Solo tu

Ana se vistió, Marcos la miraba sabía que malinterpreto sus palabras.

Marcos: Ana, creo que no entendiste por más que trate mis palabras.

Ana: entendí muy bien, ya me puede decir como salgo de la propiedad, o necesita más mis servicios.

Marcos al oírla su sangre hirvió, la agarro del brazo no midió su fuerza, la volteó, alzando su cabe, ahora que lo mirara a los ojos.

Ana sintió miedo, su mirada era de mucha furia, fuera de que le estaba haciendo daño con su agarre fuerte.

Ana: por favor me suelta, me hace daño.

Marcos: mira Ana si quisiera una compañía solo la cito en el hotel, no la traigo a mi casa, pero tu como que no entiendes eso, yo no ruego, te mandaré a tu casa.

Ana quiso llorar, Marcos lo noto, cogió las cosas y salió caminando, Ana iba detrás, se distrajo por un momento, cuando no vio a Marcos, siguió por donde creyó que era el camino, pero el camino era muy diferente, se perdió.

Ana, ahora si, que hago, con cuidado siguió, no vio nada, solo bosque, ella quiso devolverse pero no sabía como, se sentó, estaba asustada, no era nada aventurera menos de como guiarse en un lugar así.

Marcos solo camina, va pensando en lo idiota que es el, creyó que podía tener una cita normal, nada en el es normal, en un momento se volteó y no vio a Ana, se devolvió de pronto se quedó cerca, pero nada, en el camino no la vio.

no quería pensar, que se metió al bosque, era una zona áspera, llamo por su celular algunos hombres la buscarían, estaba preocupado un barranco, un animal, se culpaba, no debió dejarla sola, pero su furia le ganó.

Ana se sentó había caminado y era como en círculos, estaba cansada se sentó cuando lo hizo se cayó a un hueco, fue tanto su desespero su impotencia que solo lloraba, perdió su celular, no tenía como pedir ayuda, allí se puso posición fatal, oro porque ningún animal llegara o lloviera.

Marcos estaba desesperado, no había rastro, sus hombres ingresaron más al bosque, allí encontraron un zapato de ella, un arete, el peor cuadro que tenía se hizo realidad entró al bosque profundo.

Ana sintió frío, hambre, no sabía si era su imaginación, pero sintió que gritaban su nombre, se puso de pie, como pudo se había lastimado su tobillo con la caída, grito como loca.

Uno de los hombres de Marcos siguió el grito al mirar a los lados no veía nada, hasta que miró hacia abajo, una trampa profunda, el llama a Ana quien le contestó, se comunicó con Marcos y llegaron al sitio.

Marcos: Ana

Ana: si señor,

Marcos, pensó, ni perdida ni aporreada deja de creer que la traje acá como dama de compañía, en verdad está mujer tenía su autoestima en el piso.

Marcos: Ana vamos a sacarte de ahí.

Alistaron las cuerdas, Marcos bajo, la encontró, embarrada, sentada, se acercó, ella le dijo que el dolor en tobillo era insoportable.

Inmediatamente, bajan más cuerdas la suben con Marcos, es llevada a la casa, la llevan a la habitación, llaman al médico, Ana se queda en una silla.

Marcos: porque estás en una silla no en la cama.

Ana: estoy sucia no le voy a embarrar su cama.

Marcos: Ana en verdad, tu te creas las películas y te las crees, sabes por qué te paso eso, porque eres terca, Porque no confías en que alguien te quiera de otra manera que no sea para el sexo, tienes la autoestima por el piso.

si quieres puedes ducharte, mande a traerte ropa, el médico está que llega, y si ensucias algo no te preocupes, pago para que limpien.

Ana, está apenada, el ya no la miraba igual, se duchó como pudo, el dolor era horrible estaba hinchada, al salir de la ducha el médico la esperaba, la reviso y efectivamente fractura de tobillo, tiene que ir a un hospital.

Marcos está en su despacho, definitivamente, fue mala idea poner sus ojos en ella, no iría a la habitación, dejo al médico allí, luego la mandaría a casa, y no volvería a buscarla.

El médico le dio un calmante, salió, Ana como pudo tomó sus cosas, perdió su celular, no importa, al salir se despidió pero nadie le respondió, siguió derecho, le dolía mucho.

Al salir vio a un joven le pidió el favor de llamar un taxi o Uber no sabía ni donde estaba, el joven la miró raro, el sabía que Marcos dio la orden de llevarla a casa.

Joven: Jefe, la chica que está acá en la casa está afuera con sus cosas, me pidió el favor de llamar un taxi.

Marcos; ya regreso dio una orden.

el joven se acercó a ella le dijo que esperará un momento, el noto el dolor en ella, en esa el ama de llaves, la ve.

Ama de llaves: porque no se ha ido, no admito las mujeres como usted se va ya.

El Joven: lo siento pero.tengo.otras órdenes y yo obedezco al jefe, ella no se mueve.

El ama de llaves la toma y la empuja, Ana no se pudo defender y cayó, El joven corre a cogerla en esa entran los autos, Marcos baja furiosos.

El joven relata todo lo sucedido, Marcos eso no lo va a pasar, decidió irse primero, porque no quería verla salir, cuando le ve el pie está el doble de hinchado casi no puede caminar, no entiende, el médico le dijo que ya la había atendido.

Despido al ama de llaves, quien no creía lo que escucho, ella llevaba muchos años, era fiel a la familia.

Ana fue montada a uno de los carros directo al hospital, Marcos llamó al médico, quien le dijo que ella podía llegar a un hospital, que le dio medicamento.

Marcos: te pagué para qué la revisarán bien si había que llevarla al hospital me dices.

Médico: Sr. Marcos, el ama de llaves me dijo que usted dio órdenes que solo le diera algo para el dolor y saliera rápido de la propiedad.

Marcos: no me sirves, colgó.

el quería llevarla allí, porque creyó que era el lugar ideal, ahora se da cuenta que desde el principio Ana estaba prevenida, todos la trataron como si no valiera nada, porque saben que yo no tengo nada serio con nadie, que solo salgo con damas de compañía, fue mi error desde el principio.

En el hospital Ana fue atendida, está muy lastimada, la incapacidad 2 meses, tendría que hacer terapia.

Ana salió y vio a Marcos la esperada, el se acercó.

Marcos: que te dijo el médico

Ana: incapacidad y cuidarme

Ella se acercó a una caja, solicito la cuenta, saco su tarjeta para pagar, Marcos se le adelantó y pagó el.

Ana: No debió yo tengo para pagar, muchas gracias por traerme.

Marcos: Ana déjame llevarte a tu casa, es mi responsabilidad toso esto estaba en mi propiedad.

Ana: solo lléveme a casa

Marcos así lo hizo, la llevo a casa, la tía los recibió se asustó cuando ve a Ana así.

Ana: muchas gracias, por traerme

Marcos: si necesitas algo me avisas, adiós.

Ana solo ingreso a la casa, Marcos se sentía muy mal, ninguna mujer lo había movido así, le pidió permiso a la tía, para ingresar donde Ana.

Ana está en su habitación, Marcos entra,

Marcos: Ana, mañana regreso a Italia, quería algo diferente contigo, lo paso hoy nunca debió pasar, tal vez fue mala idea desde el Principio, yo no te quería como amante quería algo pero ni yo mismo sé, quiero que entiendas que solo tu, me llego a interesar de esta manera.

cuídate, adiós.

Q

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