Decidí entrenar este cuerpo

Estoy cerca de la boutique de lejos miro a Lucia conversando con los caballeros, por favor mira hacia acá, la veo que mira hacia todos lados pero aún no se ha percatado de mi, ¿ Qué hago?, me acerco un poco más pero sin exponerme, hasta que al fin ella me nota, le hago una Seña para que distraiga a los guardias, la escucho gritar y decir– UNA SERPIENTE. los guardias miran hacia donde señalo y yo aprovecho a entrar a la boutique, fiuuu, joder pensé qué no lo lograría, que alivio...

– Entra Lucia y dice: Su majestad gracias al cielo que regreso, ya no podía de los nervios..

– ya tranquila, lo hiciste muy bien..

– oh su majestad * hace reverencia * que honor que venga a visitar mi humilde morada..

– saludos madam Chanel, si pasaba por aquí y decidí entrar y su morada no tiene nada de humilde todo es muy lujoso.

– oh por favor, me halaga, su majestad, su doncella ya retiro su pedido, espero sean de su agrado.

– seguro lo serán! Ahora con su permiso me retiro... * Salimos de la boutique y nos vamos de regreso al castillo*

– Al llegar veo al mocoso... ¿ Qué hará aquí afuera?

– Al bajarme del carruaje, el viene corriendo hacia mi..

– mami te estaba esperando ¿ porqué has salido al pueblo sin mi?

– porqué quería salir sola, pequeño mocoso. Además que haces aquí, ¿ acaso no tienes deberes reales que cumplir?

– Si, pero tenia miedo de que no regresaras, pensé que me abandonarias * carita triste*

– Niño no exageres, solo salí un momento, ven, conmigo, me pondré ropa cómoda e iré a entregar contigo.

– De verdad * emocionado*

– Subo con el mocoso a mi habitación lo dejo sentado en la cama y voy al baño a cambiarme me pongo un pantalón y una camisa, de las que mandé hacer, oh sí, esto, está mucho mejor... La verdad lo he pensado y decidí comenzar a entrenar este cuerpo, es hermoso pero carece de músculos, en una lucha cuerpo a cuerpo con el Emperador o cualquiera que quiera matarme estaría en desventaja y además en mi otra vida estaba acostumbrado a hacer ejercicio, desde que llegué aquí solo eh aprendido como comportarme como una chica, siento que poco a poco voy perdiendo mi masculinidad y eso no está nada bien, salgo del baño y le digo al mocoso – vámonos guíame al campo de entrenamiento.. El me ve sorprendido por mi vestimenta pero no dice nada.

,– En el camino los empleados no dejan de mirarme y murmurar entre ellos, Ja me ven como si fuera un fenómeno solo por llevar pantalón,si supieran lo que tengo entre las piernas se morirían jajajaja buenos creo que yo también moriría pero por diferentes causas. Yo sería ejecutado por el Emperador.

– llegamos a un lugar bastante extenso y acondicionado con todo lo necesario para entrenar, veo a muchos hombres sudorosos algunos trotando, otros luchando con espadas, otros cuerpo a cuerpo y otros prácticando tiro, eso llamo mi atención, que puedo decir, me encantan las armas, yo tenía una colección muy amplia de ellas, mi favorita para trabajos a distancia era un rifle Tac-50A1--R2 y como mi fiel compañera siempre cargaba una Glock 45 semiautomática, calibre 9 mm... Lo bueno es que como sabía que mi trabajo era arriesgado tenía todo debidamente organizado ante un notario... Al salir mi acta de defunción mi abogado tenía autorización de vender todas mis pertenencias de valor y el dinero sería donado a causas beneficas, especialmente a ORFANATOS, como mi última voluntad quería ayudar a que los niños obtuvieran una mejor calidad de vida y no fueran unos desgraciados como yo... No era asquerosamente rico pero si tenía una casa totalmente pagada valorada en 975,000 dólares pero casi nunca la use no me gustaba llegar a una casa vacía prefería pasar mis noches en un hotel con alguna chica, también tenía un Lamborghini precioso color rojo con negro era mi bebé, además de ropa, zapatos, accesorios de Marcas exclusivas, y una cuenta de 7 cifras, espero que quien haya comprado mi colección de armas y a mi bebé, lo valoren y le den buen uso, en fin..... Aquí veo en su mayoría escopetas, nunca las use antes, pero no debe ser diferente a un arma cualquiera... Quiero intentarlo.

– saludos su alteza el príncipe, y su majestad la Emperatriz, me presento yo soy William Rodríguez, capitán del primer escuadrón imperial ¿que la trae por aquí y vestida así?

– ¿Qué tiene de malo mi vestimenta? * me cruzo de brazos y le digo mirándolo fijamente Yo pueda vertir, lo que me dé la gana o ¿ se atreve usted a decirme lo contrario a mi la Emperatriz de este imperio?

– * avergonzado* discúlpeme su majestad, no fue mi intención ofenderla pero dígame ¿ qué la trae por aquí?

– vine a entrenar, especialmente en el uso de armas de fuego.

–jajajaja,

–su majestad, las armas de fuego, no son un juguete, le sugiero otras actividades como el bordado, la jardinería y esas cosas que acostumbran hacer las damas de sociedad.

– William ¿ cierto ? * el asiente, en confirmación* le diré 2 cosas que debe saber de mi, la primera: yo no soy como cualquier damas de sociedad y la segunda:* molesto alza la voz y dice* ME ENFURECE QUE ME VEAN COMO ALGUIEN DEBIL, PORQUÉ NO LO SOY Y SE LO DEMOSTRÉ. * Camino hacia la práctica de tiro..

– Su majestad, espere ¿ a dónde va?...

– Al llegar tomo una escopeta y sin pensarlo, apunto al blanco y disparo * - pum! justo en el blanco, el impacto de la detonación me hizo retroceder pero me equilibre rápidamente, para no caer, siento como mi brazo tiembla, definitivamente es diferente a las armas que acostumbraba usar pero con un poco de práctica, me adaptaré y lo más importante sigo teniendo muy buena puntería, jajaja me hace recordar mis buenos tiempos... Volteo y le digo a William, –¿ sigues pensando que no sé cómo manejar a estos juguetes?

– Sebastián grita emocionado – MAMA ERES ASOMBROSA ¿ no lo creé así capitán?

– Si su alteza, sin duda, su majestad la Emperatriz es asombrosa.

– Qué bueno que ha quedado claro capitán... Ahora integreme al entrenamiento como un soldado más, no espero ninguna consideración o trato especial.

– Su majestad, antes tendría que consultarlo con su majestad el Emperador, esas son las reglas, solo los caballeros imperiales pueden recibir entrenamiento, espero lo entienda

– mmm! Bueno yo misma hablaré con el...por ahora me retiro... mocoso ¿ te vas o te quedas?

– Si madre vamos, ¿ hacia donde vamos?

– iré hablar con tu padre para que me dé el permiso para entrenar.

– oh sí entiendo, ahora que lo pienso, recordé que tengo algo que hacer, nos vemos luego madre... * se va*

–sospecho que ese mocoso es un cobarde... Bueno no importa.... * llegó al despacho y tocó la puerta* toc-toc....

– Adelante...

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Saludos y bendiciones para todos 😘😘😘 Gracias por apoyar y leer mi obra, como les prometí, comienza el maratón, espero lo disfruten...

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