¿Tú quieres ser mi novia?

Me voy a la cocina por un vaso con agua, camino lento y con cuidado, cuando un rayo cae e ilumina toda la cocina, me asusto. Dejo caer el vaso y me tenso totalmente.

° ¡Dime qué estás bien!

Escucho hablar a Franco desde el pasillo.

° Sí... Sí...

He... Yo dejé cae el vaso por el susto.

Franco viene a mi encuentro y en el camino se golpea el dedo de su pie, pega un grito y yo me asusto aún más.

° ¿Estás bien? Voy para allá.

Camino lentamente y alumbró con la vela que llevo, trato de caminar con cuidado por los vidrios del piso. Veo a Franco recostado en la pared.

Él ríe por lo torpe que es.

° No te preocupes estoy bien.

Nos sentamos en la alfombra del pasillo y reímos por lo que acaba de suceder. Bebemos un poco de té, ya que el frío se hace notar.

Franco acomoda mi cabello detrás de mi oreja y yo río tímidamente. Nos miramos y vaya que está tentación o que sé yo no me puedo resistir miro sus ojos que brillan por la luz de la vela, me acerco él hace lo mismo y se da aquel beso que espere desde que acepte que me gustaba.

Él toma mi cintura se acomoda y quedó junto a su pecho, ese beso se intensifica al igual que las caricias, mis manos están sobre sus enormes brazos. Me levanta sobre ellos y seguimos hasta mi habitación.

° Tú... Lizzie no puedo resistir más y quiero hacerte mía como anhele desde el momento en que te vi.

Escucho atentamente cada palabra que me dice Franco...

° Franco me gustas mucho y siento que esa atracción tiene más que solo un gusto...

Franco me vuelve a besar y se colocó encima de mí, yo le quitó la camiseta lentamente y él hace lo mismo, sé que quiero intimar con él. Así que me acomodo y voy sintiendo su erección rozar mis piernas, veo sus pectorales marcados y sus besos van bajando sobre mi pecho, es tan delicioso cuando hace eso.

Regresa nuevamente a mis labios los muerde suavemente y ...

° Estás lista.

Yo asiento y él se va introduciendo en mí, gimo y él se mueve tan rico, que yo estoy tocando las nubes, voy sintiendo como se contrae mi interior, me muevo a su ritmo.

Vaya que este hombre sabe lo que está haciendo, sus movimientos son tan placenteros, me muerde el cuello y luego juguetea con mi pezón.

Ya no puedo resistir más y me humedezco él sonríe y me besa.

Se mueve más rápido y dice mi nombre al dejar salir todo de él.

Estamos en la cama y solo la luz de una vela nos acompaña, luego el pasillo se ilumina, nos vemos los dos y Franco me jala hacia su cuerpo, me observa todo y yo me pongo nerviosa.

° Lizzie, sabes cómo se diferencian cuando uno tiene sexo no solo por simple placer, sino por qué lo sintió desde adentro.

° Diferenciar el placer, mmmm...

Pues no, no sé.

° Dime tú, que sentiste cuando estuve contigo.

° Me gusto, no fue igual que antes. Y no por decir que haya tenido muchas parejas sexuales, sino que pude ser yo.

Franco ríe...

° Lizzie no te voy a juzgar por tu pasado, no puedo ni debo hacerlo, te conocí en un momento en el que no la pasabas muy bien que digamos, estabas saliendo de una relación con tu futuro esposo. Planteaste por meses tu boda ¿no es así?

Y al final no se llegó a concretar, nadie te debe juzgar por lo que te sucedió, nadie conoce el dolor de otros ni lo que lleva por dentro.

Es tan tranquilizante poder escuchar a Franco hablarme de esa manera, me siento en paz cuando estoy con él, llevamos más de un mes conociéndonos y hasta ahora tuvimos sexo... Pero que somos...

° Franco dime algo, después de esto volveremos hacer los mismos.

Franco me observa y sonríe...

° Pues no, ya no somos los mismos... Yo ya no te puedo ver como una amiga...

Me siento inquieta al escuchar hablar así a Franco me levanta mi rostro y besa nuevamente mis labios...

° Después de lo que sucedió entre nosotros, yo te quiero pedir ...

... Hay Dios que me va a pedir que me aleje de él y que no me le acerque jamás... Mi mente vuela en esta incertidumbre tremenda.

° Lizzie Thever Alcázar, ¿tú quieres ser mi novia?

... ¡Que hay! no como me dijo que ... Que yo su novia. O sea aún existe esto, después de que me plantaran antes de mi boda y con muchos engaños a cuestas, él me está pidiendo que yo sea su novia... ¿Eso me dijo?

° Lizzie, dime algo y no me dejes así... Yo necesito saber si tú sentiste al estar conmigo pues que me correspondes...

Lizzie Me has gustado desde que te vi y quise hacerte mía muchas veces, pero no quería que pensarás que yo era uno más del montón. Lizzie Te amo mucho.

💓.

° Franco tú... Yo... M mm ¿tu novia?

° Si Lizzie, quiero que seas mi novia, yo Franco Pízquela te pide que seas mi novia, la mujer que quiero para compartir mi vida y que seas feliz junto a mi lado.

° Sí, Quiero ser tu novia. Franco eres muy especial para mí y quiero estar contigo siempre.

Franco me besa y yo me hundo en su pecho. Nos quedamos juntos así. Fue nuestra primera noche juntos y fue especial a la luz de unas velas y con el sonido de la lluvia, aunque el clima era frío, nuestros cuerpos se dieron calorcito.

Fue maravillosa esa noche.

Al despertar no sé ni que hora es, me levanto y al mirar mi cama veo el torso desnudo del hombre que hace unas horas me pidió que sea su novia. Duerme tranquilamente. Voy a la cocina preparo unos cafés junto con panecillos dulces, también cocino algunos huevos con tocino y preparo la mesa.

Estoy trayendo algunas servilletas y siento que unas manos me toman por la cintura, me da un beso en mi cuello y yo dejo caer las servilletas al piso.

° Me gusta que te sientas así por mí, preciosa.

° Franco, siéntate y tomemos desayuno antes de que se enfríe.

Esa mañana fue tan linda, despertar con él y desayunar juntos entre bromas y anécdotas de nuestras conversaciones pasadas. Se quedó conmigo todo el día, hasta que tuvo que irse a su Penthouse, ya que horas más tarde tendría que estar en el bar. Me vendrá a buscar para ir juntos a divertirnos entre música y algunos tragos.

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