.

Madre de karla: ¿no vas a leerla?.

Karla: no madre ahora no quiero saber nada de él, no quiero que arruine mi fin de semana contigo.

Madre de karla: él está esperando una respuesta, va todo los días a casa, ya no se que decirle.

Karla: le darás la misma respuesta de siempre.

Madre de Karla: acuérdate que debes volver para tu transformación.

Karla: madre, no me lo recuerdes, todavia falta mucho para eso.

Pasaron el fin de semana entre salida, Karla le presento a sus amigo y su madre entendio por que Carmelo le gustaba, ella lo veia junto a Enrique y penso ¡quién tuviera unos años menos!, estaban bellos los condenados y también entendió por que Johana estaba loca por Enrique.

Los chicos las trataban con muncho respeto, cariños, hacia bromas y jugaban con ellas parecian, no veia malicia en los chicos más bien las cuidaban como si fuera familia.

Terminó el fin de semana y regreso contenta al saber que su hija tenia buenos amigos con ella que la protegerian y feliz de que éste superando el trauma de acoso que tenía por culpa de Gabriel.

Después que su mamá se fue, ella le conto a Johana sobre la carta de Gabriel y del miedo que tenia de leerla.

Johana: la quieres leer (con la carta en la mano)

Karla: no sé

Johana: no te hará nada, literalmente, no te puede besar ni abrazar a la fuerza, por medio de una carta, no pierdes nada con leerla, para saber que quiere.

Karla: tienes razon, pero leela tu.

Johana: esta bien.

Abrio el sobre y comenzo a leer la carta en voz clara y alta.

...Carta de Gabriel...

...Karla, mi luna no encuentro las palabras para pedirte perdón, sé que perdí el control y te asuste, pero no quiero que me veas como un moustro, porque no lo soy....

...Quiero que sepas que tengo el corazón destrozado y el alma hecha pedazos porque te fuiste, sé que fue mi culpa, qué cometi un error y te he causado mucho dolor, no solo a ti sino también a José Gregorio, a quién ya le pedi perdón, estoy muy arrepentido de mi compartamiento, te amo....

...Quiero que me prometas, qué te portarás bien, qué me esperaras y yo prometo no te molestarte más, si quieres puedes regresar y aunque me sea difícil, no me acercaré a ti, pero si te voy a demostrara que soy capaz de cambiar y luchar por tu amor, he decidido esperar a tu transformación y cuándo seas mi mate, mi luna, la unica dueña de todo mi ser, te demostraré, que mi amor por ti es real. Lo siento mucho corazón, por favor perdome....

...Siempre tuyo Gabriel....

Johana estaba emocionada leyendo la carta suspiraba, para ella esa carta, le parecía una bella declaración de amor, mientras Karla negaba con la cabeza y sitio temor de ser la mate de Gabriel.

Johana: ¿le vas a contestar?.

Karla: no, que siga esperando respuesta, hasta que se canse, no quiero darle falsas esperanzas.

Johana: tienes razón y ¿si de verdad eres su mate?

Karla: falta mucho para eso, igual tiene que esperar por mi transformación, que espere una respuesta de una carta, no es nada.

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