Tranquilidad pasajera

Han pasado algunos meses desde que Emily se mudo a su nueva casa, a recuperado su color, las eternas ojeras ya se han borrado, ahora se ve muy satisfecha con su vida. En este momento se da cuenta realmente cuanto le había afecta el acoso de ese tipo desconocido.

Anteriormente no podía salir con sus amigos o compañeros de trabajo, en cuanto ponía un pie fuera de su casa encontraba regalos, cartas, cosas que hacían obvio que alguien la vigilaba. Cuando intentaba salir al parque a caminar o hacer ejercicio sentía que alguien la observaba, tenía miedo de salir, cada vez dormía menos, su salud estaba deteriorándose.

Pero todo eso se a cabo y ahora estaba realmente feliz con su vida.

Recientemente se integró una chica a la compañía, tiene aproximadamente la misma edad, al verla es como si viera una hermana perdida, se parecen bastante, si las ves de un vistazo. Sin embargo cuando están juntas se notan las diferencias.

La encontró por casualidad un día en el baño y fue una sensación muy rara; solo se han cruzado un par de veces pero ella siempre de la una sonrisa amable. Pero por lo que dicen sus compañeros tienen personalidades completamente distintas, mientras que Emily después de recuperar su confianza es ahora la Emily extrovertida y alegre que ha sido gran parte de su vida. Y la “otra  Emily” es de un carácter más distraído, sumiso e introvertido.

El año está por terminar y la carga de trabajo aumenta, en esta ocasión mandaron personal extra para poder terminar a tiempo los balances de fin de año. La empresa ha sido comprada por una multinacional y tiene que estar todo listo para dar la bienvenida al nuevo CEO, al cual presentaran en la una gran fiesta organizada solo para ese fin.

“Hola, mi nombre es Nathaly, espero nos llevemos bien”, “hola, mi nombre es Deren, un gusto conocerlos”, “Hola equipo, soy Will trabajare con ustedes”, “hola…”

Así los cinco nuevos miembros del equipo se fueron presentando. Emily y su doble estarían trabajando juntas por un periodo de tiempo.

El trabajo fue armonioso al parecer habían enviado personal muy bien calificado para auxiliar al departamento de finanzas.

Emily estaba contenta, el trabajo pronto llegaría a su fin, estas jornadas largas terminarías, El jefe de departamento los invito a cenar como agradecimiento.

Todos fueron, y aun que Emily y Nathaly trabajaron juntas no habían cruzado más que el saludo y la despedida.

Terminada la jornada, todo el equipo se reunió afuera de la empresa, irían por unos tragos a un karaoke cercano.

Todos platicaban y reían, Emily realmente necesitaba una tarde de diversión. Estaba agotada y este tipo de actividades le inyectaban energía.

Noto que aunque Nathaly no hablaba mucho había tomado bastante; sus compañeras mujeres ya se habían retirado, ella estaba por irse y Nathaly se quedaría sola en ese grupo de hombres tomados. Emily lo pensó mucho y no la podía dejar ahí a su suerte.   

“Bueno chicos Nathaly y yo nos retiramos”

Nathaly no sabía que decir, estaba confundida, era lo que quería hacer. Salir de ahí y no quedarse sola con sus compañeros varones en ese estado, pues aun que se veía que todos eran respetuosos en una ocasión anterior ya había tenido que lidiar con el mal carácter de Will cuando esta ebrio, y no quería regresar  sola a casa. Pero ante la insistencia de que siguiera tomando con ellos Nathaly se sentía indefensa. Así que al escuchar a Emily sus ojos brillaron, ella se dio cuenta de lo incomoda que estaba y fue a su auxilio. Sin dudarlo Nathaly se levantó de su asiento  y fue junto con Emily, se despidieron de todos cuando ya estaban en la puerta. Sin dar oportunidad a ninguno de ellos de insistir en que se quedaran por más tiempo.

Fuera del lugar Nathaly le dio las gracias a Emily; se despidió y tomaría el camino contrario al de Emily, sin embargo, Will salió tras ellas y esperaba a que Nathaly estuviera sola, Emily lo vio de reojo y noto que sus intenciones no eran buenas. Después de tanto tiempo de lidiar con su acosador ella desarrollo un sexto sentido que le hacía notar las intenciones de otros, ella estaba siempre en un estado hiper alerta, aunque no quisiera.

Nathaly había dado unos pasos, cuando Emily la alcanzo, la tomo del brazo y le dijo en voz alta, para que el hombre que esperaba la oportunidad para atacar escuchara. “hey, chica te has equivocado el auto de mi novio esta de este lado, ¡vamos!”

Nathaly no entendió nuevamente, pero cuando estuvieron juntas, Emily le susurró al oído “Will está esperando encontrarse contigo a solas, ¿quieres ir con él?”, Nathaly se puso pálida y con voz temblorosa le contesto “claro que no, él me da miedo”. Emily conocía ese sentimiento así que la tomo del brazo y la guio a su auto rápidamente para perder a Will.

En el auto ambas dieron un gran suspiro de alivio.

“G-Gracias Emily”  

Emily solo de dio una calida sonrisa, arranco el auto y fueron a su casa, “Creo que es mejor que esta noche la pases en mi casa, espero no tengas ningún problema con eso”

Nathaly asintió con la cabeza y le devolvió la sonrisa. Cuando llegaron a casa, Emily la invito a entrar. Su casa  no es muy grande ni muy pequeña, estaba decorada de forma minimalista pero había una sensación de calidez que hacía sentir a Nathaly como si estuviera en su propia casa.

Emily le dio un breve recorrido “aquí está la cocina, el baño, el estudio, mi recamara y aquí dormirás tu” dijo Emily mientras la guiaba a una recamara y le extendía un pijama para que pudiera usar.

Antes de ir a dormir Nathaly toco a la puerta de Emily

Tkoc tkoc…

Emily abrió un tanto soñolienta

“Nathaly, ¿pasa algo?”

“N-nada, solo tengo un poco de miedo, puedo dormir contigo”

Claro, chica es algo raro para nuestra primera vez dijo Emily mofándose de la situación, dejando pasar a Nathaly.

En la cama Nathaly se movía demasiado no podía dormir, Emily noto su inquietud y comenzó a hacerle la plática para que pudiera relajarse de lo contrario ninguna dormiría esa noche.

Nathaly estaba avergonzada pero no podía evitar estar intranquila.

“¿Dime Nathaly que te preocupa?”

“Realmente no lo sé, me comencé a sentir intranquila en la habitación sola, tu casa es agradable pero aun así es un lugar desconocido para mi”

“Está bien, no te preocupes, a mí tampoco me gustan cambiarme de casa, es muy incómodo volverse a acostumbrar a un nuevo entorno, cuando llegue aquí las primeras noches veces al despertar notaba que era un lugar desconocido y entraba en pánico”

“ya veo, somos parecidas, ¿de dónde eres?” soy de la ciudad X, pero me fui de ahí cuando tenía como 18 años”

“Que casualidad Nathaly yo también soy de la ciudad X pero mi familia y yo nos mudamos cuando yo tenía 16 años”

Qué casualidad… pensó Nathaly

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