Capítulo 16

Armin 

Había estado tan ocupado y lleno de cosas estos días, mi tío estaba encima jodiendo siempre que podía, me estaba sobrecargando de sobremanera y me había desquitado un poco con Leda, incluso Aaron estaba sorprendido cuando le respondí de esa manera a ella. 

—No me digas nada —Le digo un poco enojado, había tratado de calmarme unas horas, pero mi tío había vuelto a llamar a mi oficina. 

—Sobrino, si necesitas ayuda —Le doy una palmada al escritorio, para mirarlo. 

—Ya sé todo lo que hiciste con este banco, nos veremos en unos días en la próxima reunión, ahora ¡Sal! —Señalo la puerta, estaba demasiado enojado, si no fuera por él, estaría con mi novia, estaría disfrutando con ella y mis hijos, ahora tenía el doble del trabajo —. No dejes que vuelva a pasar, llama a seguridad si es necesario, tampoco permitas que salga del país. 

Me había dejado llevar por el impulso y le había dicho que valdría mierda dentro de poco, ahora iba a huir, trato de poner mi mente en reposo, pero solo recordaba los pendientes que tenía y no puedo descansar. 

Finalizo bastante tarde, y duermo alrededor de dos horas en la oficina, cuando me levanto vi que tenía más documentos, esta vez era de aerolínea. 

—Maldita sea —Suelto en español para seguir trabajando, casi a las 12 de la tarde llamo a Leda, la discusión sube de tono y notaba que ella estaba seria, me desquitó y ella me cuelga, nuevamente siento la mirada de mi secretario. 

El mensaje de que no me iba a hablar hasta nuevo aviso era claro, recordaba el carácter de Leda, ella me podía a mandar al carajo si veía la oportunidad, porque siempre me decía que ningún hombre iba a pasar sobre ella, incluso si lo amaba perdidamente.

Conrad me habló a las horas preguntando porque Leda estaba tan seria, le explique que habíamos discutido y solo respondió "Discúlpate con ella, no tengo que saber mucho para saber que fuiste tú" Hasta mis hijos estaban de acuerdo con mi novia, ya sabía que ganó el cariño de los gemelos, pero no pensé que sería a tal nivel.

Mi hijo mayor me manda una foto de ella, estaba con ropa grande mientras cocinaba con su familia, pude ver que estaba sonriendo, al lado estaban los gemelos jugando con los primos más pequeños de Leda.

Cerré los ojos reflexionando que estaba haciendo, me había alejado de ella, en una época que es muy dura para las embarazadas, ha estado ocupada, cuidando a mis hijos, siempre pendiente de todo. Claro que estaba enojada conmigo, la había botado prácticamente, debía tomar decisiones rápidas.

—Señor, nuevamente se encuentra aquí —Era mi momento, no podía dudar más.

—Llama para una reunión de emergencia, el que no llegue no será tomado en cuenta —Le digo mientras me levanto para poner correctamente el saco del traje, no podía perder el tiempo.

Una hora después todos estábamos en la reunión que yo había destinado para dar toda la información que Leda me había ayudado a recolectar.

—¿Qué era tan urgente? —Pregunta mi madre.

—Voy a destituir a alguien de los cargos y lo que venga legal antes de que yo fuera presidente del banco.

—¿Qué quieres decir? —Pregunta uno de los presidentes de la nación.

—Bueno, en cada carpeta que deben tener la frente está señalado algunas fallas en las cuentas que se hace semanal, mensual, trimestral, semestral y anual —Todos empiezan a ver los documentos —. Las señaladas son las que no concuerdan con otras mensuales o semestral, quiere decir que se ha dado más dinero de lo usual, y como las personas cambian al dar el informe, algunas fueron compradas y otras no.

Cuando empiezo a dar toda la información que se recolectó durante este tiempo, cada expresión va cambiando en los implicados.

—¿El culpable no sería tu primo? —Miran y este se pone pálido.

—No —Muestro unos documentos de la inscripción de una universidad de Arte en Italia —Estaba estudiando en ese tiempo, más bien, siempre estuvo estudiando, jamás fue el verdadero presidente del banco.

Las expresiones fueron un poema, mi madre se acomoda en su asiento bastante incómoda.

—¿Entonces quién es el verdadero presidente todo este tiempo? —Señalo a mi tío.

—Siempre estuvo detrás de todo esto, solamente puso a su hijo en ese puesto porque sabía que no le importaba nada, él jamás pudo hacer parte de este mundo, porque no tiene el talento para hacerlo.

—¡Oye! —Cuando se trata de levantar del asiento, los de seguridad lo vuelven a ubicar.

—No puedo encerrarte, pero desde hoy serás investigado a fondo para ver que más tienes encima, no podrás salir de tu casa, la policía ya debe llegar —Me levanto de mi asiento —Adicional a los demás socios, las reuniones serán virtuales, porque debo volver al país de mi pareja.

—¿Vas a dejar todo tirado? —Pregunta uno y sonrió.

—Jamás, lo que inicio lo termino —Me acomodo el traje —Más bien, lo haré desde la comodidad y también podré hacer conexiones en América para expandir —No vi nada de objeción al decir lo último.

—¿Cuándo piensas volver? —Repaso un poco para ver que haría.

—No sé, tal vez en unos meses, junto a mi esposa e hijos, tal vez mucho más tarde, no lo sabré.

—¿Dejarás un gerente?

—Sí —Señalo a mi madre —Pero empezará luego de una semana o dos, porque irá conmigo —Ella me mira sorprendida —Le deseo muchos éxitos a todos, nos veremos en una semana.

Cierro con broche de oro la situación, para llamar a que alisten el primero avión para ir a verla, ya le había pedido a los empleados de mi madre que prepararán una maleta para ella, aunque era bastante básico porque necesitaría comprar ropa allá.

Ella no estaba en la ciudad, por eso había encargado un carro, sumado que había llamado a más guardaespaldas.

—En medio de todo esto, ¿por qué estoy yo aquí? —Pregunta Aaron en el carro.

—Eres buen secretario y cuentas como guardaespaldas, entonces eres positivo en todos los sentidos.

Un mensaje de Conrad me confirma que están en el pueblo, bajaron a comprar algo que Leda quería, dentro de poco llegaría, entonces sería una gran sorpresa.

Podía ver lo distinto que era el lugar a lo que vendría siendo Alemania, al ver un caballo, incluso mi madre se había emocionado, era muy diferente el ambiente. A lo lejos la vi caminando con los gemelos, ellos tenían un helado en mano.

Pare el carro para tocar su hombro, se sobresaltó al tocarla, pero al verme quiso sonreír, pero luego se giró como si nada.

—Mi reina, lo siento —Le digo mientras agarro su cintura, ella suspira, mi madre también llega a mi lado y los niños gritan en alemán "Abuelita" Puedo sentir las miles de miradas en nosotros, ella se cruza de brazos para verme.

—No me gusto nada esa actitud tuya —Me dice seria, yo asiento.

—Lo siento mucho, te juro que no volverá a pasar.

—Joder —Susurra ella, para poner sus manos por mi cuello, le costaba un poco por lo alto que era, pero su sonrisa me encantaba —Gracias por volver y venir a pedir disculpas hasta aquí.

—Por ti, bajaría la luna —Le doy un beso y ambos sonreímos en medio de este.

—¿no deberías presentarnos? —Es mi mamá la que interrumpe nuestro cálido momento, hago la breve presentación, Leda con una gran sonrisa estira su mano, mi mamá la acepta y luego la abraza diciendole algo en el oído, enarco una ceja.

—¡Papá! —Los niños saltan sobre mí y cargo a ambos.

—Niños, ¿cómo les ha ido? —Siempre hablando en alemán, la mirada de los desconocidos se volvió más intensa sobre nosotros.

—Bien, papá ordeñamos una vaca tres veces —Los niños muestran con sus dedos —Bueno, yo lo hice, Braun le sigue dando un poco de miedo —Asiento riendo.

—Yo monté a caballo —Dice Braun —Se veía muy alto, aunque me han dicho que soy un niño muy grande para mi edad —Mi pequeño se ríe mientras cuenta su historia.

—Están emocionados —Dice Leda viéndolos hablar rápido en alemán.

—Bastante, me están contando sobre la vaca y el caballo.

—Sí, no sabes la emoción que tuvieron.

—Padre —Siento la voz de Conrad, me volteo a verlo, estaba con la hermana de Leda y el primo.

—Conrad, ¿cómo estás? —Me saluda y me mira sonriendo al ver que ya estoy mejor con Leda.

—Vengan con nosotros —Señala el primo de Leda, para llevarnos por unas calles, miro a Aaron que miraba todo como si estuviera sucio y no puedo evitar reír por sus gestos.

—Amor, ¿no estás muy elegante? —Se me había olvidado que seguía con el mismo traje —Debes bañarte, ya vi por tu mirada que viniste derecho luego de una reunión.

—Amo que me conozcas tan bien —Ella niega riendo.

Unos minutos después llegamos a la casa del novio de la abuela que nos iba a permitir bañarnos, era un mundo diferente, pero era divertido explorar de esta forma.

—Hijo, ¿no podemos comprar una finca de aquí? —Pregunta mi madre emocionada, pensé que ella sería más creída que Aaron.

—¿Estás segura, mamá?

—Sí, quiero tener una vaca y un caballo también —Suelto una carcajada, se veía demasiado emocionada.

—Podremos investigar, no te preocupes.

Al salir de la casa, la familia de Leda nos estaba esperando, todos estaban más arreglados de lo común.

—Necesitamos organizarnos porque iremos con más familia —Habla mi suegra, mi mamá se acerca emocionada a ella, para empezar hablar, puedo notar lo nerviosa que está la madre de Leda, pero hace lo posible para llevar el ritmo.

—¿por qué tomaste la decisión de venir?

—No te quería dejar sola, odio cuando discutimos —En lo poquito que llevábamos de relación habíamos tenido varias discusiones, que a la hora de la verdad no eran nada, pero a menudo era por nuestras culturas o la edad de ambos.

—Yo también —Se recuesta en mí, y le doy un pequeño beso, ambos caminamos cogidos de la mano, los niños adelante con los primos de mi novia, totalmente felices por lo nuevo que estaban viendo.

Conrad con Andrea y el primo de ellas, Aaron estaba hablando con la abuela de mi mujer, era bastante chistoso, que el hombre que era capaz de hacer todo estaba siendo regañado por creído por la abuela.

—Qué pena con tu empleado, como está siendo regañado. 

—Es como un hermano —Le digo riendo, para seguir caminando con ella, las miradas no se hacían esperar, no me importaba porque de verdad estaba disfrutando el momento, pocos aprecian estos momentos, he tenido grandes hoteles, pero nada como esta experiencia. 

—Oh, es tu esposo —Veo un hombre que le está hablando a Leda, enarco una ceja. 

—Es el tío, el que tiene la finca donde los niños estuvieron —Susurra hacia mí, para luego hablarle formalmente a su pariente —Sí, este es Armin. 

Una breve presentación y estábamos sentados con cerveza, los niños habían ido con Leda al parque. 

—Ella es bonita, ¿no? —Me pregunta otro pariente de Leda. 

—Sí, bastante. 

—Es una muchacha muy educada, ahora vino un poco diferente, ayudando a cocinar y estando pendiente de los niños. 

—Sí, es algo difícil para ella en su estado. 

—Es verdad, pero ella es fuerte —Responde la abuela mientras toma la cerveza. 

Veo a mi mamá tomando una cerveza, estaba demasiado feliz, incluso Aaron estaba tomando. Era bastante divertido ver esta situación, sigo escuchando como hablando de Leda, de lo linda que era en todos los aspectos. 

A lo lejos la puedo ver, su cabello recogido en una trenza, sus lentes bien ubicados, tenía un short que la hacía ver perfecta, su vientre se notaba más de embarazada y con la camisa básica que tenía se notaba el doble. Los gemelos venían corriendo hacia mí, mientras ella les gritaba un "Tengan cuidado" 

No me arrepentía de tomar ese vuelo, escucho a mi madre hablar. 

—Quiero comprar una finca, ¿dónde puedo hacerlo? —Cierro los ojos para aguantar la risa, mi madre no le importaba nada más que comprar una finca.

—Depende, tengo muchos conocidos que quieren venderla. 

—Quiero conocerlos. 

—¿Cuánto es su presupuesto? 

—Eso no importa —Mi madre responde, mientras eso llega mi hijo mayor y me dice algo que me hace sentir verdaderamente orgulloso.

—Quiero iniciar algo que haya más señal aquí en los pueblos, que los niños puedan tener acceso a internet y se puedan instruir mucho más. 

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